Alfa Ideal (Kookmin)

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Primer mes de cortejo

Cuarta semana

Era la última semana del primer mes de cortejo de Jimin y Jungkook, las cosas iban cada vez mejor para la próxima pareja.

Para esta semana el alfa tenía preparado algo muy especial, había escrito una canción para su omega, tenía una lista con los pasos a seguir para este viernes.

Comprar la cena.

Comprar flores. 

Comprar un oso de peluche. 

Escoger minuciosamente su outfit. 

Ducharse.

Vestirse con el atuendo previamente seleccionado. 

Peinar su cabello.

Dejar salir un poco más su aroma. 

Ir por su Omega. 

Regresar a su departamento (con su omega, por supuesto).

Cenar. 

Darle la sorpresa.

Hasta el momento tenía listos los tres primeros asuntos en la lista. Ahora se encontraba frente a su armario, tratando de elegir el mejor atuendo para la noche, su alfa se lo exigía, no entendía por qué quería estar tan presentable para Jimin, tenía el presentimiento que hoy sería un día muy especial.

Luego de algunas pocas horas, bueno, muchas horas en realidad. Para ser específicos cuatro horas más tarde, estaba frente la puerta de la casa de los Park, quitando arrugas imaginarias de su ropa, acomodando su cabello. Cuando la puerta se abrió, un par de pequeños bracitos rodearon su cintura.

- Alfa - ronroneo Jimin.

- Hola, mi pequeño omega.

Un pequeño beso fue dado en los labios del menor. Quien no pudo evitar decir lo guapo que se veía su alfa, con un sonrojo en sus mejillas.

Caminaron hasta el auto en el que vino el mayor, el camino al departamento del alfa fue muy corta, iban cantando las canciones que pasaban en la radio. Al rededor de diez minutos después, estaban frente a la puerta del hogar de Jungkook.

- Realmente espero que te guste - murmuró un poco nervioso.

Jimin fue el primero en entrar, todo el departamento se veía acojedor, estaba adornado con todo tipo de flores, la mesa tenía un lindo mantel blanco y un centro de mesa muy moderno, velas iluminaban tenuemente el lugar.

- Es precioso, Alfa. Gracias. - corrió a abrazarlo.

Jungkook soltó el aire que no sabía estaba conteniendo, devolviendo el abrazo, dirigió a su Omega a la mesa. Una vez estuvo perfectamente sentado, se perdió dentro de la cocina, regresó con dos platos con comida en ellos, una pechuga de pollo a la florentina y una fresca ensalada era el acompañamiento.

- Provecho, Omega. Espero que te guste la comida.

Maldición, Jungkook seguía con los nervios de punta, repitiendo una y otra vez lo mismo.

Jimin soltó una risita baja y empezaron a comer. Una vez terminaron, Jungkook desapareció del comedor y regresó con una guitarra y un oso de peluche.

- Hoy es la última semana de nuestro primer mes de cortejo, he querido hacer algo aún más especial para ti, la canción que voy a cantar la he escrito para ti, es por eso que esta vez no tendrás una carta. Te quiero, Omega.

Un suave "te quiero también" emitió el Omega. La melodía empezó, los dedos de Jungkook se pasaban por las cuerdas, tratando de no olvidar nada y todo saliera a la perfección.