Lo que está prohibido me hace feliz (Supernatural- Terminada)

Capítulo 10

Prendi la radio y justo sintonice Viva la Vida de Colplay. Me dispuse a preparar un pie de manzanas mientras cantaba a todo pulmón la canción. 

En eso alguien apago la radio, provocando que mis aullidos se escucharan con mayor intensidad. Me calle y muerta de verguenza divise a Dean junto al stereo, y con un inicio de sonrisa en su boca.

-¿Se puede saber por qué mierda escuchas esta basura?

-¿Por qué el cielo es azul? ¿Qué fue primero: el huevo o la gallina? ¿Por qué eres siempre tan imbécil?- termine de cubrir el pie y lo meti al horno. Luego lo mire alzando las cejas- ¿por qué, segun tu, escucho basura? En fin, son preguntas que jamás se resolveran. 

-Creo que por primera vez te escucho hablar como una verdadera psicologa.-Sam debio haberle contado sobre mi antigua carrera. Parecia distraido, y luego de unos cuantos segundos se acerco a mi- lamento haberme comportado así la otra vez.

-¿Cuando? Especifica el día

-Sabes a lo que me refiero- me dijo sonriendo- entonces, ¿estamos bien?

-Claro que si- reduci la distancia que habia entre nosotros y golpee su brazo- pero si vuelves a criticar a Coldplay juro que te lanzare este pie hirviendo en tu cara,

-Espera, ¿eso es pie?- exclamo Dean emocionado, y yo asenti- Pensandolo bien Coldplay es la mejor banda del mundo, y no tiene comparacion. 

Rei a carcajadas y volvi a golpearlo.El revolvio mi cabello, y nos quedamos charlando hasta que el pie estuvo listo. Lo saque con sumo cuidado utilizando un repasador, porque estaba demasiado caliente. Al intentar llevarlo a la heladera Dean se interpuso tratando de sacar un pedazo con su dedo, y cuando intente esquivarlo agarre el recipiente con la otra mano y un fuerte dolor surco mi palma. 

-¡Mira lo que hiciste! - le grite dejando el pie en la encimera. Él se acerco y forcejeo hasta que le mostre la quemadura. Abrio la canilla y arrastro mi mano hacia el chorro de agua. Gruñi de dolor al sentir lo helado que se sentia bajo mi piel.

-Lo siento, pero tener que esperar mas por ese pie significaba una tortura para mi.

-Yo te voy a enseñar lo que es una verdadera tortura.

-¿Tu y cuantos más?

Le di un puñetaso en el pecho y el rio por lo bajo. Esperamos un rato a que el pie se enfriara y lo corte en pequeños pedazos, aunque a Dean le di uno un poco mas grande. Yo me comi el mio, y el logro terminarse el recipiente. Cada vez que se metia un bocado gruñia de satisfaccion.

-¿Quieres que los deje a solas?- le dije entre risas.

-Estoy casi convencido de que es el mejor pie que he probado en toda mi vida- me respondio con la boca llena, y apunto con su tenedor el plato medio vacio- eres muy buena en esto.

-Soy buena en muchas cosas.

-Lo se- dijo entrecerrando los ojos y con una media sonrisa. Me di cuenta tarde de su insinuante doble sentido, y enrojeci irritada por mi ingenuidad- se que no te gustara oir esto, pero te veias muy sexy en manos de Charlie.

-Eres un pervertido.

-¡Ei! Tu fuiste la escandalosa- agito sus manos de manera burlosa y volvio a centrar su atencion al postre-¿habias estado con otras chicas antes?

-Un par de veces- admiti.

-Pero, ¿solo toqueteo inocente?

-No entiendo por qué hablamos de esto.

-¿Tienes algo mejor que hacer?

-No.

-¿Te molesta hablar de tu intimidad?