Capitulo 29.

696 72 17
                                    

Otro día más en su vida, se encontraban en la comisaría.

No había nada, ni asaltos, ni coches robados, ¡O hasta un maldito secuestro les servía! Pero nada, todo estaba tranquilo y eso era la parte más aburrida del día.

Desde hace rato estaban sentados en la sala de espera, no había nada bueno que hacer.

Gustabo se cansaba de estar sentado, así que decidió de una vez por todas pararse para caminar aunque sea un poco por la comisaría, sentía que se iba a entretener un rato.

- Ahora vengo, voy a caminar por ahí - Le dijo a Horacio, quien solo asintió mientras seguía viendo su celular.

Se paró y se dirigió a la puerta que llevaba a las celdas o a la planta de arriba, decidió primero ir a la planta de arriba ya que sabía que en las celdas se podría entretener un poco más debido a la gente que metía ahí y podía insultar a diestra y siniestra.

Mientras caminaba por los pasillos escucho una conversación algo... interesante.

-¡Entienda que nosotros no estamos en una relación!- Gritaba una de las personas, no iba a hacer memoria porque no tenía ni puta idea de quién era.

-¿Cómo que no?- Escucho una voz algo vieja - Si tú y yo llevamos saliendo hace mucho.

-¡Señor, entienda!- Gustabo se pego más a la puerta, para escuchar mejor - Yo tengo mujer, nosotros no somos nada.

-¡¿Cómo que no?!- Escucho la voz vieja un poco más fuerte - Que yo recuerde tu y yo estábamos pim, pam, pim, pam.

- Pero Facundo, ¿de que estás hablando?- Se escucho la otra voz ligeramente preocupada, y una risa de fondo.

Al parecer habían tres personas en la sala.

- Oye, Mahmud, todo esto no es verdad, no le creas nada - Al parecer la voz desconocida se dirigía hacia la tercera persona.

Joder, que solo venía por aburrimiento y me estoy comiendo tremendo chisme.

Pensó Gustabo, mientras pegaba más la oreja a la puerta, completamente metido en el chisme.

- Yo digo que dejes a tu mujer, ella es la otra - Mahmud soltó - Facundo debería ser el único en tu corazón, Amancio, deberías respetar su relación.

-¡Eso!- Grito la voz vieja - Pero mira, Amancio, o tú reina o tú ruina, tu eliges, guapo - Y escucho pasos acercarse a la puerta, por lo que se separó rápidamente.

Cuando la puerta se abrió, pudo apreciar a un viejo demasiado viejo, quién lo vio de arriba para abajo y luego colocar una sonrisa.

-¡Pero mira que tenemos aquí! - Se acercó a paso lento «tampoco es como que pueda ir muy rápido, debido a que se veía de muy avanzada edad» hacia Gustabo, quién lo veía con una mirada divertida -¿Sabe oficial? Me gusta mucho su traje, parece ser alguien poderoso.

Gustabo lo vio con una sonrisa en el rostro y negó rápidamente.

- Lo siento, señor, pero yo ya tengo un Sugar Daddy - Facundo «suponia que era» lo vio con una sonrisa en el rostro.

-¿Y ese viejo te complace bien, oficial?- Cuando el iba a responder, otra voz lo interrumpió.

- Claro que mi polla lo complace, anciano - La voz brusca de Conway hizo que si presencia se notará, se encontra detrás de Gustabo viendo al viejo que le coqueteaba con tanta facilidad - No creo que la suya se siga parando, mirando su edad.

Gustabo se quería reír, literalmente dos viejos se estaban peleando por el, cosa que nunca pensó que le pasaría.

- Ya nos vamos, Superintendente, disculpe las molestias - Conway solo vio a dos cadetes llevándose al viejo que coqueteaba con su pareja.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jul 08, 2022 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Mal hábito.Where stories live. Discover now