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Kyungsoo se sintió presionado; la mirada acosadora de este hombre desconocido estaba irritándole. No entendía cuál era el motivo de sus ojos desesperados esperando una respuesta de parte de él. Cuando estuvo a punto de contestar, oyó que fue llamado por su jefe.

-¡Kyungsoo, por favor ven un momento!

-Sí, ahora voy -avisó hacia el dueño, mirando de nuevo al otro que ya lo había soltado -Discúlpeme, volveré en un segundo.

-Oh, no, no... -se negó luciendo un expresión avergonzada -Lo siento, creo que oí mal y por eso llamé tu atención. Discúlpame por retrasarte.

-Está bien, si necesitan algo, háganmelo saber -pidió con amabilidad y una leve reverencia, caminando hacia su jefe.

Chanyeol le siguió el paso con la mirada buscando por allí alguna silueta que diera con aquel jovencito cuyo nombre comenzaba con "B". Sin embargo, no encontró ninguno. Pensó que quizá estaba volviéndose loco y que escuchar ese nombre había sido producto de su imaginación. Lo extrañaba, lo echaba de menos y sabía que de alguna manera, la cabeza del ser humano siempre busca apaciguar este sentimiento con alucinaciones o pensamientos de tal índole. Se dio cuenta que no tenía sentido pensar en él en ese momento, ¿no estaba allí para relajarse? Si Baekhyun aún no lo había contactado, era porque seguramente aún todavía no lo había decidido, ¿por qué debía estar tan apresurado por eso? No debía desesperar, las cosas siempre llegan a quienes, justamente, saben esperar. Y eso era lo que haría.

A pesar de sus razonamientos, en realidad estaba totalmente equivocado. No había oído mal, ya que Baekhyun, del otro lado y en el depósito del bar, estaba nervioso pensando sobre qué hacer a continuación. No se trataba de Chanyeol, por supuesto que no; por una parte, le alegró tanto verlo después de tantos días que su corazón palpitó desenfrenado en su pecho, pero quien no sabía cómo afrontarlo ahora era él.

¿Qué iba a decirle? ¿Tenía que disculparse por nunca haberlo llamado en esos treinta días que pasaron? ¿Debía decirle la razón por la que no lo contactó? ¿Que todavía tenía pánico con respecto a Jaehyun y que se había dado cuenta que ya no lo amaba? O quizá... ¿debía contarle que tenía un conflicto interno con sus sentimientos y que lo único que hacía era pensar en él, y en aquellos primeros y únicos besos que se dieron? Desde ese día, se había vuelto bastante consciente de él. Quizá se sentía así porque era la primera vez después de tanto tiempo que lo habían tratado con amabilidad y sin intenciones ocultas. Entonces, ¿cómo reaccionaría el señor Park al oír aquello? ¿Se reiría en su rostro, saldría corriendo o... todavía querría ayudarlo? ¿A pesar de saber que él, con perversión, pensaba en él de esa manera?

-¿Baekhyun?

Este dio un respingo disipando todas aquellas preguntas e ideas parásitas de su mente, encontrándose con el rostro de su amigo quien lo miró extrañado.

-Uhm, ¿sí...? Estaba buscando algunas copas aquí para...

-¿Realmente estás bien? Te ves pálido -mencionó con preocupación -¿No quieres descansar?

-Ya tomé un descanso y estoy bien... -titubeó, recordando las palabras de Junmyeon -Creo que quien debería descansar unos momentos eres tú.

-¿Ah? Yo estoy perfectamente bien.

-Fue el jefe quien me lo pidió -insistió -Desde que llegamos no has dejado de moverte -regañó.

-Tengo que indicarte para que me sigas el paso -se defendió.

-Ya me enseñaste bastante bien y aprendí rápido, ¿no? Así que, ¿puedes tomar un descanso, por favor? -pidió -Prometo hacer las cosas bien en tu ausencia.

𝑶𝒍𝒊𝒗𝒊𝒂 ➳ chanbaekWhere stories live. Discover now