꧁Cuarenta y cuatro꧂

9.4K 860 224
                                    

                                Tae-Eun;

Lo besé.

No puede ser....

Apreté con fuerza mis ojos. Estaba en puntillas y me era un poco incómodo estar de esta forma. Así que decidí alejarme y salir corriendo porque sé que luego de hacer esto no lo iba a poder mirar a los ojos. Me alejé para irme, pero el me tomó de la cintura y me acercó más a él. Evitando que rompieramos el beso. Incluso me elevó un poco. Apreté esta vez con fuerza sus hombros y entonces el comenzó a mover sus labios. Con una mano rodeaba mi cintura, y con esta misma me elevaba un poco.

Con la disponible, la adentró en mi pelo, y ladeó la cabeza hacia un lado. Y yo lo hice así mismo hacia el contrario. Poco a poco me terminé llevando completamente y obvié lo demas concentrandome en él.

Y en sus labios.

Sentí que me quedaba sin aire, así que tuve que irme separando despacio. Y nuestros labios se despegaron despacio. Emitiendo un leve sonido al hacerlo. Aún estabamos muy cerca, yo estaba llena de nervios. Al igual que podría asegurar que mis mejillas estaban rojas.

—¿P-podría bajarme? —susurro.

El sonrió divertido y mordiendo su labio inferior me bajó. Pero no me soltó.

—Tu beso ¿responde a mi pregunta? —arquea una ceja.

Asentí despacio.

—Quizás ya deba irme —dije tratando de huir pero él me jaló de la cintura suavemente hacia él.

—No. Nos sentaremos y hablaremos —sujetó mi mano y me hizo caminar un poco para sentarnos en la arena con el mar frente a nosotros.

Y con las olas llegando y volviendose a ir. Miré hacia otro lado mientras trataba de alejar el rubor intenso que tenía. Sentía mi cara tan caliente.
Y los nervios a flor de piel.

—¿Que dibujarás para ese concurso al que quieres ir? —pregunta él rompiendo el hielo.

—Hum...pensé mucho que dibujar. Incluso en casa hice muchos bocetos —comencé a decir—, pero terminé pintando el palacio.

—Va veo...—asintió—. Es un lugar hermoso. Creo que una pintura sería muy interesante.

—Exacto —asentí—. ¿Tú practicaste canto u algo?

El me mira divertido —¿Por qué me preguntas eso?

Sobé mis manos. Tenía frío.

—Bueno porque ese día que fuimos a Hallasan tu cantaste —digo—. Y lo hiciste muy bien.

—¿Te gustó? —intrigó el mirandome fijamente.

—Sí —asentí despacio.

El sonrió viendome —No estudié canto –empezó a decir–. Pero si practicaba mucho. De hecho aprendí piano por mi propia cuenta. Mi padre solo está concentrado en prepararme completamente para ser rey. Así que...–se encogió de hombros.

—Mhm. Ya veo —asentí.

—¿Y tú?

—¿Yo que? —lo miré en seguida.

—¿Solo quieres hacerte pintora? ¿No te interesa algo más? —cuestiona curioso.

—La verdad no he pensado en eso —respondo—. Tampoco es como si pudiera pensar en hacer muchas cosas.

—¿Por qué? —en ningún momento ha dejado de mirarme y eso me ponía nerviosa.

Y algo avergonzada por lo que me daba un poco de timídez mirarlo. Sobre todo porque estabamos cerca. Y eso no me ayudaba en lo absoluto.

Príncipes del 97 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤  ✔Where stories live. Discover now