The Girl Who Fought | h.p |

Boggarts, Nightmares, and...Snuffles?

Los tres días que Nova estuvo en el cabestrillo fueron los peores. Al ser diestra, a Nova no se le permitía practicar magia ya que su brazo derecho estaba en el cabestrillo. En realidad, Nova no pudo hacer nada. Ella no podía escribir. Apenas podía sostener sus utensilios de cocina. El ardiente deseo de Nova de hacer galletas con chispas de chocolate tampoco ayudo.

Nova dependió completamente de alguien (realmente de cualquier otra persona) durante tres días.

¡Su vida había terminado!

En su último día, Nova estaba extasiada. Podría quitarse el cabestrillo. ¡La mejor parte, Nova podría perderse parte de las pociones!

Una vez que finalmente le quitaron el cabestrillo del brazo a Nova, se dirigió a la clase de pociones, asegurándose de tomarse su tiempo. Ella no tenía la paciencia para lidiar con Snape hoy (no es que realmente alguna vez tenga paciencia para el murciélago de la mazmorra). Además, ya tenía una cita con Minnie por tirarle una cuchara a Lavender Brown.

Antes de que Nova pudiera llegar a Pociones, encontró a Harry y Ron caminando hacia ella. Entonces Hermione aparentemente apareció de la nada. Nova sabía que algo estaba pasando, pero supuso que Hermione le diría a Nova si era importante y no perdió el tiempo.

—¡Hola, chicos! —Nova llamo alegremente.

—Hola, amor —saludo Harry con una sonrisa.

—Te lo juro, te olvidaste de pociones a propósito —dijo Ron malhumorado.

—¿Por qué dirías eso? Ron Weasley, esa es una acusación muy seria. Nunca me perdería las pociones intencionalmente. ¡Me encantan las pociones con el murciélago de las mazmorras! —Nova respondió sarcásticamente. Hermione puso los ojos en blanco. Ron parecía que estaba tratando de no reírse mientras aun intentaba estar enojado con su amigo.

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Después de un almuerzo sin incidentes, el Cuarteto Dorado y sus compañeros de clase se dirigieron al salón de clases de Defensa Contra las Artes Oscuras con el profesor Lupin, o como Nova se refería, él Señor Hombre de Chocolate.

Para gran decepción de Nova Black, el señor Hombre de Chocolate no estaba en su salón de clases. Mientras esperaba en silencio a que apareciera el profesor Lupin, Nova pensó que tal vez necesitaba un nuevo apodo.

Willy Wonka le vino a la mente.

Sin embargo, Nova decidió no hacerlo. Willy Wonka la aterrorizaba. Con la esperanza de molestar a sus padres adoptivo, Nova vio la película de Willy Wonka y leyó el libro. El hombre ficticio la aterrorizaba.

Este monstruo no solo ahogo a un niño en un rio de chocolate, sino que también convirtió a una niña en un globo azul, dejo que las ardillas atacaran a otra, tuvo esclavos y muchas más cosas horribles. Pero lo peor de todo fue como encontró a su presa. ¡A través del chocolate! ¿¡Qué clase de monstruo usa el chocolate como cebo!?

Ahí Nova hubiera sido honesta, habría caído en la trampa. Si fuera aún más honesta, le encantaría ahogarse en un rio de chocolate.

¡Oh, mira! ¡Es una ardilla! Nova pensó mientras veía a una ardilla correr a través de un árbol. Al instante, lo llamo Jeff.

¿Y si es una niña? Nova pensó de nuevo. Jeffina. Declaro Nova, resolviendo el problema.

—Buenas tardes —dijo Lupin entrando a clase. Estaba tan andrajoso como siempre, pero parecía más saludable que en el tren, como si hubiera tenido unas cuantas comidas completas—. ¿Podrían volver a poner todos sus libros en sus bolsas? La clase de hoy será una lección práctica. Solo necesitaran sus varitas.