Mi nueva vida no es lo que esperaba

Definitivamente, no se esperaban eso

24 de diciembre, víspera de navidad, normalmente este día seria feriado y no habría la necesidad de ir a clases o trabajar, o al menos así era en mi mundo anterior, en cambio ahora ya me había acostumbrado a que el 24 de diciembre fuera como un día cualquiera, claro que el 25 si era un día feriado.

Pero viendo el lado positivo de esto, seria que los amigos que no podían verse el día de navidad podían intercambiar regalos un día antes, claro que hasta este momento nunca había hecho nada parecido, después de todo no tengo amigos.

Incluso no había considerado hacerlo este año, pero Rumi fue muy insistente en que debía regalarle algo tanto a Miura y Kawasaki. Y como buen hermano mayor no pude negarme a su petición, además supongo que tampoco era mala idea hacerlo.

Y aunque al principio tuve complicaciones con no saber que darles de regalo, tuve un momento de iluminación al observar a Kawasaki por lo que aproveché para comprar sus regalos. Solo espero que sean de su agrado, ya que Rumi se molestaría si les diera algo que no fuera de su agrado. A veces no entiendo que es lo que piensa mi linda hermanita menor.

Escuchar la campana me saco de mis pensamiento, ya que esta indica el comienzo de la hora del almuerzo. Supongo que tener horas de estudio libre es bastante gratificante, ya que puedes usar esas horas para perder el tiempo en tus pensamientos. Claro que como ya estamos a 2 meses de los exámenes de admisión para las distintas preparatorias que hay en Chiba, dar horas de estudio libre se volvía más común.

Claro que yo dedico ese tiempo a leer novelas o estar perdido en mis pensamientos, ya que con mi nivel actual tranquilamente podría ocupar el primer lugar de la preparatoria Sobu High, pero prefiero evitar tener que dar el discurso de apertura, por lo que quedar en un puesto intermedio es lo más factible.

Al observar a mis compañeros de clase me di cuenta de que la mayoría se había reunido en grupos y estaban intercambiando regalos, ya que gran parte de ellos postularía a diferentes preparatorias por lo que seria difícil que se vuelvan a ver, por lo que crear un recuerdo importante los ayudaría a recordarse mutuamente.

Eso sería lo que pensaría cualquier estudiante que analizara demasiado las cosas, pero yo sabia que esto no era verdad. Ya que el intercambio de regalos también servía para demostrar la condición económica de la persona o su disposición de gastar el dinero en el regalo. Después de todo si tuvieras bastante dinero y quisieras presumirlo es obvio que no escatimarías en cuanto al regalo, esto serviría para alardear con los demás, y también esta la persona que tiene suficiente dinero pero solo compra algo barato, esto demuestra que no tiene intereses en cuanto a la persona la cual recibirá este regalo. Algunos dirán: pero la intención es lo que cuenta. Esto es una vil mentira, después de todo las personas somos egoístas, por lo que la mayoría de las cosas lo hacemos por nosotros mismo, ya sean un capricho para demostrar superioridad ante los demás, o una obligación social, siendo esta solo la obligación de regalar algo, aunque no sea del agrado del receptor.

''Raiden''

Claro que no todas las personas son así, algunas veces existen las excepciones que si lo hacen por buena voluntad o cariño hacia otras personas, pero estos casos son pocos.

''¡Raiden!''

Escuchar que alguien gritaba mi nombre me saco de mis pensamientos.

''Hola Yumiko'' Después de todo ella es la única que me llamaría por mi nombre.

''Te estuve llamado varias veces, ¿acaso estas ignorándome?'' Por alguna razón luego de escuchar esto sentía que el temperamento de Miura estaba aumentando, y no para bien.

''Losiento, esta metido en mis pensamientos, por lo que no me di cuenta de tu presencia''

Envés de que esto la calmara, pude ver como entrecerraba los ojos y me miraba fijamente.