XV Renacimiento

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Aquel domingo, sería un día difícil de olvidar y quedaría marcado en el recuerdo de todos para siempre, la hora de la cena familiar llegó, Félix se había esmerado en colocar una mesa elegante para la ocasión y el menú era de los más finos.

-¿A qué hora llegará tu invitada hijo? -preguntó Amelie.

-¿Esperamos a alguien más para cenar? -interrumpió Gabriel.

-Así es tío, ella ya debe estar por llegar.

Adrien entendió que hablaba de Marinette, no sabía nada de esa cena pero algo sospecho cuando vio llegar a su tía Amelie por la tarde ¿qué podría haber pasado para que su primo armara tal festejo? Se calmó a sí mismo suponiendo que Félix quería presentarle a su madre su primera amiga Parisina pues eso era todo lo que Amelie quería y era imposible que estuvieran saliendo, apenas habían cortado hace un par de días. El timbre de la mansión sonó interrumpiendo sus pensamientos y anunciando su llegada.

-¡Debe ser ella! -dijo levantándose de su asiento para recibirla personalmente en la entrada.

Cuando el chico ingresó al comedor con Marinette sujetando su y brazo usando un elegante vestido azul (con las características que Félix le había solicitado), generó diversas reacciones, Gabriel miró a Adrien con molestia y este le devolvió un gesto de no saber que estaba pasando, por otro lado, Amelie sonreía encantada y se puso de pie para saludarla.

-Adelante cariño, toma asiento -dijo acompañándola a la mesa- luces preciosa, soy Amelie, la madre de Félix, ¿cómo te llamas?

-Marinette...

-Que lindo nombre, me suena de alguna parte, en fin ¿qué tipo de relación tienes con mi hijo?

-Jajaja, mamá ya basta, la estás poniendo nerviosa -dijo Félix deslumbrante- Marinette es mi novia y vamos a casarnos.

-¿¡QUÉ!? -gritó Adrien sintiendo que su mandíbula iba a dar contra el piso.

-¡OH POR DIOS! -exclamó Amelie mientras Gabriel comenzaba a reír maliciosamente, regocijándose con la impresión de su hijo- estoy tan feliz por ustedes muchachos ¡esto hay que celebrarlo!

-Un brindis por la feliz pareja -dijo Gabriel alzando su copa sin dejar de reír.

Marinette trataba de sonreír y al toparse con Adrien quien la miraba atónito, levantó ambos hombros pues ni ella entendía cómo se había metido en esa extraña situación.

-Bueno, bueno -quiso aclarar Félix después del brindis- no es que nos vayamos a casar pronto, Marinette es la mujer perfecta para mi así que decidí asumir el compromiso desde ya, hasta que ella esté lista.

-Cariño ¡es el anillo de los Graham de Vanily! -celebró Amelie mirando la mano de la chica- estoy tan orgullosa de ti hijo mío.

La expresión burlesca de Gabriel se borró de inmediato al notar la joya y volvió a su habitual seriedad.

La cena continuó y la conversación era llevada en gran parte por Amelie interrogando a Marinette y Félix respondiendo casi todo por ella. Una vez terminaran de comer, se dirigirían al salón para seguir con la plática.

-Creo que me iré a dormir -dijo Adrien quien apenas había tocado su plato.

-No seas aguafiestas Adrien -le recriminó Amelie- todavía es temprano.

-Estoy cansado tía -dijo acercándose a besar su mejilla- buenas noches a todos.

-¡Lo haces trabajar mucho Gabriel!

Inmediatamente después de que Adrien dejara la habitación, Marinette decidió ir tras él, necesitaba explicarle toda esa ridícula situación que se creó al rededor suyo.

La noche enmascarada, continuación ~MLB~Where stories live. Discover now