Capítulo 19.

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Yi Zhe encontró un trabajo de verano. Fue en una tienda de brochetas y trabajó junto con Zhao Weifan. El jefe era una persona muy agradable y reunía a todos al final del trabajo todos los días para tener una comida informal, beber un poco de cerveza y charlar. Sin embargo, aunque Yi Zhe y Zhao Weifan se habían quedado  al principio, después de unos días dijeron que no comerían. En la tienda de brochetas, el humo era denso y las llamas ardían. Incluso si fuera una tienda al aire libre, los dos terminaban con el olor por todo el cuerpo todos los días y solo un soplo era suficiente para hacer que se ahogaran. No querían nada más que correr a casa todos los días después del trabajo y tomar una ducha.

Zhao Weifan se quitó el delantal y lo colgó en el perchero de la habitación. Ella miró hacia abajo, frunciendo el ceño mientras revisaba su ropa. Gracias a un niño pequeño corriendo hoy, ella había volcado una bandeja y las brochetas cubiertas de salsa habían aterrizado sobre ella. La esposa del jefe fue muy considerada e inmediatamente le había encontrado un delantal para ocultar las manchas. Pero ahora que era después del trabajo, miró las manchas y se preocupó. Ella estaba usando una camisa de color amarillo claro hoy, lo que hizo que el desorden sobre su pecho se destacara aún más.

Probablemente se había quedado en la habitación demasiado tiempo cuando alguien tocó la puerta. 

"¿Aún no has terminado?" 

Zhao Weifan volvió a suspirar internamente por su desgracia. Abrió la puerta con resignación y salió.

Cuando vio su ropa, la persona que había estado jugando con su teléfono quedó atónita. "¿Qué pasó con tu ropa?" 

"Un niño se estrelló contra mí". Tener una gran mancha en el pecho hizo que Zhao Weifan se sintiera bastante desconcertada. Se tiró de la ropa, frunció el ceño y dijo, "Ay, qué molesto. ¿Cómo voy a salir así?" 

Yi Zhe guardó su teléfono y pensó por un momento. "Iré a comprarte algo para ponerte encima". 

Al ver que había empezado a salir, Zhao Weifan gritó apresuradamente, "¿Dónde puedes ir a esta hora?" 

"Hay puestos en la siguiente calle".



En poco tiempo, Yi Zhe volvió a comprar una prenda. Mientras tanto, el jefe y su familia ya habían arrastrado a Zhao Weifan a charlar con ellos por un tiempo.

"Oh, es cierto. Las calificaciones de gaokao se publicarán hoy. Puedes comprobarlo después de las doce, ¿verdad?" 

"Mm, sí", respondió Zhao Weifan mientras tomaba la bolsa de plástico de las manos de Yi Zhe. 

Yi Zhe  había comprado una camisa de mezclilla de manga corta. Era grande y ancha y no parecía ser una camisa de estilo femenino. Zhao Weifan lo levantó para mirar, luego aflojó la fila de botones y se lo puso directamente. La camisa tenía cuello y estaba suelta. Lo que llevaba adentro no se podía ver en absoluto y usarlo de esta manera tampoco se veía extraño. 

"Aiyo, este muchacho es realmente considerado". La esposa del jefe sintió que los dos se veían bastante bien y no pudo evitar bromear. "Los chicos como tú hoy en día saben cómo hacer los movimientos mejor que nosotros cuando éramos jóvenes". 

"¿Qué es eso de cuando yo era joven?" El jefe levantó su vaso medio lleno de cerveza, reacio a ceder. "¿No te compré ropa? En ese entonces, incluso-" 

"Está bien, está bien" , interrumpió la esposa. "Nadie quiere escuchar tus historias".

Zhao Weifan ya se había acostumbrado a escucharlos discutir en estos pocos días. De pie a un lado, se alisó la ropa y sonrió.

"Ay, eso es correcto. Mi hijo dijo que no debería seguir preguntando a los estudiantes cómo les fue en los exámenes, por eso no les he preguntado a ustedes dos en todo este tiempo". La esposa del jefe los miró y sonrió ampliamente. "Entonces, ¿cómo estuvo? Los puntajes saldrán hoy de todos modos, debería estar bien para mí preguntar, ¿verdad?" 

Un accidente a plena luz del día- Bairi Shi Gu [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora