20. Par De Rebeldes

538 39 8
                                    

Después de aquella salida por un helado, mi Crush y yo hemos estado más que bien, estaba cumpliendo su promesa, no lo ha arruinado.

—Entonces... ¿Qué me pongo?, ¿la playera de cuadros negros con blanco o la playera blanca con puntos azules marinos pequeños? —preguntó Dominic frustrado.

Lo miré con una ligera sonrisa—. ¿Por qué estás tan nervioso? solo es una cita —rodeé los ojos, originalmente yo soy la que se pone nerviosa, una vez estuve hablando como por dos horas con mis amigas para elegir mi ropa para la "cena familiar" o mejor dicho con mi Crush.

—Sí, solo es una cita, pero mis padres quieren que sea perfecta —habló refregándose la cara.

—Para empezar... ¿Quién es la chica? —pregunté al fin, desde hace dos semanas está estresado por una cita y no me ha dicho quién es la afortunada.

—¿Recuerdas a la señora que nos daba dulces cuando íbamos con mi mamá a su trabajo? —asentí—, es amiga de la hija menor de la señora —suspiró.

—No te ves tan feliz por la cita —alcé una ceja.

—En si no es una cita, no vamos a estar tan solos, la voy a llevar al baile de su escuela, mis padres quieren que sea mejor que un caballero con ella y no sé cómo lo voy a hacer —enredó en sus dedos unas hebras de sus cabellos y tiró de ellos.

—Déjame adivinar, ¿mis tíos quieren que tengas una relación con ella? —pregunté y Dominic asintió sin verme—, ¿quieres tener una relación con ella? —pregunté acariciando su espalda, estoy segura que mis tíos no le preguntaron.

—Es linda, pero... No me gusta y yo no le gusto, es lesbiana, me lo confesó hace cinco días cuando fuimos a buscar su vestido y la pillé viendo a un grupo de chicas —suspiró.

—No sé qué decirte —confesé.

—No pretendía que lo hicieras, Pulga —me miró sonriendo un poco—, mejor cambiemos de tema, ¿cómo te ha ido con él? —preguntó dejándose caer hacia atrás en mi cama.

—Ha ido todo bien —sonreí.

—Sí se nota —sonrió al igual que yo—, todo el equipo se ha dado cuenta que ha estado muy feliz desde hace un par de semanas, la semana que lo ignoraste ni nos volteaba a ver, tenía un humor —alzó las cejas—, sí que lo tienes a tus pies —soltó una risita negando con la cabeza—. Era obvio que esto iba a pasar, nadie se puede resistir a los encantos de un Betancourt —me guiñó un ojo.

—No tengo encantos, solo soy yo —me encogí de hombros para acostarme a su lado viendo al techo.

—Tú eres un encanto —habló con simpleza—. ¿lista para el último día de instituto? —preguntó girando su cabeza hacia a mí, mordí mi labio inferior, no me gustaba hablar de ello.

Significa el cierre del ciclo escolar, obviamente me alegra por fin terminar el periodo escolar pero eso significa que... Él ya se graduará, no lo veré más por los pasillos del colegio sonriéndome y guiñándome un ojo, ya no lo veré entrenar, ya no le diré que es un fastidioso por mandarme mensajes en plena clase, cada mañana al abrir mi casillero no veré más una nota deseándome un lindo día acompañado de un pequeño chocolate, ya no veré sus lindos ojos viéndome directamente a mí a pesar de la multitud, ya no saldremos a pasear a escondidas de mis hermanos y de Joel, ya no correremos por la plaza para que no nos pillen juntos, ya no llegaré a la casa con una rosa y tener que inventarme miles de excusas con mi mamá para evitar las preguntas de mis hermanos. Ya no estaremos juntos.

—Oh, nena, ven —Dominic abrió sus brazos y me acorruqué con él.

—Ya no lo veré más —mordí mi labio inferior evitando soltar un sollozo.

Un Simple ErrorWhere stories live. Discover now