[💛] Capítulo 42

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[Jueves - 12:18 pm / Azotea]

-Con el paso apresurado, como si le estuvieran pisando los talones su peor pesadilla, Vicente sube las escaleras hacia la azotea con la esperanza de encontrar a Ian presente en el área externa. Previamente ya había buscado en todos lados, incluyendo las aulas, jardines y habitación de su amigo, pero no hubo indicios ni rastros del paradero de la pequeña cabra extraviada en el vacío. Era algo anormal y extraño recurrir a Ian de una manera desenfrenada y crucial debido a su estabilidad mental que lo ha llevado a hacer cosas inusuales que no son de su costumbre llevar a cabo; Vicente sabe eso.
Vagamente, el zorro espera que lo que tenga su querido compañero cotidiano sea algo temporal y sólo un problema sentimental apego a sus calificaciones escolares; de lo contrario, sus sospechas, junto con Libra, serían algo asertivas si Ian terminará por revelar un duro dato deprimente de si mismo.

Pero, de antemano, lo menos que podía llegar a alcanzar para resolver sus dudas era que se encontrara con él en el último lugar que le faltaba por revisar, la azotea. De todas la ubicaciones ya investigadas, la azotea era la única zona en la que Ian querría ir para despejar la mente, agregándole el hecho de que no tendría otro lugar a dónde ir sabiendo que está en la cima de toda la estructura escolar.

Para cuando Vicente llegó a lo alto de la escuela, delicadamente este abre con una mano la puerta que lo lleva al exterior, empujando con sigilo la salida con el temor de ver y no encontrar a la cabra ya familiarizada.

En cuanto pudo dar paso a su cuerpo con tan sólo ver la luz del atardecer que reflejó su pelaje, él asoma la cabeza y escanea la zona a detalle, teniendo solo en mente el característico color blanco de Ian que tanto lo diferenciaba de los demás colores presentes.

Y es en ese entonces donde lo encuentra. Encuentra a Ian con éxito rotundo.

Teniendo una previsualización de su paradero, parece estar bien e ileso de cualquier daño físico. Solamente está recargado en la barandilla, a la orilla de la azotea, con los brazos cruzados y con la mirada pérdida hacia los jardínes de la academia que rendían a su pues al mirar hacia abajo. Con lo que podría ser una expresión vacía y pensativa, Ian no parece estar percatado de la presencia del zorro y prosigue en su avistamiento panorámico hacia el sol que está ocultándose, desconectando sus cinco sentidos para disfrutar de sus pensamientos y enfriamiento de la tarde.

Por lo tanto, sin hacer ruido, Vicente cierra la puerta detrás suya una vez que pasa de esta y camina hacia él con sutileza para no asustar a la cabra al contacto.

Brevemente, él se apoya en la barandilla al igual que su amigo, acompañándolo a su lado derecho mientras buscaba la forma de decirle algo sin ser tan egoísta por interrumpir su concentración-

Vicente: ( Hola... )
-Habló con la voz caída, esperando que la cabra oyera del todo a su saludo. Ian volteó, mostrando poca sorpresa a su aparicio, como si ya hubiera sabido que vendría-

Ian: ( ...Hola. )
-Respondió de la misma tonalidad que el zorro, pero con los ojos desencajados al rostro de este-

No te oí llegar...

Vicente: Su voz...suena seca y lenta. Cómo sin...le faltará aire.
-Pensó al oír a Ian hablar después de tanto tiempo-

...Yo no quería...mmm...yo...te estuve buscando por todos lados.

-Ian se pausó y pensó, mirando hacia otro lado mientras hacia tales acciones-

Ian: ¿...En serio?

-Vicente asintió con la cabeza en alto-

Vicente: Sí...

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