Capítulo 56.

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Xu Tangcheng no tenía su identificación con él, así que esa noche, solo se conformaron con una pequeña casa de huéspedes. El precio de la habitación era barato y, en consecuencia, el ambiente no era muy bueno. La ropa de cama de la habitación tenía un olor bastante desagradable. Yi Zhe no lo notó; Xu Tangcheng estaba incómodo por el olor, pero no dijo nada. La pequeña casa de huéspedes daba a una calle y Xu Tangcheng no pudo dormir en todo el tiempo debido al ruido de los autos que pasaban.

En la última mitad de la noche, se levantó el viento y cayó la lluvia, el repiqueteo de la lluvia pareció persuadirlo para que se durmiera. Xu Tangcheng se quedó dormido por un rato, con la mente aturdida. Solo estaba medio dormido, así que cuando el sonido de algo pesado que caía entró por la ventana Xu Tangcheng se despertó sobresaltado, su sueño desapareció por completo.

Después de no dormir durante una noche y acostarse durante demasiado tiempo, se dio la vuelta varias veces cuando era casi el amanecer para aliviar el dolor en la parte baja de la espalda. Yi Zhe solía dormir profundamente, pero ahora parecía estar consciente y se despertó de repente.

"¿No dormiste bien?"

Xu Tangcheng asintió. Levantó una mano y se frotó las sienes. "Me duele la cabeza".

"Entonces, ¿quieres dormir un rato más?"

Xu Tangcheng negó con la cabeza.

Las cortinas de la pequeña casa de huéspedes no se podían comparar con las de casa. La luz del sol irrumpió a través de ellos, extendiéndose ya por el espacio de la habitación. Yi Zhe miró el perfil lateral de Xu Tangcheng por un momento, luego extendió una mano y le cubrió los ojos.

"¿Puedes dormir así?"

La voz de Yi Zhe estaba justo al lado de su oído, su respiración también rozaba la curva de sus oídos junto con esas suaves palabras. Incapaz de contenerse, Xu Tangcheng soltó una carcajada de inmediato. "¿Cómo es posible que duerma así?"

Las comisuras de su boca se curvaron hacia la mano que bloqueaba la luz del sol, una vista que tocó el corazón de Yi Zhe. Movió su cuerpo y besó la comisura de esa boca.

A diferencia de la forma en que había aceptado los besos en silencio en el pasado, después de una sorpresa momentánea, Xu Tangcheng de repente giró la cabeza hacia un lado y se encontró con los labios de Yi Zhe.

Separarse al final del beso fue lo más difícil de hacer. Yi Zhe acarició el rostro de Xu Tangcheng, con los ojos fijos en los rasgos de Xu Tangcheng a una distancia muy cercana. "¿Volveré contigo?"

"No hay necesidad". Xu Tangcheng negó con la cabeza. "Si lo haces, estarán aún más enojados".



Xu Tangcheng volvió a casa. El que abrió la puerta fue Xu Tangxi. Los círculos oscuros debajo de sus ojos eran demasiado obvios, lo que inmediatamente hizo que Xu Tangcheng frunciera el ceño. "¿No dormiste bien?"

Xu Tangxi asintió. Parecía que iba a decir algo, pero se detuvo y se giró para mirar hacia la cocina.

El apartamento estaba muy tranquilo. Xu Tangcheng esperó un rato y escuchó los sonidos de platos y tazones chocando entre sí en la cocina. Se cambió de zapatos pero siguió parado en la puerta sin entrar.

"Mamá y papá... ¿están bien?"

"No durmieron mucho anoche", dijo Xu Tangxi en voz baja. "Estaba persuadiendo a mamá al principio. Más tarde, me dijeron que no me metiera en eso y que me fuera a dormir. Pero cuando me levanté a las tres para ir al baño, las luces de su habitación todavía estaban encendidas".

Un accidente a plena luz del día- Bairi Shi Gu [Editando]Where stories live. Discover now