Capitulo 5

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Bárbara  

Literalmente quiero que la tierra se abra y desaparecer, me puedo despedir de la posibilidad de un empleo, intento recuperar la compostura tomo asiento en la silla detrás de mí, lo observo es atractivo muy atractivo su cabellera rubia brilla con los rayos que se cuelan por el ventanal detrás suyo, tiene una mirada picara pero también firme que transmite seguridad, me sigue observando en silencio hasta que vuelve a ponerse de pie y recorre el lugar y se detiene detrás de la silla donde estoy.
 
—Por tu reacción puedo adivinar que ya sabes quién soy, como te dije antes no voy a utilizar esas imágenes que no sean para mi placer personal, debo admitir que desde la primera vez que te vi, me atrajiste enormemente; eres una belleza Bárbara Bell—

Vuelve a  tomar asiento y yo intento recuperar el aire atascado que me provoco su cercanía y palabras, que rayos pasa nunca me he sentido así pero debo volver a la normalidad. 
—Como te dije antes fue un error no estaba en todos mis sentidos, además quiero aclarar que no me dedico a enviar esas clases de cosas a cualquiera, y si no tienes más que decir me retiro gracias por tu tiempo— el me observa sin decir nada cuando llego a la puerta siento que me toma de la mano que está en el pomo de la puerta. 

—No te vayas seguro vienes por la entrevista y según vi en tu currículum tienes experiencia en asistir a otros y yo necesito cubrir el puesto de mi ex secretaria, aunque sigo pensando que como modelo de una campaña actual me vienes como anillo al dedo, ¿Qué quieres Bárbara ser modelo o secretaria? — Me pregunta aun en la puerta donde su altura casi me cubre por completo y todavía me tiene tomada de la mano. Siento su fragancia tiene notas marinas nuestras miradas no se despegan uno del otro.  

—secretaria, pero solo eso no quiero que te hagas otras ideas, necesito el trabajo de suma urgencia— el me suelta, pero no se mueve de la puerta luego de un momento se retira y puedo abrir, cuando cruzo el umbral escucho que habla, entonces volteo.

—Mañana siete treinta te espero, nos vemos Bárbara — me guiña un ojo y llama a la segunda recepcionista.

Qué rayos sucedió allí adentro tomo aire intentando acomodar  las ideas me quedan pocas horas para mi trabajo de la tarde, voy al supermercado por algo de comida ya que mi refrigerador  está prácticamente vacío hago unas compras rápidas, cuando estoy pagando mientras leo los títulos de algunas revistas que hay en la caja y allí esta una fotografía  de Dante en un evento acompañado de una pelirroja muy bonita con ese vestido morado, es un poco más baja pero tiene todo para atraer a los hombres, y sobre todo a un hombre como él.

Una vez que estoy en casa la curiosidad me gana y busco información mas profundamente y para la edad que tiene, inicio muy joven en el mundo de la publicidad además  en la abogacía, es soltero pero por lo que vi en la revista debe tener alguna amante, bueno a mi eso no me debe de importar no es que me guste o si, en fin dejo la laptop en la mesa y voy al trabajo debo hablar con mi dulce jefecita que seguro pone el grito porque se va la esclava y al parecer no le encanta la noticia porque pone un grito que me hace cubrir mis oídos  y observo la cristalería si sigue intacta y me envía a trabajar, el día fue exasperante entre e humor de Theresa y toda la gente estoy muriendo de hambre y cansancio llego tarde a casa tomo una   ducha y se me cuela en los pensamientos Dante Miller, quién diría que el hombre a quien por error envié una propuesta sexual  ahora es mi futuro jefe, que cliché suena, a esperar y ver como es trabajar con Dante.

 









 

 






 











Número Equivocado, Amor CorrectoWhere stories live. Discover now