FEMME FATALE-Disponible en Físico

III

Me llevo por un sendero, aunque de noche se notaban las rosas que adornaban parte del parque marcando el camino a andar, las luminarias en una intensidad tenue, perfecta para los enamorados que deambulaban aún a esa hora.

Sí, a las 4 de la mañana había muchas parejas aún ahí caminando. Pero no se confundan, yo no era pareja no estaba enamorada solo lo seguía y descubría esa belleza escondida en la ciudad que jamás me había detenido a observar. —Pareces niña en tienda de juguetes, ¿Qué  jamás habías salido más allá de tu madriguera? Me dijo con un tono de burla

—Para ser sincera, no. Solo me he limitado a hacer lo que me gusta y estas cosas se me hacen muy cursis— No podía dejar que notará que en realidad estaba disfrutando esto. —Si así lo fuera, ya te hubieras ido— lo dijo mientras me retaba con la mirada. Maldición, Dan es muy astuto. Y ahora me intriga saber como hace para darse cuenta. ¿Será de esos que tienen poderes y leen la mente?  No podía dejar que se diera cuenta de mi interés así que respondí con desinterés —Y que te hace pensar que no espero un momento para echarme a correr— Pero a él no le interesaba nada de lo que yo estuviera pensando y siguió burlándose. —Por qué no me has querido soltar la mano Jajajajaja— Acto seguido solté su mano, no había notado en mi asombro que aún lo tenía sujetado y eso me hizo sonrojar, pero gracias al abrigo de la noche no se noto. —Anda vamos ahí esta— y apresuro su paso — ¿Tacos a esta hora? — Habíamos llegado a la orilla del parque, que daba a la avenida principal y ahí un puesto de tacos de 24 hrs. —Rafa dame 5 tacos y 3 de casa. Ya sabes cómo. “Claro Dan, ¿Y para ti?” Como que para él, ¿Entonces pidió por mi y tantos? Bueno la verdad si me los acabo pero hay que disimular — Oye yo no quiero tantos—

— Tranquila chica del bar, no son para ti. Tú debes hacer hambre para el desayuno que preparas— no has logrado mucho aun. — Ya veremos. Perdón Rafa, para mi nada. Solo pónmelos como siempre, y pásame mi encargo por fa.   lo paso a dejar la señora en la tarde, “Enserio cuantos más pretendes entregar” le dijo Rafa en tono preocupado — Los necesarios Rafa, los necesarios. Y ya despachameque va a amanecer y esta chica se derrite con el sol. Me intrigo saber que Rafa lo conocía, eso significa que él venía seguido por aquí, cuantas mujeres habrá traído ya? ¿Por qué tantos tacos? ¿Qué es un taco de casa? Y qué demonios traía la bolsa negra que hasta Rafa le sugirió ya dejar eso.

No lo entendí, pero obvio sé que esa noche lo descubriría.

Salimos de la taquería y andamos por la orilla del parque, de pronto viro volvimos a adentrarnos. No había dicho una sola palabra ya. — Dime, ¿Vendes drogas, o que trae el paquete—  y respondió de una manera muy cursi — Solo luz, aquí guardo la luz de la noche—

Ese juego ya me estaba preocupando y a estas alturas ya no sabía quién jugaba con quién — ¿Joder, siempre eres así de ambiguo?— No, pero tú eres muy desesperada, quieres todo a la de ya, y hay muchas cosas que se disfrutan mejor con calma, como una buena cerveza artesanal, un café, o una chica que conociste en un bar. Joder, me había vuelto a descubrir, si efectivamente era muy desesperada. Y maldita sea me hizo sonreír al decir lo que debía disfrutarse con calma. Pero vino a mi mente, el recuerdo de antes de salir del bar, a estas alturas no sabía quién jugaba con quién, pero interrumpió mis pensamientos diciendo — "Jugaremos tu juego, te mostraré unas tácticas mías" Y eso me hizo centrarme —Entonces vamos a entregar el paquete señor de los cielos?, en realidad jamás había visto esa serie pero sabía de que trataba. 

—Shhhh no querras despertar al demonio— eso sí me hizo dudar de esta noche —¿Cual demonio? — Susurre con un poco de miedo, el parecía en transe, el bosque en completa oscuridad, obvio que me asuste, pero por una extraña razón quise seguir ahí para descubrir que sucedería ahora…

Continuará

Elizabeth Santillan
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