Lovey-Dovey 💕 KookTae

[kingbee] |2|

—Hyung, necesito que me ayudes a buscar a... —leyó la última postal fingiendo buscar el nombre del sujeto, Tampoco iba a quedar como un desesperado frente a su Hyung, okay, de acuerdo, más de lo que ya lo hacía. —Jeon JungKook.

—¿Jeon JungKook?—repitió el nombre saboreando cada letra, buscando en su mente a alguien en específico. —El nombre me suena, pero no sé. 

Recargó sus codos sobre la mesa del laboratorio de Física, —en donde veían su aburrida clase sobre "los movimientos ondulatorios"—dejando que su cabeza fuese sostenida por sus manos, dejando que sus mejillas se hinchen donde sus dedos se hunden. Observó al castaño impaciente a su lado, quien le había contado sobre la carta que había recibido donde se le confesaban de una manera extraordinaria. Mas bien que le inundó el chat de Kakao con un ensayo de "porqué esta confesión es la mejor de todas" y luego sustentó muy bien dichos argumentos al hablarle por una hora de porqué él se merecía el universo según el tal Jeon JungKook.

—Necesito que... Ya sabes muevas tus hilos un poco y me averigües quien es. Es importante. —pidió, juntando sus manos en una súplica. —Te prometo que te ayudaré en lo que necesites, incluso a conquistar al primo de ChaeYoung.

Yoongi hizo una mueca, no tenía muchas cosas que perder si no resultaba. Además, él quiere salir con Jimin pero era muy tímido como para preguntarle.

—No te aproveches de mi debilidad, Kim TaeHyung.—susurró "amenazante" mientras lo señalaba con su cara inflamada por el sueño del cual no lograba recuperarse al cien por ciento.

»—Hyung, por favor...—volvió a suplicar mientras exageraba un puchero en sus labios.

Bueno, no tenía nada que perder solo consolar el corazón roto del omega y tal vez perder unos cuantos wones comprando fresas cuando le entre la etapa de omega depresivo con síndrome del corazón roto.

—Bien, te ayudaré-

—¡Gracias! —exclamó en un susurro para que la profesora no lo escuchara.

—Pero... No te voy a asegurar que lo encuentre, preguntaré por ahí. —aclaró el pelinegro haciéndose el desinteresado, recibiendo un asentimiento como respuesta, escaneó la estancia buscando a alguien que lo pudiera ayudar y dio con la persona que necesitaba. Definitivamente TaeHyung debía hacer que Park le besara los pies como recompensa o si no se las verá con él. —Hoy es tu día de suerte. Espérame aquí, le preguntaré a NamJoon.

—¡Okay!

Viendo la figura del alfa alejarse de su mesa, recordó la odisea que fue tratar de encontrar a alguien que estuviese dispuesto a ayudarlo entre sus reducidos contactos. Fue desde los conocidos de primer año hasta los de último año donde el único que estuvo disponible fue Yoongi, como siempre. A todos les había hecho la misma pregunta: "¿conoces a un chico llamado JungKook? Es que me debe mucho dinero" trató de no ser tan obvio, aunque no de la mejor manera, cabe destacar que Kim TaeHyung no siempre tiene los mejores planes y le había hecho a un pobre desconocido la fama de mala paga. De todas formas, la respuesta había sido negativa en cada uno de los casos, llevándolo a creer que de verdad nadie lo conocía, así como el autor había descrito en su carta.

Nadie me conoce en realidad.

No podía ser cierto, pensó, todos tenemos amigos y personas con las que nos relacionamos, no creía que el chico no tuviera ninguna interacción social con sus compañeros de aula.
Alguien debía saber quién era Jeon JungKook, él necesitaba saberlo.

Antes nadie había apreciado su personalidad como tal, siempre le decían que era una buena persona, pero jamás habían desglosado qué era lo que "buena persona" significaba para ellos. Claro, había recibido incontables veces aquellos testimonios que decían: