31

3.8K 352 11
                                    

Jungkook no lograba procesar la información que se le fue dada. Las únicas palabras que su cabeza repetían era Mi celo, me marques. Era como un coro.

- Alfa ¿me escuchaste?

La voz de Jimin lo sacó del bucle en el que estaba metido, meneando la cabeza dirigió su mirada a su Omega quien tenía los ojos brillantes de ilusión y sus mejillas sonrojadas.

- Te escuché, Omega. Pero, ¿Estás seguro de eso?

No es que él no quisiera estar en el celo del Omega, en lo absoluto. Pero necesitaba estar seguro de que eso era lo que su pareja quería, no que se sintiera obligado a nada.

- Lo estoy, Alfa. Quiero llevar tu marca.

- Está bien, lo haremos. Pero tomaremos supresores ¿De acuerdo?

- ¿No quieres cachorros?

- Por supuesto que quiero cachorros, Omega. Pero aún eres muy pequeño para que los tengamos. En un futuro está bien.

- Claro, Alfa. Sé que quieres lo mejor para ambos.

Los días pasaron, Jungkook estaba preparando todo para el celo de Jimin. Namjoon ya no vivía con él, habían comprado un departamento junto con Yoongi, quien al parecer estaba esperando un cachorro. Como ya tenía el departamento para el solo, la antigua habitación de Namjoon sería utilizada para hacer el nido para su Omega, compró cientos de frazadas y almohadas para armarlo. Lo llenó con su aroma, lo hacía, lo deshacía, hasta que estuvo satisfecho con el resultado.

El tiempo pasó volando, ahora mismo se encontraba frente a la casa de Jimin, quien ya lo esperaba en la puerta con una pequeña maleta. Ya habían hablado con los padres del menor, quienes no pusieron pero alguno con la decisión que había tomado su cachorro, si él se sentía seguro de portar la marca de Jungkook, ellos no se opondrían, sabían que el Alfa era el alma gemela de su pequeño y que no lo dañaría.

Cuando llegaron al departamento del Alfa, éste le vendó los ojos, abrazándolo por detrás y dejando pequeños besos en su cuello, lo dirigió hacia la habitación que había preparado, una vez en ella, quitó la venda de sus ojos.

- Alfa, un nido. - el aroma de Jimin era muy fuerte desde que lo fue a recoger a su casa. Y ahora feromonas de felicidad llenaban el ambiente.

- Un nido, precioso. Es un nido para ti.

Jimin corrió hacia su nido, embriagandose con el aroma de su Alfa, todo era tan suave y esponjoso. Ronroneos y suspiros de felicidad soltaba su pequeño cuerpo.

- Me gusta, Alfa. Muchas gracias.

Jimin seguía frotandose en el nido, pronto ambos aromas estaban combinados. Empezó a sentir calor, sentía un fuego creciente en su abdomen, su aroma empezó a salir más y más fuerte.

- Alfa. - suspiró.

Jungkook, teniendo una idea de lo que estaba pasando. Pidió permiso para entrar al nido.

- Omega, ¿puedo entrar al nido?

Jimin asintió - Claro que puedes, Alfa.

Despacio, fue entrando al nido. El aroma de su Omega ahora era más fuerte. Sus pupilas empezaron a dilatarse, sus fosas nasales se expandieron, sus colmillos empezaron a crecer.

- ¿Tomaste los supresores?

- Sí, Alfa.

No espero más y empezó a desvestir a su pareja con suaves y lentos movimientos, besando cada porción de piel que iba siendo descubierta, delicadas caricias fueron esparcidas por el pequeño cuerpo de Jimin, que se dedicaba a soltar bajos gemidos.

Suspiros entrecortados y balbuceos tiernos por parte del Omega, gruñidos bajos y roncos por parte del Alfa.

Se dedicaron a demostrarse su amor, Jungkook se tomó el tiempo necesario para poder dilatar a Jimin, calmando con tiernos besos en los párpados, mejillas y labios cada vez que un dedo se unía a la dilatación. Esta vez, su primera vez, sería lenta y suave, tratando de demostrar todo el amor que sentía por su Omega. Ya habría tiempo para el sexo rudo.

Cuándo la temperatura del cuerpo del Omega empezó a subir, cuando los gemidos y suspiros bajos fueron reemplazados por gritos y exigencias altas. Su miembro se fue abriendo paso en la entrada del menor, no perdiéndose ninguna expresión, desde su boquita abierta soltando gemidos, hasta su mirada brillante y pupilas dilatadas. Las embestidas empezaron suaves, lentas, hasta tomar un ritmo constante. El cuerpo del menor se movía al ritmo de las mismas, el pene de Jimin brillaba con presemen, las manos de Jungkook estaban por todos lados, torturando los pequeños pezones, dando suaves caricias al rostro de su Omega, en la cadera para tomar impulso.

El sonido de su pieles chocando, el lubricante natural del Omega escurriendo por los muslos, el aroma de ambos llenando la habitación, el constante martilleo a su próstata, todo eso fue el detonante de Jimin, quien en balbuceos logró decir.

- ~Alfa~, vo~y ~a corre~rme.

- Hazlo, bebé. Correte para tu Alfa.

Chillando se corrió, sin haberse tocado, chorros de calientito semen bañaron el abdomen de ambos. El nudo de Jungkook comenzaba a formarse, sin perder el ritmo de las embestidas fue forzando a entrar a la cavidad del menor, una vez su nudo dentro, llegando hasta la punta de su pene quedó enganchado en el cuerpo de su Omega. Jimin, inclinó la cabeza hacia un lado y él sin pensar dirigió su boca al cuello del mismo, sus dientes perforaron la tierna piel del Omega cuando el primer chorro caliente de su esencia fue directo a la próstata del mismo. El menor al sentir la mordida, el nudo y el semen bañar su interior, se corrió nuevamente.

Luego de unos segundos, Jungkook sacó sus colmillos y empezó a lamer la mordida, sanando esta al instante. Soltó un suspiro feliz, acomodando al Omega dormido sobre él, esperó a que el nudo bajara y pudiera conseguir algo de comer y beber para ambos antes que el calor consumiera de nuevo a Jimin.

Estaba feliz, ahora tenía a su Omega entre sus brazos y le demostraría que el es El Alfa Ideal.




FIN













Créditos a su autora original.
Sweet-Cheek

Adaptación sin fines de lucro.

Aicko Min 💜

Esta historia a llegado a su fin, espero les haya gustado como a mi.

Se los iba a subir mañana pero ya quería terminarla y empezar con otra pendiente.

Alfa Ideal (Kookmin)Where stories live. Discover now