Un Simple Error

56. This Is Halloween Bitch III

—Oh, vamos. Liliana. Mi abuela tiene mejor puntería que tú.

Se burló por tercera vez Jac de Lili que estaba frente a la mesa con la pelota de ping pong en las manos apuntando hacia los vasos, de los cuales no ha caído ninguno dentro de ellos. Lili estaba con las cejas juntas mientras tenía los labios juntos viendo directamente los vasos que estaban casi a un metro de distancia de ella. Jacob estaba con una sonrisa burlona mientras llevaba a su boca una botella de cerveza a sus labios sin dejar de mirar a Lili con burla evidente.

—Mejor cierra la boca, Cooper.

Refunfuñó Lili moviendo sus hombros hacia atrás mientras le echaba una mala mirada a Jac que no se inmutó, al contrario, sonrió más.

—De los diez vasos que están allí, no has metido la jodida pelota en ninguno.

Y por segunda ocasión Lili infló las mejillas a la vez que ponía los ojos en blanco con fastidio.

—Apenas estoy entrando en calor.

Se excusó viendo a Jacob que soltó una carcajada llevando la botella de cerveza hacia su boca mientras estaba apoyado cómodamente en la barra del pequeño bar que estaba a unos cuantos metros de distancia de las mesas donde antes estábamos todos.

—Eso dijiste en las dos anteriores rondas, boba.

—No me digas boba, tonto.

Exigió Lili haciendo su típico berrinche golpeando el piso con su pie fuertemente, parece niña pequeña cuando no le dan lo que quiere y hace un berrinche magistral.

—Sí, sí. Lo que digas... boba.

Comentó sin importancia empinando la botella de cerveza tomando un largo trago apoyado con su antebrazo en la barra donde a unos metros también se encontraba Black con una pequeña sonrisa de burla mientras tomaba agua embotellada. La primera ronda ganamos Black y yo, en la segunda Lili y Jacob —que cabe de recalcar que Jacob fue el que hizo todo el trabajo— y ahora estamos esperando a que Lili se decida a tirar para seguir el juego. Admito que estaba con el pendiente de que Lili comenzara con sus cosas, pero no, todas las veces que hemos tomado ha sido por nuestra cuenta y sin retos como lo suele hacer la rubia de mi amiga.

Lili exhaló aire de sus pulmones fuertemente antes de reacomodarse y apuntar hacia los vasos, yo estaba a nada de jalar una silla para sentarme, estaba cansada de esperar parada como estúpida frente a la mesa, no pude evitar rodear los ojos cuando Lili volvió a respirar profundamente con la mirada fija en los vasos.

Por Dios, ¿Qué carajos le pasa hoy?

—¿Acaso quieres que te ayude a lanzar una estúpida pelota, Liliana?

La pregunta llena de fastidio por parte de Jacob abandonó sus labios, mi mirada se desvió hacia el chico que estaba vestido como jugador popular de las películas con la única diferencia de que estaba caracterizado con maquillaje de hombre lobo que a decir verdad le queda muy bien. Jacob dejó su cerveza en la barra y acomodó su cabello café peinado hacia arriba para luego dirigirse a Lili que estaba inclinada un poco hacia la mesa para "perfeccionar su puntería".

En cuanto Jac estuvo a unos centímetros de estar detrás de ella, se reincorporó abruptamente y se apartó, casi se cae cuando lo hace. Mis cejas se juntaron al verla actuar así. En serio. ¿Qué putas le pasa hoy?

Jac alzó sus cejas al igual que sus brazos y dio un paso para atrás alejándose de Lili.

—Solo estoy disfrazado de hombre lobo, mujer. No es como si te fuera a morder.

Bufó con cierta burla Jac caminando hacia atrás antes de volver a la barra. Lili pareció relajarse, ella volvió hacia la mesa y sin pensarlo mucho lanzó la pelota que... no volvió a caer en ninguno de los vasos.