O19 ─ i keep ignoring every omen

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Viernes por la noche, la lluvia y las fuertes ráfagas de viento se apoderaban de la ciudad de Buenos Aires, era de esas típicas tormentas primaverales dónde no te quedaba de otra que hacer un maratón de tu serie favorita acurrucada en la cama

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Viernes por la noche, la lluvia y las fuertes ráfagas de viento se apoderaban de la ciudad de Buenos Aires, era de esas típicas tormentas primaverales dónde no te quedaba de otra que hacer un maratón de tu serie favorita acurrucada en la cama.

Sin embargo no todo era color de rosa, la rubia debía grabar una publicidad que estuvo posponiendo durante días por pereza y se le estaba acabando el tiempo límite impuesto por la marca.

Apago el teléfono cuándo se sintió a gusto con el video después de haberlo grabado casi cinco veces seguidas.

─ ¡Morita! ¿queres qué cenemos pizza? ─grito Ivan desde la planta baja del departamento.

─ ¡Bueno! Pero sin jamón por que me hace mal al estómago. ─respondió entrando a Tiktok.

De una, reina.

Estás semana se la paso en el departamento de Ivan aunque de vez en cuándo solía irse al suyo en lo que reposaba. Podría decirse que ya estaba muy harta del yeso y hubiese preferido mil veces tener una férula que en síntesis era mucho más práctico pero el doctor no lo aprobó y puede decirse qué Mora no es una persona que va en contra de las órdenes de un médico.

─ Voy a prender directo, más tarde cuándo cese la lluvia hago el pedido, ¿si?

─ Bueno, no hay drama.

La rubia se dejó caer de espaldas en el colchón preparándose para pasar horas durante la App de videos al que denominaban Tiktok. Era una locura la cantidad de tiempo que pierde mirando videos aleatorios en esa aplicación sin embargo adoraba procrastinar y ver a personas compartir los mismos traumas que ella.

El video se pauso y entonces una llamada sin registrar interrumpió su tiempo de procrastinar.

Eh.. ¿hola...? ─arrugó la nariz. Casi nunca respondia llamadas sin agendar por qué le generaba cierto miedo─ ¿Hol...

─ ¿Dónde carajos estas, Mora?

La muchacha se quedo rígida en la cama. Creyo qué era imposible estar escuchando la voz de su padre después de casi tres años, un nudo se instalo en su garganta con los nervios tocando cada fibra sensible.

Rápidamente irguió su cuerpo, sintiendo muchas ganas de vomitar.

Respondeme de una vez, Mora. ¿Dónde estás? ¿Ahora sos una cualquiera que se ofrece por un techo dónde vivir? ─hizo una pausa─ ¿Ya viste lo que dicen de vos en las redes? Me das vergüenza ajena.

𝐄𝐍𝐂𝐇𝐀𝐍𝐓𝐄𝐃 ▸ spreendmcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora