Sorpresas

1.4K 31 0
                                    

 ~Capítulo 3

 Me desperté por el odioso sonido de la aspiradora de mi madre. ¿Es que no podía limpiar la casa a otras horas de la mañana? Intenté dormirme pero fue un intento inútil. Ya me había desvelado.

No tuve más remedio que levantarme para ir al baño de mi habitación. Restregándome los ojos me vi en el espejo con mí vestido negro aun puesto. Me lo quite dejándolo tendido en el suelo, me hice un moño alto con una coleta que siempre llevaba en mi muñeca y abrí el grifo de la ducha, sí, una buena ducha me despegaría.

Al salir de la ducha, aun con la toalla puesta, me cogí una camiseta de los Lakers que me regalo mi padre para mi cumpleaños. Aunque ya ni lo viera ni viviera aquí, para mi cumpleaños siempre me enviaba cualquier chorrada. Ese creo que fue el único año que me gusto sus regalos. Como la camiseta era larga me servía como vestido y para estar por casa me iba genial.

Entonces mi móvil comenzó a vibrar-ya que siempre lo tenía en silencio-dando el aviso de que alguien me llamaba.

Lo cogí sin ver quien me llamaba pero en segundos, por la voz aguda, supe perfectamente de quien se trataba.

-¡Tía! Ayer pasaste de nosotras y te fuiste, ¿tan mal te encontrabas?-me dijo casi gritando Sabella

-Eh…si, lo siento, no sé qué debí tomar pero me sentó mal-mentí. No tenía aun ganas para contarle lo de la noche anterior…ya si eso…más tarde, porque total, había sido tan tonta de no pedirle el número para volvernos a ver, así que seguramente ya no lo vería más.

Suspiré frustrada. Para un chico que me hacía caso…

-¿Te pasa algo Sarah?-me preguntó mi amiga sabiendo de mi suspiro

-¿Eh? No, que va, bueno…después hablamos Bella, ¡adiós!-sin dejarle hablar más corte la llamada y tiré mi móvil a la cama.

Me senté en el suelo en forma de indio pensando en cómo podría volver a contactar con Alan. Pero…si hubiera querido mi teléfono, me lo hubiera preguntado ¿no? Pff…todo era un lío y entonces gire mi vista hasta el suelo. Ahí estaba, mi Diario vacío, donde no contenía nada interesante.

Sonreí para mí misma. Una idea se me había cruzado por la mente. Podría escribir en mi Diario sobre mis experiencias porque, después de todo aún no había terminado la secundaria.

Corrí hacia mi viejo diario, me senté en mi escritorio y desahogándome empecé a escribir como nunca lo había hecho.

Vale, no podía ser tan difícil comenzar un diario. Siempre se empezaba por ‘’Querido Diario…’’ Bah, eso estaba muy visto ya, a ver… ¿y si hacía que se lo contaba a una amiga? Podría ser una buena idea ¡No! Una mejor, contárselo a una hermana. Nunca había tenido a mi hermana para hablar de cosas sobre los chicos así que podría escribirle a ella pero sin enviárselo-obviamente-

‘’Querida Sandy…durante todos estos años han sido muy aburridos sin ti. Siempre estábamos juntas para todo y no podía ni siquiera imaginarme un mundo sin tener al lado a mi hermana gemela, cuando te fuiste, me sentí muy sola, demasiado…creo que te fuiste en el peor momento. Cuando empezábamos la adolescencia. Seguramente ya no te acuerdes de mí y bueno, te tengo rencor. Sí, es la verdad, tenía que decirlo. Me dijiste que vendrías a verme siempre que pudieras, al principio lo cumpliste pero ¿y después? Ya no te importaba por lo visto…es como tener una hermana sin tenerla. Odiaba cuando mis amigas me hablaban de sus hermanas o hermanos quejándose sobre ellos/as porque les chinchaban o cosas que les pasa a los hermanos, porque, hemos estado solo nuestros 12 años de vida juntas y de un día para otro, separadas. Siento que me falta mi media mitad, también dicen que las gemelas tienen esa conexión de que aunque estén lejos, siempre están conectadas la una a la otra, pero yo creo que es mentira, porque no siento una conexión que signifique que estamos juntas. Siempre pensaba que cuando tuviéramos la edad de ahora, estaríamos hablando sobre los chicos que nos gustan pero, como no se puede, me tengo que resignar a escribir en unas cuantas hojas de papel solamente porque necesito desahogarme después de tantos años. Y bueno…mi vida la verdad es que no es muy interesante, hasta ayer. Conocí un chico que se llama Alan. Es muy guapo y atractivo, la verdad. No tengo muchas cosas de decir de él porque apenas lo conozco pero en menos de una noche me ha hecho que mi atención por él se haga más grande. Y ahora soy una tonta porque ni siquiera sé si podré verlo otra vez. Lo que me tiene más atontada de todo este tema es que me beso, si, un beso en la boca. Y me gusto, mucho’’

Como dos gotas de aguaWhere stories live. Discover now