Un Simple Error

55. This Is Halloween Bitch II

La fiesta había comenzado y con ello la casa se comenzó a llenar de más y más personas, estaba con Dominic y Jacob antes, pero ahora con tanta aglomeración los perdí, dijeron que iban a ir por más papitas para nosotros, pero ya han pasado varios minutos y ni siquiera se ven los dos idiotas.

Di un escaneó a lo que pude en la sala, pero mi mirada se desvió hacia el sillón donde se encontraba Mai sola que sonrió al ver a su novio llegar a ella, Carter se sentó a su lado para luego pasar su brazo por encima de sus hombros para luego atraerla a él y depositar un beso en su mejilla, Mai solo le sonrió con las mejillas ruborizadas recostándose en su pecho.

Me gritaron sola en todos los putos idiomas habidos y por haber del maldito mundo. No estoy literalmente sola, ya que estoy rodeada de personas, pero saben a lo que me refiero. Terminé de hacer mi escaneo a ver si, aunque sea podía ver las alas del disfraz de O'Farrell o ver al Power Ranger  verde que era Thom, pero nada, no veía a nadie de mis amigos.

Desde que comenzó la fiesta el mudito idiota y Guzmán se perdieron. Ya no los he visto. Ojalá y que se vayan al carajo, que les aproveche su desaparecida, al cabo que no me duele o me afecta que mi amiga se vaya con el idiota que apenas descubrí que me gustaba.

Pfff... No me afecta en nada.

Ni un poquito.

Me afecta más que no haya papitas en el bol a que esos dos se estén... Haciendo de todo.

Creo que estoy siendo mala amiga. Lili me vino a visitar y yo me enojé porque solo Black y ella coquetearon.

Pero Lili sabía de Black.

Ella no tiene la culpa de que Black se fijara en ella, no me debo de enojar por ello.

Pero si Lili fuera nuestra amiga, hubiera respetado lo nuestro con Black. Ella incluso dijo que había algo allí con él.

¿Y eso qué? A Lili le gustó Black y Black a ella, nadie se puede resistir a ella. Es entendible. Lili es hermosa.

Pero nosotras lo somos más, duh.

Claro que no, Lili es perfecta y yo soy... Yo.

Por eso. Somos hermosas siendo nosotras mismas, Black es un idiota por no verlo y Lili es una mala amiga por no respetar nuestra amistad.

Mejor olvidemos eso, quiero divertirme y no pensar en estupideces.

Agité mi cabeza apartando todos mis pensamientos, entonces en ese instante fue consciente de la música que estaba a todo volumen y rebotaba por las paredes de la casa, de las personas que estaban a mis extremos bebiendo y casi gritando para que pudieran mantener una conversación con sus acompañantes, pasé mi mirada desinteresada por la barra, pero mis ojos se detuvieron en cuanto apareció en mi campo de visión una botella de tequila a la mitad.

Creo que acabo de encontrar mi distracción.

Canturreé feliz en mi interior, eché una mirada a mis costados en busca de si mis amigos se veían por ahí, pero una sonrisa se formó en mis labios al confirmar que seguía igual de solitaria, eché el taburete hacia atrás como pude y bajé de él para ir hacia al otro lado de la barra y servirme de ese tequila que esperaba por mí y mi garganta seca.

Al llegar hacia la botella busqué un vaso que afortunadamente estaban a mi lado, destapé con cuidado el tequila y serví un poco menos de la mitad, en cuanto terminé de servir el tequila busqué con la mirada soda.

No quería ponerme tan ebria con el primer vaso, quiero empezar tranquila.

Busqué con la mirada la soda, la cual la encontré en la isla de la cocina donde por cierto había personas "hablando" con las bocas unidas, puedo apostar que hasta se estaban metiendo la lengua a la garganta, en cuanto llegué a la isla tuve que empujar a las dos parejas que estaban cerca de la soda para tomarla y salir huyendo de ahí antes de que otra cosa sucediera, la música electrónica se empezó a escuchar a todo volumen pero mis cejas se juntaron al no escucharla aquí en el interior de la casa, dirigí mi mirada hacia la sala mientras me disponía a abrir la soda, como si hubieran dicho que estaban regalando dinero, las personas que se encontraban en el interior de la casa comenzaron a caminar hacia las puertas de cristal que daban hacia el patio. Casi suspiro en alivio cuando ya no tendría que ver a tantas personas aquí, solo estarían las personas que se estarían besando o las que si quieren dialogar. Iba a bajar la mirada hacia mi vaso cuando mis ojos identificaron una melena rubia con una diadema negra que adornaba su cabeza. Era Liliana.