The Compulsion To Find Love (Traducción)

C.29 Revelación (Parte II)

"Desde que era muy joven, mi padre siempre me contaba la Historia de Maximus y Edin. Incluso cuando yo era un adolescente y los puntos que unían a mi familia comenzaron a romperse, él siempre se jactaba de nuestro linaje, las habilidades con las que estábamos dotados. Pensó que era algo de lo que presumir y de lo que estar orgulloso. Cultivó un orgullo en mí para abrazar todo lo que venía con eso; y yo le creí".

Louis observó a Harry colocar su taza humeante sobre el escritorio con un suspiro, el líquido se derramó por el borde. Se tocó las sienes y frotó pequeños círculos tranquilizadores allí.

"Cuando salí de casa para ir a la universidad por primera vez me fui con esa creencia arraigada en mi cabeza; una especie de complejo de superioridad que mi padre siempre tuvo. Todavía lo tiene", añadió con amargura. "Cuando era más joven no lo idolatraba pero siempre lo respeté. Lo veía como todo lo que resultó yo que no era: valiente, con principios, trabajador. Y llegué a la universidad con esa misma mentalidad; que por diferente que yo fuera de mi padre, todo lo que él tenía era lo que yo aspiraba a lograr".

Louis sonrió con tristeza y puso una mano sobre la rodilla de Harry, dándole palmaditas tranquilizadoras. "No podrías haberlo sabido mejor, Harry."

"No", dijo con firmeza. "No, debería haberlo sabido. Siempre hubo señales, cosas que decía que solían meterse bajo mi piel, pero siempre las ignoraba, una y otra vez".

Se le humedecieron los ojos por segunda vez esa noche y colgó la cabeza entre las piernas. Louis se deslizó de su sillón para arrodillarse a su lado.

"Está bien, Harry", susurró suavemente, acariciando tentativamente los mechones del cabello de Harry. "Estoy aquí, está bien". Louis sintió que la cabeza de Harry se volvía hacia él, su nariz buscaba el cuello de Louis e inhalaba profundamente.

"Gracias", suspiró. Se llevó el dedo índice al ojo y se tocó las gotas de lágrimas de las pestañas. "Gracias, Louis."

Louis se sentó de mala gana en su propio asiento y observó a Harry tomar una respiración firme antes de seguir adelante, su voz más profunda, más áspera, como si reavivar esos recuerdos hubiera sacado un lado diferente de él.

"Gemma ya se había ido a la universidad, por supuesto, así que sólo mis padres vivieron juntos una vez que me fui yo también. Eran almas gemelas. Mi padre nunca me pareció un romántico, pero solía encontrar consuelo en el hecho de que siempre valoró la idea de encontrar a su alma gemela. Solía ​​pensar que era por amor que él valoraba la idea de las almas gemelas, incluso si era un tipo de amor egoísta. Ni siquiera era eso. Quería encontrar a su alma gemela para asegurarse de poder tener un hijo alfa, otro heredero de Maximus. No le importaba el amor, pero disfrutaba de su herencia y eso es lo que lo llevó a encontrarla".

"Nunca dudé de que estaban enamorados porque, en virtud de que eran almas gemelas, sus almas entrelazadas en algo tan raro y precioso, pensé que ella era feliz". Se rió sin humor. "No podría haber estado más equivocado".

Su voz era baja, frenética y teñida de desesperación. "Ella estaba... ella estaba bajo su control".

Louis se puso el labio inferior entre los dientes y se esforzó por escuchar la voz entrecortada de Harry, como si todavía estuviera asombrado por el hecho de que nunca se había dado cuenta.

"Mi madre es una sirena", susurró. No pretendió ignorar el jadeo de Louis, mirándolo a los ojos, brillando con vulnerabilidad y sinceridad inusual. "Es por eso que, cuando regresamos a Irlanda, tuve que ignorarte. Alguien había hecho un comentario sobre las sirenas justo antes de que fueras a hablar y... joder, era como si los muros que había construido, esos frágiles muros que nos encerraban a ti y a mí en esta realidad delirante en la que podíamos ser diferentes de mis padres, se derrumbaron. Me acordé de todo lo que mi padre le hizo; cómo la manipuló y forzó su voz alfa sobre ella; cómo usó su olor para rodearla y dejarla indefensa ante su habilidad. Él... él es el único de los descendientes de Maximus cuya alma gemela no puede resistirlos. Y en ese momento, de vuelta en Irlanda, todas estas posibilidades de que yo pudiera ser así inundaron mi cerebro".