Capítulo 25

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NARRA DEAN

Solo me llegaban cortos pantallazos de los recuerdos que abarcaban mis 6 meses como demonio, y la verdad es que en ese momento deseaba que mi amnesia fuese completa.

Apenas desperte Castiel se llevo la razon por la que los latidos de mi corazón habian aumentado de frecuencia, y luego de que Sam me hechara agua bendita e hiciese las pruebas habituales, me libero y dedico un prolongado abrazo. De todas maneras mis ojos no se despegaban de la puerta. Ansiaba realizar el mismo recorrido que Becca opto para alejarse de mi junto al angel y cuando por fin la alcanzase...no lo se, tal vez solo la observaria.

Cuando la vi senti que habia pasado mucho tiempo entre nostros, y a la vez nada. Seguia siendo menudita, delicada y hermosa, pero ciertos rasgos de su rostro se habian endurecido, sobretodo se le notaba en las lineas de expresion que rodeaban sus ojos. No me sorprendi de que estuviese alli porque recordaba haberla visto en estos ultimos dias. 

Me resulto demasiado extraño despertar. Era como si otra persona hubiese tomado las riendas de mi cuerpo, pero a su vez de cierto modo seguia siendo yo mismo. Recordaba haber trabajado para Crowley, recordaba haberme cogido a mas meseras y bailarinas de las que podia contar, recordaba al tipo desconocido que quiso atacarme en el callejon...recordaba un bebé, aunque de esto ultimo no estaba del todo seguro. Todo era borroso, confuso e irritante. 

Me dirigi a mi habitacion no sin antes pasar por la de Becca. Permanecia cerrada, y supuse que seguramente querria descansar. Por mas ganas que tuviese de hablar con ella para que me explicara mas cosas de las que estaba dispuesto a admitir, entendi que el proceso que Sammy llevo a cabo los debio dejar a todos exhaustos. Me di un baño, notando como cada uno de mis musculos se relajaban e iban ganando pesadez, y justo antes de dormir Sammy entro y me dijo que debia ir en busca de las cosas de Becca para trasladarlas aqui.

-¿No puedes esperar hasta mañana?-le dije un poco confundido por su prisa.

-Esque...es importante que vaya ahora. ¿En verdad no recuerdas nada?

-Solo ciertas cosas. ¿Por qué? ¿Qué esta pasando?

-Lo veras cuando vuelva-exclamo de forma neutra y se fue. Me preocuparon un poco sus palabras, pero el cansancio me estaba venciendo y finalmente me quede dormido.

Me desperte a las 2 horas con un hambre descomunal. Me resulto bastante extraño no encontrar a Becca en la sala principal, y tambien me percate de la ausencia de Cass. 

Toque la puerta de Becca, y para mi total sorpresa el angel salio de alli.

-¿Que haces aqui?- le pregunte, obviando el hecho de que hacia mucho que no lo veia y que esas fueron las primeras palabras que le dirigi.

-Quería asegurarme de que Becca estuviese bien...y, que sus heridas hubiesen sanado. La gracia que utilizo es prestada y temia que mis dones no funcionaran correctamente.-lo dijo rapido y atropelladamente, y evito mirarme a los ojos. Mi ritmo cardiaco aumento cuando escuche la parte de "heridas". Hice ademan para entrar, pero el me obstruyo el paso. 

-Cass, dejame pasar- exprese con una voz demasiado controlada para la angustia interna y los nervios que comenzaban a embargarme.

-No puedo.

-¿Cómo que no? Vamos, hazte a un lado.

-Ella no quiere verte, Dean.

Aquella frase calo en lo mas profundo de mi, y finalmente asumi que la causa de su daño fisico habia sido yo.Cuando desperte no parecia tener ninguna marca visible, pero seguramente Cass la habria sanado antes. 

-Cass, sabes que nunca le haria daño.

-Lo sé Dean.- dijo con resignacion- esque...me preocupa. 

Lo que está prohibido me hace feliz (Supernatural- Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora