VI Flechazo

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Luego de la escuela, Gabriel le pidió a Félix y a su hijo reunirse con él en su oficina.

-He tomado la decisión de darles la tarde libre.

Adrien lo miró sin entender nada.

-Tendrán tres tardes libres a la semana dictadas por mi -continuó- y un fin de semana al mes, el que ustedes elijan durante la estadía de Félix en esta casa.

-¿Y qué hay de mi castigo?

-Tu tía Amelie quiere que Félix tenga mas roce social con chicos de su edad, es lo necesario para terminar con este asunto a la brevedad y así volver a la normalidad lo antes posible.

Adrien miró a Félix quien seguía con la mirada fría sin un atisbo de emoción, mientras él trataba de disimular la sonrisa que quería escaparse de sus labios.

-¿Hay alguna actividad en la que puedas incluir a tu primo hoy?

-Mis amigos se reunirán en el barco de los Couffaine en un par de horas, la madre de Juleka se va de gira por primera vez en años y sus hijos le darán una fiesta de despedida.

-Bien, pueden ir.

-Marinette estará allí...

Gabriel frunció el ceño y tragó con dificultad.

-Solo recuerda que tienes prohibido tener novia y no hagas algo de lo que te puedas arrepentir después.

-Si padre.

-Ya sabes, no más errores.

-Si padre.

Una vez salieron de la oficina, Adrien abrazó con fuerza a su primo aunque este se quedó inmóvil sin responder de igual manera.

-¡¡¡Gracias, gracias, gracias!!!

-Sabes que no quería nada de esto.

-Si pero eso dices ahora, cuando conozcas a mis amigos cambiarás de opinión, ¡sobretodo cuando conozcas a Marinette! Es la chica más dulce que existe.

-Si tú lo dices...

El barco de Anarka y sus hijos estaba especialmente lindo esa tarde, habían construido una hermosa escenografía para su escenario y la cubierta estaba decorada con luces, arreglos florales de papel y banderines de tela.

-¡¡No puede ser!! -se emocionó Rosita corriendo a los brazos de Adrien- ¡tendremos a nuestro tecladista en la tocata de hoy!

Todos estaban felices con su llegada hasta que vieron quien venía tras su amigo y sus rostros cambiaron rotundamente.

-Chicos... mi primo se quedará en mi casa por un tiempo y lo estarán viendo muy seguido -no sabía realmente qué decir para cambiar los ánimos y la percepción de sus amigos después del incidente del vídeo años antes- ¿quieres decir algo Félix?

Félix suspiró y se cruzó de brazos mirándolos a todos de pies a cabeza.

-Lamento lo que pasó la última vez -dijo con su habitual seriedad- era un chiquillo mal criado en ese entonces pero espero que ahora podamos llevarnos bien.

-¡Claro Félix! -dijo Luka tratando de romper la incomodidad del momento- eres bienvenido.

Adrien le dio una cálida sonrisa al chico en agradecimiento y luego busco a Marinette con la mirada.

-Si estás preguntándote por Marinette, está en mi cuarto descansando -se apresuró a responderle Luka- ella preparó toda la decoración antes de que todos llegaran, probablemente todavía está durmiendo.

-¡Ah! Bueno -dijo sobando su nuca- sera mejor que no la moleste.

-Marinette aprecia mucho dormir pero probablemente le gustará más verte a ti -sonrió Juleka.

-¡Claro que si! -dijo Alya empujándolo hacia donde la chica se encontraba- ve a buscarla, nosotros entretendremos a Félix.

Cuando Adrien entro silenciosamente a la recámara, vio a Marinette tendida de costado sobre la cama, descubierta por el calor, usando un lindo y corto vestido color damasco pálido que llevaba una cinta crema en la cintura y otra del mismo color atada a modo de cintillo en su cabello suelto. Creyó que moriría de amor en ese instante y quería atesorar aquella angelical imagen por siempre, era la primera vez que la veía dormir, luego claro de esa vez en el StarTrain cuando la chica cayó rendida en su hombro produciéndole las agradables cosquillas en el estómago que luego Ladybug le hizo olvidar.

Adrien se recostó a su lado y besó sus labios con suavidad haciéndola despertar.

-Hola.

-¿Estoy soñando verdad? -dijo mirándolo adormilada.

-Si esto es un sueño puedes hacerme lo que quieras.

Marinette besó su boca suave y despacio, incrementando poco a poco sus movimientos hasta convertirlo en un beso apasionado, pero luego, se detuvo dándole una mirada desconfiada.

-¿Le desobedeciste a Ladybug de nuevo?

-¡Claro que no! Esto es 100% legal -dijo sonriendo- Félix está en mi casa y tengo que encargarme de que haga amigos porque es lo que mi tía Amelie quiere, así que a mi padre no le quedó de otra que dejarme salir para deshacerse pronto de ellos.

-No me agrada tu primo -Marinette recordó cuando quiso besarla sin su consentimiento y tuvo que golpearlo.

-Lo sé pero ya se disculpó hace un rato allá afuera por lo del video y además, fue hace mucho tiempo.

-En ese video, el que borró, te había dicho algo importante.

Adrien la miró interesado y la giró sobre él para atraparla.

-Dime que era.

-No fue nada que ya no te haya dicho.

-Quiero saber cada palabra que dijiste.

-Adrien, te amo, cuenta conmigo siempre.

-En ese tiempo era un tonto así que probablemente te hubiera dicho algo como "yo también te amo amiga" -dijo haciéndola reír a carcajadas.

-Si estabas bastante ciego -sonrió ella.

-¡Oye! También es tu culpa por hacerme creer que estabas enamorada de Luka, fui el último en enterarme como un año después de que habían terminado.

-No seas exagerado.

-Bien, meses pero aún así...

Marinette selló sus labios con un beso -ya déjalo, estamos aquí ahora.

-¿Besándonos en la cama de Luka?

-¡No me refería a eso Adrien!

-Lo sé, lo sé -rió él- vamos... dale una oportunidad a Félix, de no ser por él yo no estaría aquí.

-Está bien -suspiró- tiene mucho mérito si lo pienso de ese modo, vamos allá.

Adrien y Marinette volvieron a la cubierta tomados de la mano por primera vez ante todos.

Félix levantó la vista y se topó inmediatamente con la preciosa imagen de Marinette. La chica a la que antes consideró patética había crecido y ya no lo parecía más, muy por el contrario, le pareció hermosa, sexy, perfecta y comenzó a experimentar sensaciones físicas que nunca antes había vivido. Su corazón se aceleró, sus manos comenzaron a sudar y en su estómago, las cosquillas no dejaban de inquietarlo.

-¡Wow! -gritó Alix sacándolo del embobamiento- ya era hora.

-Vamos a brindar por los novios -dijo alegremente Nino yendo por unas cervezas.

Marinette se acercó a Félix sonriendo.

-Gusto en conocerte Félix -dijo besándole ambas mejillas- soy Marinette y me alegra mucho que puedas pasar un tiempo con nosotros.

El chico cambió de color al instante y creyó que no podría articular palabra pero la seriedad de su rostro se mantuvo inquebrantable.

-Igualmente Marinette -dijo en su tono característico.

La noche enmascarada, continuación ~MLB~Where stories live. Discover now