Décimo primera parte

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Una sensación tras otra, era lo que sentía el ojimorado cuando topaba sus labios con su... ¿Compañero? ¿Amigo? ¿¡Compañero con beneficio?!

...

¿Siquiera eso existe...? Que le jodan, no había manera de no admitir esa adictiva sensación que sentía el oficial en esos momentos, por tener los labios contrarios peleando con su misma boca. Su único obstáculo para detenerse era la carencia del aire.

Pero tan pronto se separaron y vieron cada facción de sus rostros... ambos eran un desastre. Pero, si el ojimorado ya había iniciado todo esto... ¿Por qué detenerse? ¿No habían ya roto varias leyes? Probablemente, pero ambos sabían que no podían volverse más ilegalisimos de como lo eran ahora.

Entonces, volvieron a juntarse en uno solo, porque aparte de que el oficial quiera volver a sentir los labios del criminal, también necesitaba seguir experimentando ese sentimiento demasiado nuevo para el, pero también tan agradable, que no lo entendía.

Por que es así, no entendía, simplemente no lograba entender que quería, ¿Acaso...? ¿Acaso era simple curiosidad? ¿O realmente le gustaba sentir al contrario cerca?

...¿Y Porqué Samuel está sintiendo la lengua del criminal dentro de su boca?

Eso en cierta forma, sacó al ojimorado de sus pensamientos, e incinsientemente sus manos intervinieron en el torso del criminal, por mero instinto, quería creer.

Cómo también quería hacerse la idea de imaginar cómo se veían los dos, en ese auto, muy MUY pegados y revelando sus verdaderos sentimientos, con sus acciones.

Pero el aire ya era escaso y el oficial supo que se habían acabado las excusas, y sólo separó sus rostros, pero no alejo sus mano del torso contrario. Aunque estaban recuperando todo el aire perdido, Samuel hablo primero.

- Bien... he, concentrate ahora, ese era el trato. - objeto, su tono queriendo ser autoritario, por lo que volteó en dirección al volante del auto, ahora alejándose sus manos, fingiendo que la misión era la prioridad en ese momento, y que lo que acaba de pasar hace un instante, no había sido nada, sólo... pretendiendo eso.

Pero Rubén, no podía sentirse tan lleno de energía, como ahora. - Mhm, usted manda, oficial... - alarga su tono juguetón, siendole imposible esconder la sonrisa de tonto, ni su coloreado en las mejillas, ni tampoco, sus sentimientos.

Realmente, está vez los dos sentían algo ilegal, ambos metieron la pata, pero... sus corazones también eran culpables, ¿No?








***

¡Buen día, alegría!

Primero que nada, ¡Happy pride month! 🕺🕺🏳️‍🌈 <333

Y en segundo, me lie un poco en este capítulo, poque no sabía cómo sería la escena del beso, aaasí que, mezcle de todo un poco y salió esto, es muy corto, pero quería dejarles esto antes del mucho testo.

Pero, en fin, tengan buen día siempre, se les quiere muchísimo y no olviden sentirse orgullosos por sus gustos o por lo que quieren ser, no tomen en cuenta a los malos comentarios ¡Sean vosotros mismo!

The criminal - Rubegetta AUWhere stories live. Discover now