Príncipes del 97 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 ✔

꧁Treinta y siete꧂

                            Tae-eun;

—¿Que casualidad eh? —dice Lisa a mi lado bajo para que solo yo la escuchara.

Muerdo un pedacito de carne que estaba en mi tenedor y la miro —¿De que...hablas?.

—Tú y el príncipe Jeon fueron los únicos que se desaparecieron. Y luego después de la llamada, apareces tú y al poco rato él —dice ella viendome mientras elevaba sus cejas.

Tosí un poco y terminé de tragar —No saques esas ideas Lisa. Ya te dije que me perdí.

—Sí sí. Y el príncipe Jungkook estaba resolviendo algunas cosas. Tal vez lo que estaba resolviendo eras tú —me mira entre-cerrando sus ojos. Tomo unas hojas de lechuga y se la meto en la boca.

—Come. Estás delgada —le digo tratando de cambiar de tema.

—Mfe fvas a ahogfar —me empuja y río para seguir con mi comida.

Luego de la comida, todos decidimos dirigirnos al lobby del hotel para hablar y pasar el rato. Yo me senté en uno de los sofás apartados mientras miraba el bonito lugar.

—¿Te molesta si me siento contigo? —pregunta el príncipe Eunwoo.

—No. Para nada —sonrío y me corro un poco.

El sonríe y se sienta a mi lado.

—Es bonito el hotel ¿cierto? —pregunta a mi lado y sonrío.

—Sí. Realmente bonito —concuerdo.

—Hum...en realidad vine porque te quería hacer una invitación —me observa curioso.

—¿Invitación? ¿Sobre...que? —cuestiono.

—Mhm...¿te gustaría recorrer Udo? —pregunta—. En bicicleta.

Pestañeo.

—¿No quieres? —insiste.

—Es que...—murmuro apenada—. No sé andar en bicicleta –susurré lo último pero el me escuchó totalmente.

Sonrió viendome enternecido —No te preocupes. Usamos una doble. ¿Si sabes?

—Creo que si —respondo despacio.

—Entonces...¿mañana a las diez? Luego de desayunar —me mira expectante.

—Vale —le sonreí.

Él me sonrió de vuelta.

—¿Quieres algo de beber? —me mira curioso.

—No. De hecho...me está entrando un poco de sueño. Me voy a ir antes —respondo.

—¿Quieres que te acompañe? Escuché que te perdiste en lo que venías al hotel —reí tímida e incómoda.

No me gustaba mentir pero bueno. En ese momento no me quedó más remedio.

—Sé donde queda mi cuarto —eso si era cierto.

—Igual si te pierdes puedes llamarme ¿eh?

Asentí energeticamente y me despido de él para dirigirme a mi habitación.

Cuando estaba a punto de salir, me crucé con Jungkook y el se me quedó viendo fijamente. Ante su mirada sentí mis mejillas arder y me apresuré a salir rápidamente del lugar. Me moría de sueño sinceramente.

A la mañana siguiente me costó bastante levantarme de la cama ya que estaba demasiado cómoda. Aún así me levanté y fui hacia el cuarto de baño para ducharme y prepararme. Me vestí muy casual para cuando saliera con el príncipe Eunwoo ya podria cambiarme. Mientras me vestía pensé en la conversación que había tenido con el príncipe Jungkook.