꧁Cincuenta y uno꧂

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                            TaeEun;

A pesar de que intenté no darle vueltas al asunto, la verdad no pude. No dejaba de pensar en la amistad de Jungkook y Eunwoo que se estaba arruinando por mi culpa. Bufé por décima vez al ver que el delineado no me salía como quería y terminé optando por lavarme la cara y no maquillarme.
Solo ponerme un poco de base y algo de labial.

Recogí mi pelo en una coleta alta y luego sali de mi habitación para ir a desayunar.
Esperé pacientemente el ascensor, y luego de unos cortos minutos este se abrió. Rosé estaba en este, y a pesar de que no nos llevabamos bien decidí obviarlo y entrar a este.
Apoyé mi espalda a la pared y crucé mis brazos mientras mantenía mis pensamientos lejanos tratando de ignorarla.

—¿Estás satisfecha con lo que estás haciendo? —habla ella de momento.

Suspiré —¿De que hablas? –pregunté sin mirarla.

—Ah....—sonríe de lado—. ¿Quieres que te lo explique? –ella hizo una pausa–. No te hagas la ingenua. Sabes muy bien de lo que hablo. De como estás arruinando la amistad del príncipe Eunwoo y del príncipe Jungkook.

Presioné mi lengua contra el interior de mi mejilla y la miré.

—¿Te preocupa tanto? —pregunté.

—Para nada —respondió—. Lo único que quiero –se giró a verme seria y con enfado–, es que salgas del evento de una buena vez.

—Rosé, ¿podrías dejar de ser tan barata?. Yo sé que quieres que me vaya porque si me quedo el príncipe Jungkook no te va a hacer caso, pero- —doy un paso hacia ella— ya que tienes tanto tiempo deberías concentrarte en preparar tus maletas para cuando seas TÚ la que te vayas –forcé una sonrisa.

—Bueno...quizás —rió ladina—. Pero me encantará pensar en como te sientes mientras estás con el príncipe Jeon y a la vez sabes que arruinaste su amistad con el príncipe Cha.

En ese momento se abrieron las puertas del elevador; me vió con burla y salió de este.
Inspiré profundamente tratando de controlar la frustración que Rosé me generaba. Y salí también en dirección al restaurante para ir a desayunar.

—Eun por aquí —exclama Lisa moviendo su mano. Indicandome que a su lado habia una silla vacía justo para mi.

Sonreí cortamente y me dirigí hacia allí tomando asiento.

—Estoy emocionada por ir a ese viaje en barco.

—Me imagino —solo le sonreí. Y me dispuse a comer.

Aunque no quería darle el gusto a Rosé, la verdad es que en el fondo me sentía incómoda por estar ocasionando esto. Nunca fue mi intención gustarle al príncipe Eunwoo. Tampoco gustarle a Jungkook.
Nunca le dije al príncipe Cha algo que le hiciera creer que había posibilidades entre nosotros.
Ahora, con Jungkook fue totalmente diferente.

Si bien no fue mi intención gustarle, y tampoco llamar su atención; el poco a poco fue desarrollando sentimientos en mi. Y a pesar de que lo ignoré, y trate de no darle importancia, cuando me dí cuenta ya no podía seguir evitandolo.

—¿En que tanto piensas? —salgo de mis pensamientos cuando me pregunta.

Me giro hacia mi costado derecho y ahí estaba él sentado en la silla.

—¿Hace cuanto....llegaste? —le pregunto.

—Hace unos minutos —respondió—. Pero estabas tan sumida en tus pensamientos que ni siquiera lo notaste. ¿En que pensabas? –insiste.

—En...nada importante —respondo y comienzo a comer.

—¿Segura? —pregunta. Asiento.

—¿Cómo dormiste? —le pregunto en seguida tratando de cambiar de tema.

—Muy bien. ¿Que hay de ti? —pregunta.

—Bien —sonreí cortamente.

Justo en ese momento el príncipe Eunwoo entró junto al príncipe Donghyuk. Y ni siquiera miró en nuestra dirección.

—¿Ya organizaste tu maleta? —le pregunto a Jungkook.

—Aún no —dijo.

—Entonces vamos. Te ayudo —sujeté su mano y lo hice levantarse para salir del lugar.

—Te es incómodo estar conmigo mientras está Eunwoo ¿verdad? —me pregunta Jungkook en lo que nos dirigíamos en el ascensor hacia la planta donde quedaba su habitación.

—¿A ti no? —elevo una ceja y lo miro.

El chasquea la lengua —¿Quieres que te sea sincero? –pregunta mirandome.

—Mhm —asentí.

—En lo absoluto —contestó.

—Es tu amigo —respondí—. Y ayer me dijiste que lo que te había dicho te había molestado. Y te hizo sentir mal porque ustedes dos, se llevan/ o se llevaban bien.

El asintió mientras me escuchaba.

—Sí. Es verdad —hizo una pausa—, pero no voy a dejar de estar contigo por eso. Además Taeeun, ¿no te das cuenta de que el, es el que está actuando mal?. Simplemente se está desquitando por el hecho de que tu me elegiste a mi y no estás saliendo con él como quería.

—Está bien —asiento de acuerdo con él—, pero a todo esto, ¿te has puesto a pensar que a mi si me hace mal que ustedes no se hablen por culpa mía?.

—Ayer hablamos acerca de eso, Eun —repitió él.

—¡Pero aún así no puedo evitarlo! —exclamo.

—Entonces ¿que?. ¿Vas a romper conmigo? —arqueó una ceja mientras me miraba fijamente.

—Yo no me quiero casar. Tu tampoco —dije tratando de que el rumbo de la conversación no me quebrara la voz—. Y si ninguno de los dos queremos casarnos, y el evento se basa de eso, ¿que estamos haciendo juntos?.

El me mira sin ninguna expresión en el rostro.

—...Así que no tiene sentido que estemos ¿no? —continuo mientras el me miraba sin decir nada—. Entonces hemos terminado, príncipe Jungkook.

Y justo en ese momento el elevador se abre y yo salgo en dirección a mi habitación tratando de retener las lágrimas, para soltarlas sin problema alguno cuando esté en la habitación sola.

Cerré la puerta tras de mi y aferré mi mano con fuerza al picaporte, mientras mordía mi labio inferior y trataba de ahogar el llanto.
Cerré mis ojos mientras las lágrimas bajaban por mis mejillas y sentía mi corazón romperse.

La verdad no sabía si lo que había hecho estaba bien, o estaba mal, pero al final de cuentas, nunca fue mi intención entrar aquí con la idea de enamorar o de gustarle a alguno de los príncipes. Y mucho menos, que uno de ellos -en este caso, Jungkook-, me terminara gustando a mi también.
Y más de lo que yo pensaba.
Entonces, por ese lado estaba bien ¿no?.
Yo me iría justo como quería desde un principio.

                            Jungkook;

Golpee con mi puño cerrado la pared del elevador importandome poco que mis nudillos terminaran lastimados por el material de este. Dejé mi cabeza apoyada sobre mi brazo con mis ojos cerrados.

¿Y si le hubiese dicho que si me casaria con ella?.
Cuando escuché que el rumbo de su conversación se dirigía a ese sentido, tuve eso atorado en mi garganta.
Pero no se lo pude decir. Y solo pude ver como se iba dandome la espalda.


Un poquito de drama porque sí <3

Lindo fin de semana💓

Príncipes del 97 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤  ✔Where stories live. Discover now