Jungwon un omega que solo visitaba uno de los hoteles más lujosos de Corea, encuentra a su destino, el cual está comprometido, un alfa rubio llamado Jay.
¿Todo saldrá bien?
◇ Jay: top.
Jungwon: bottom.
◇Omegaverse .
◇Mención de otras parejas.
◇Adap...
Jungwon se encontraba recostado sobre la camilla del consultorio con su camisa levantada dejando ver si vientre mientras Jay tomaba su mano y dejaba caricias en su torso.
Hoy tenían cita para saber el estado de su cachorro.
—Jay.
—Esta bien Won, no estés nervioso—. Jay se agachó hasta dejar un beso en la frente de su Omega quien se miraba nervioso y lo sentía a través de su lazo.
Jungwon asintio.
—Okay Jungwon vas a sentir un poco de frío pero es normal, no te asustes—. La doctora beta dijo mientras untaba el gel en el vientre de 3 meses de Jungwon.
Jay le sonreía a su Omega tratando de distraerlo, si por el fuera le daría besitos pero frente a la doctora la daba pena.
La doctora sonrió y siguió moviendo en círculos el aparato mientras veía la pantalla.
—¿Todo bien doctora?— Habló Jungwon se intentó levantar pero Jay lo detuvo.
—Tenemos una gran sorpresa Jungwon—. La mayor entrego un papel para limpiar su vientre el cual tomó Jay—. Son dos cachorros, ambos están muy sanos.
Jungwon volteó a ver a Jay quien tenía una gran sonrisa en sus labios.
—Debes de cuidar de tu embarazo, y comer saludablemente para ellos y sobre todo para ti—. La beta sonrió al ver la reacción de la pareja.
—Muchas gracias Doctora—. Habló el alfa mientras sostenía la mano de Jungwon.
—Los dejo para que hablen—. La mayor salió del consultorio dejando a la pareja sola.
Jungwon bajó su camisa y se levantó para abrazar por el cuello a Jay quien lo tomó por la cintura y beso sus labios tan cálidamente.
—E-estoy tan feliz J-Jay—. El mayor ronroneó agusto y besó su marca por encima de la tela.
—Yo también amor, estoy feliz de poder empezar a formar nuestra familia—. Jay llevó una de sus manos al vientre un poco abultado de Jungwon, acariciandolo—. Mis preciosos cachorros.
Jungwon sonrió y abrazo más a Jay.
—Te amo mi Omega precioso, te amo—. Jay lo atrajó a su pecho soltando su dulce aroma a menta y sintiendo el rico aroma de Jungwon —. Mm espera.
Jay llevo su nariz al cuello de Jungwon oliendo y percatandose que aparte de sus aromas había un toque de leche tibia, debido a los cachorros.
—Rico, tu aroma es tan delicioso—. Jungwon sonrió y beso sus labios para luego decir;
—¿Podemos ir a comer algo?, además la doctora debe de entrar al consultorio ya lo robamos—. Ambos rieron.
—Vamos a comer algo rico para mis cachorros.
Ahora podrían decir que lo mejor de su vida estaba por llegar.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
