𝐸𝑙 𝑢́𝑙𝑡𝑖𝑚𝑜 𝐻𝑖𝑑𝑎𝑙𝑔𝑜. Apolo y tú.

∆∆∆ 12 ∆∆∆

Estoy algo nerviosa, algo es poco, estoy extremadamente nerviosa, estoy en la puerta tomando el valor de entrar, como le explicó a Apolo que le quite el pantalón ya que no podía verlo con esa ropa toda sucia.

Y lo recuerdo, está en mi cuarto, con mi libretas y todos mis dibujos. Mierda el dibujo que hice de él anoche.

Entro y lo veo en el mismo lugar.

Que alivio.

—Aquí tienes—digo entregándole los pantalones, recogí mi libreta y vuelvo a salir de la habitación.

Entro a la recámara después de darle tiempo para que se vistiese y lo veo.

—¿te siente mejor que anoche?— pregunto

— me puse muy mal—

—no tanto— él ríe.

—Bien me tengo que ir— asiento y lo guío a la puerta de atrás de la casa

— nos vemos después Apolo— me despido de él

— t/n- me detiene antes de cerrar la puerta.

— dime—

— gracias, por todo—dice para luego desaparecer de mi vista .

De ahí no lo volví a ver hasta que las clases iniciaron.
Algo que me contó Raquel es que ellos -Ares y Apolo- van a una de las escuelas pagadas de aquí. Lo que me sorprendió es que Apolo fuera a la preparatoria vestido con el uniforme.

— no se supone que no estudiaba aqui— le susurro a Raquel cuando veo que se acerca.

— pues eso creía.—

— hola chicas— dice y posa sus ojos en mi.

Sentí una pequeña punzada por esos ojos.

— Hola Apolo, no estudiaba en Thomson?— pregunta Raquel.

— Me cambie, me cansé de ese lugar lleno de mala vibra y envidia.— pues al parecer Daniela también se había cambiado de Thomson por los malos tratos y así, así que se entiende perfectamente

— y tus padres te dejaron?— esta vez pregunto yo, Raquel me da un codazo, y entiendo, se que estamos torturando lo con preguntas

— lo siento, no es mi intención ser tan preguntona—.

— está bien, mis padres hicieron un alboroto, pero mi hermano Ares me ayudó a convencerlos—

En cuanto Apolo dijo Ares, inmediatamente voltie con Raquel, Raquel tenía una cara de por qué lo había mencionado.

Y la entiendo.

Hubieron varios insidentes, y Raquel le había pedido que se alejará.
Después el otro insidente del puente.
Yo no estaba en casa, cubría a un compañero y salí tarde, cuando llegue a casa no hable con Raquel por el cansancio.
Y a la mañana siguiente oí que alguien entro y salió no le tome mucha importancia hasta el medio día en el que Raquel bajo y pude ver qué tenía unos moretones.
Ahí fue cuando me contó todo, realmente me sentí la peor hermana del mundo por no estar para ella.

Volviendo a la actualidad.

— ¡Raquel!— gritan  detrás de nosotras—

— hay no— dice Raquel quejándose.

— acaso es quien creo que es— Raquel me había mencionado de uno de sus administradores que se llama Carlos, dice que está perdidamente lo o por ella, aunque mi hermana no tiene el interés en el pobre chico, así que creo que es él.

— si lo es— afirma cerrando su casillero.— nos vemos después hermana— dice tratando de huir llendose a sus salón

— ¿De que hablaban?— pregunta Apolo confundido

— El admirador de Raquel— cierro mi casillero— por cierto, ¿En qué clase estás?—

— En la clase 4B y tú?— dice él

Esto si que debe de ser una broma.

— En la misma que tú—