Especial - Abi

14.2K 1.3K 157
                                    

Hola si te gusta la historia déjame un votito o mejor aún conocer tu opinión, me motivas muchísimo ^-^

----

Abi'

El miércoles muy temprano entre media hora antes a la escuela, a mi padre le surgió una emergencia de camino y casi me bota del auto en la entrada de la universidad.

Sin más me adentro notando que solo están los empleados de la cafetería y uno que otro profesor, así que me sigo de largo hasta el salón donde me propongo dibujar.

Diseño un lindo vestido largo, sé que por el momento es solo el color gris el que se hace presente, pero en mi mente toma mil colores, la caída vuela, el escote brilla y la modelo es una Abi muy segura.

O eso hacía hasta que el salón comenzó a llenarse y una sombra de 1.80 miro de cerca mi creación.

MIR fijamente a Daen y él sonríe con desánimo, realmente muy forzado, el desgaste y tristeza lo trae en la mirada.

Está ojeroso y despeinado, pero ni siquiera eso hace lucir mal a Daen Weller.

— Se te cayó el bombón donde venías envuelto papel.

Le guiño con travesura y él ríe rojizo tomando lugar en la silla a mi izquierda.

Al sentarse coloca su mochila junto a él y se gira a mí.

— Mmm… Abi, ¿Tu correo fue en serio? Normalmente solo me acosas por ese medio cuando hay tarea. Además ¿Para qué hiciste otra cuenta?

— Ayer había tarea—vacile—. ¿Otro?

Es el mismo que hice hace meses para molestarlo, literal, con ese correo solo hablo con él o Jolie.

— Sí, pero jamás me habías escrito al correo de la empresa.

— No, ¿Para qué? Ni siquiera me lo s…

Me interrumpe la entrada de la maestra.

— Chicos, buenos días.

¿En serio regresa la profesora Gurvich? ¡Genial, Jo no la mató de un bolazo!

Bien dicen que la hierba mala nunca muere.

— ¡Buenos días, me permite pasar! — Dice presurosa la voz que ambos reconocemos y nos hace mirar atentos a la puerta.

¿Jolie regresó?

— Adelante Hasson—responde cortante la mujer.

— Gracias, me alegra saber que está mejor.

— Pásate ya—  le insiste por perder los estribos.

Jolie toma la silla a mi derecha haciendo contacto con Daen, quede en medio de su riña visual.

De vez en cuando giro a los lados y me encuentro con que ambas miradas están fijas  el uno en el otro, pero con distinto semblante. Así que termino cubriendo mi cabeza con la capucha de mi abrigo hasta el descanso.

Apenas nos indican que podemos salir, Daen se va a grandes zancadas evitandonos.

—  ¿Y qué tal el viaje?—pregunto para desviar.

—  Casi bien, no sé cómo convencí a Is de venirnos hace horas, me urge hablar con Daen, pero ya imagino que me será imposible.

Noto como mueve sus manos con desespero y no retira la vista de la ventana.

—  Vamos a desayunar, seguro Weller está por ahí—le indico.

Ambas nos levantamos para abandonar el salón.

A segunda vista [L #1] - Último Otoño Donde viven las historias. Descúbrelo ahora