XI Cataclismo

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Las salidas a solas entre Marinette y Félix continuaron, Adrien termino acostumbrándose a ellas y disfrutaba escuchar a Marinette contándole las cosas que hacían o conversaban, ya que, a pesar de estar seguro de que su primo se había enamorado de ella, nada en los relatos de Marinette le hacían creer que sintiera algo por él, así que solo se dedicaba a disfrutar de descubrir aquella faceta desconocida de Félix que le parecía tan intrigante y a la vez divertida.

Todo parecía marchar a la perfección, como novios, Adrien y Marinette eran una pareja goal según la opinión de todos sus amigos. Nunca pensaban en los problemas solo en sus soluciones, por lo que jamás llegaban a pelar, el respeto y la confianza eran su fuerte, y la complicidad que existía entre ellos podía percibirse a simple vista en todas sus acciones. Se amaban tanto que no tenían ningún inconveniente en demostrarlo frente al mundo, pues les era imposible contener sus muestras de cariño cada vez que compartían el mismo espacio.

Lamentablemente, toda esta dinámica ideal tomaría un giro inesperado comenzando con la noche que Félix invitó a Marinette al Le Cinq, un elegante restaurante de comida francesa.

Marinette se levantó bruscamente de su asiento llamando la atención de todos a su alrededor.

-¡Necesito salir de aquí! -dijo agitada.

Corrió fuera del restaurant y Félix salió tras ella, sin embargo, la chica logró perderlo dando empujones a los transeúntes quienes atochaban la avenida  George V. Sus piernas parecían perder la fuerza a ratos pero no podía detenerse hasta encontrar un lugar que la hiciera sentir segura pues su corazón parecía que se iba a salir de su pecho y la sudoración fría empapaba su cuerpo.

Finalmente, sus pies la llevaron a un lugar inesperado, las luces de aquel casa-barco la encandilaron y alcanzó a reconocer la figura de su amigo apresurándose a socorrerla en cuanto la vio desfallecer sobre la acera. Media hora más tarde abrió sus ojos con dificultad, podía percibir la calidez de una colcha pero aún así su cuerpo no dejaba de tiritar y Luka la miraba preocupado al tiempo que secaba el sudor de su frente con una toalla fría.

-¿Le dijiste a alguien que estoy aquí? -fue lo primero que dijo al despertar.

-Tranquila, estaba esperando a que recobraras la conciencia antes que nada. Por lo demás, estamos solos, mamá aún no regresa de su gira y Juleka está con Rosita celebrando su aniversario, no llegará esta noche.

-Que bien... gracias Luka.

-Toma esto -dijo el chico acercándole un medicamento y un vaso de agua- te ayudará a bajar la fiebre.

Marinette lo tragó con dificultad y luego comenzó a llorar. Luka, quien estaba en una silla frente a ella, se sentó en la cama y la abrazó contra su pecho mientras acariciaba su cabello.

-Trata de respirar despacio, llorar aumentará la fiebre, hagámoslo juntos.

El chico llenó sus pulmones pausadamente en cuatro segundos, mantuvo el aire en dos y lo expulsó en seis mientras Marinette lo seguía, varias repeticiones más tarde logró controlar su llanto pero no sabía cómo continuar, sus secretos quedarían expuestos y era peligroso involucrar a su amigo en ello.

-Lo lograste, eres fuerte, sabía que lo harías.

-Gracias Luka...

-Ahora dime... ¿qué fue lo qué pasó?

-Lo siento, no se porqué vine hasta aquí... la verdad es que, hay muchas cosas que no sabes y no puedes ayudarme.

-Entiendo ¿pero sabes una cosa? Creo que tu instinto te trajo al lugar adecuado -dijo Luka sosteniendo sus manos- ¿se trata de Adrien no es así?

La noche enmascarada, continuación ~MLB~Where stories live. Discover now