𝑶𝒍𝒊𝒗𝒊𝒂 ➳ chanbaek

➳ 21

Chanyeol aparcó el vehículo frente a la modesta casa y miró hacia esta con la mano apretando el volante, volteándose hacia su hija.

-¿Realmente quieres ir? -le preguntó -Si cambiaste de opinión, podemos volver a casa.

-Pero si hacemos eso mamá se pondrá triste.

-Mamá lo entenderá, así que dime si quieres quedarte o no.

Olivia en su asiento trasero lo miró y asintió, acomodando su mochila púrpura en su espalda con el muñeco de peluche en forma de conejo que colgaba de una de sus manos, lista para bajar.

-Si, mamá me dijo que quería que me quedara a dormir en su casa hoy.

-Lo sé, pero si no quieres no tienes que hacerlo -le recordó -¿Te dijo algo más?

-No, sólo que me extrañaba -contestó ella con cierta ilusión.

El que su madre le dijera aquellas palabras cuando nunca antes las había oído de su boca le creaban algún tipo de emoción y revoloteo en su estómago. Se sentía como si su madre hubiera comenzado a quererla.

Notó en su padre el desconcierto en cuanto ella dijo eso y la observó, haciendo una leve y débil sonrisa.

-Está bien, entonces bajemos.

-De acuerdo~

Ambos salieron del auto y Chanyeol acomodó delicadamente el fino flequillo oscuro que se asomaba en la frente de la niña, colocando este detrás de su oreja y mirándola con completo cariño.

-Escucha, si sucede algo, lo que sea... tienes mi número -le recordó -Papá vendrá a la hora que sea, no importa si me llamas en cuanto entras o por la madrugada, vendré por ti, ¿de acuerdo?

-Si~

-Bien, entonces vamos. Te acompañaré hasta la puerta.

Olivia tomó la mano de su padre y ambos caminaron directamente hacia la morada, subiendo los pequeños escalones de la entrada. La puerta de madera oscura imponente frente a ellos llevó a que Chanyeol diera unos leves toques. En menos de un minuto, los pasos dentro del lugar se acercaron y la puerta se abrió, dejando ver a la mujer de cabello castaño del otro lado.

-Hola, mamá~

Goeun miró a Chanyeol unos segundos y luego su vista viajó hacia la pequeña niña a su lado, haciendo una leve sonrisa con sus ojos brillantes.

-Hola, pequeña~

Chanyeol no pudo evitar pensar que el tipo de expresión que la mujer estaba haciendo ahora mismo era como verla en el rostro de su hija; después de todo eran idénticas.

Aunque Olivia tenía el mismo color de su cabello, en realidad era lo único en lo que se parecía físicamente a él. Toda ella era de su madre, cada facción o gesto, la manera en la que hablaba o la que miraba; era innegable decir que no había ningún parecido entre ellas.

-Traje mi rompecabezas para que juguemos juntas -dijo la niña con ilusión -¿Podemos hacerlo después de cenar?

-Por supuesto~ puedes entrar a dejar tu mochila dentro, iré en un segundo.

Olivia sonrió con felicidad y miró a su padre, abalanzándose sobre él para darle un apretado abrazo a modo de despedida.

-No estés triste~ es como cuando voy a dormir a la casa de la abuela, ¿sabes?