Capítulo 30: Castigo

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Severus no mató a Ron y Hermione por descuidar a su hijo cuando debían estar cuidándolo. Simplemente les dio detención por dos meses cortando y limpiando las cosas más asquerosas que pudieras imaginar, la razón por la que hizo esto fue porque Albus su querido padre no le dejo estrangular a los dos cachorros de leones así que no tuvo más opción que darles detención. En cuanto a Harry... Bueno el era otra cuestión

—  bien— dijo Snape— ahora me vas a explicar porque hiciste lo que hiciste Harry—

El bebé lo miro, realmente no sabía el porque lo había hecho, simplemente fue un impulso que le dio. Harry tomo la varita que le ofrecía su padre y dijo:

" No se el porque lo hice. Yo solo quería volver a volar y hacer magia"

—  ajá, entonces quisiste volar y por seguir ese estúpido capricho que casi te mata no?— dijo Snape con voz fría, Harry no dijo nada

—  debería matarte— gruñó Snape con sus ojos fríos mirando a su hijo detenidamente— pero cómo matar es ilegal estarás castigado—

Harry lo miro

—  te acostarás una hora antes y pensaras en lo que has hecho— dijo— por otro lado, no verás a tus amigos hasta que o ellos aprendan a ser más responsables o tu dejes de meterte en problemas pensando que aún tienes tu cuerpo de 13 años y no el de un bebé de 9 meses—

—  también como veo que no puedo dejarte tres segundos solo, estarás a partir de ahora y hasta que yo lo decida en donde yo esté. No saldrás de mi vista y si lo haces alargare tu castigo—

Harry se quejó pero se callo de inmediato al ver la expresión de su padre. El solo quería volar y volver a realizar magia como antes, hacia meses que no lo hacía y realmente lo extrañaba muchísimo, casi tanto como cuando estaba encerrado con los Dursley en verano, extrañaba el mundo mágico, y ahora que era un bebé y no podía andar a sus anchas era casi la misma sensación que en verano en Privet Drive. Ahí se dio cuenta que no era que solo extrañará el mundo mágico en si, sino lo que le hacia sentir al agarrar su varita y realizar un hechizo, el tener clases de Defensa Contra Las Artes Oscuras que tanto le gustaba, el pasar las tardes con Hagrid, los tiempos libres en la sala común de Gryffindor con sus amigos...
Lágrimas comenzaron a caer y se pasó una mano por su rostro para intentar quitárselas. Realmente era muy injusto lo que hacía su padre, no podía castigarlo por desear algo que cualquier mago haría. Si, sabía que era peligroso hacer eso pero realmente no se puso a pensar en las consecuencias de sus acciones, solo quería volver a sentir esa sensación de "libertad" que tenía al volar... Harry tomo al ciervo que era de su madre y lo abrazo con fuerza contra su pecho tratando de tranquilizarse pero le fue muy difícil.

—  y esto me lo llevo— dijo Snape quitándole el peluche al niño

Harry comenzó a lloriquear y estiró sus manitos para volver a agarrar el peluche pero Snape lo apartó rápidamente de su alcance

—  sigue llorando y te alargare el castigo por una semana mas— advirtió Severus fríamente mirándolo

Harry lo quedo mirando, sabía que si seguía llorando iba a ser peor de lo que ya era la situación pero aún así quería devuelta al ciervo, era lo único que tenía de su madre aparte de las fotos, y posiblemente su padre no se lo devolvería, o si? Lo miro con ojos suplicantes pero no sirvió de nada su padre no le devolvió el juguete. El solo se quedó allí sentado en la cama tratando de dejar de llorar como un bebé pero fue muy difícil. Severus se levantó de la cama y dejó al ciervo en lo alto del ropero donde claramente el niño no pudiera agarrarlo, su hijo debía entender que lo que había hecho estaba mal y que no debió haberlo hecho ya que pudo haberse matado al ser tan pequeño. Pero por otro lado entendía la necesidad del niño de volver a hacer magia y estar con sus amigos, el también había sentido lo mismo cada vez que regresaba a casa en vacaciones y no podía hacer magia fuera de Hogwarts. Aún así debía hacerle entender al bebé el porque lo estaba castigando

Retorno a la Inocencia (Severitus) Harry Potter Where stories live. Discover now