O.O3

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Los ojos de la chica se abrieron de par en par y dos orbes oscuros la recibieron.


— ¿Qué me pasó? — preguntó tratando de sentarse en la camilla del hospital, pero su garganta dolió al hablar y tosió unas cuantas veces.

Heeseung, el cual se le había quedado mirando segundos antes de que ella despertara se sintió incómodo y nervioso al estar sólo con Yewoo en la habitación. Se rascó su nuca dando dos pasos hacía atrás marcando una separación con la chica que antes no tenía.

— Bueno, te desmayaste en tu casa y te trajimos aquí junto con tus padres. — Heeseung no sabía exactamente como hablarle, ni como actuar frente a ella, así que una sonrisa pequeña fue lo que le brindó. La de flequillo le miró raro, ¿Qué estaba haciendo él ahí? No tenía nada que ver con ella, cualquier lazo que tenían se había cortado desde que Soodam murió.

— ¿Qué haces aquí? — esta vez se refirió a la presencia del mayor. Ella no estaba enojada, sinó que confundida.

Repasó con su mirada la habitación blanca y asquerosa del hospital. La última vez que ella estuvo ahí fué cuando no pudieron salvar a su hermana, y no terminó bien. Tenía unos aparatos pegados a su mano, estaba segura que le dolería si se movía. El aire acondicionado le estaba dando directo y por eso sus ojos como su nariz estaban rojizas pasando desapercibido por el despistado chico a su lado.

Cuando Heeseung iba a contestar, otra voz le interrumpió haciéndola molestar.

— Da gracias que te trajimos aquí, o sino estarías muerta en tu habitación. — Ese chico... No tardaría en pararse y matarlo con sus propias manos. — Si te preocupas un poco por ti, come algo y deja de estar dando pena con tu falsa depresión.

— Ni-ki... — Heeseung pensó que esta vez sí se estaba pasando de la línea.

Yewoo guardó silencio. El chico neurótico tenía razón, debía comer pero no quería hacer nada, no tenía ganas de levantarse a menos que la persona que lo hiciera fuera su hermana. Pero ahora estaba muerta.

— Realmente no le deseo a nadie este sentimiento. — comenzó ella sin levantar su mirada de su regazo donde sus dedos se enrredaban entre ellos. Tomó un respiró decidiendo ya no llorar. — Imagina que tu hermana esta muerta. La primera persona en la que te apoyaste, con la que creciste, con la persona que te apoyaba en las decisiones que elegías por más estúpidas que fueran. Imagina que de un día al otro ya no estuviera ahí. Ya no vas a sentir su olor, ni la vas a escuchar hablandote, dandote fuerzas; ya no la vas a tocar. ¿Qué harían? — observó por ratos las acciones de los dos chicos, ambos tenían la mirada clavada en sus pies y no parecían poder moverla. — Soodam fue su mejor amiga, pero para mí fue mi hermana, mi sangre y mi alma gemela. No tengo amigos. Ella era la única amiga que tenía, ¿Qué se supone que haga ahora? Eso es lo que me pregunto todos los días, a todas horas. Ahora, ¿Ustedes llorarían por alguien, hasta llegar a esto? Se fue mi todo y no sé cómo voy a vivir mi propia vida.

El silencio que se formó después del discurso de la chica no fue incómodo, fue más un silencio para reflexionar.

Ni-ki no era mala persona, y en parte entendía a la pequeña hermana de Soodam. Nishimura creció -literalmente- junto a Soodam y de lejos observaba a su hermana. Tenía comportamientos raros y muy diferentes a los de su hermana mayor, eso hizo que el japonés no sintiera interés por acercarse a ella y por ell se acercó a Soodam y se enamoró de ella hasta el último día de su vida. Alzó su mirada y vio a Heeseung morder su labio buscando en que fijar su mirada.

only you ↺ n. ni-ki.Where stories live. Discover now