Capítulo 15 - Jerarquía.

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Lan XiChen posó la embocadura entre sus labios, y, tras unos segundos, Canción de lucidez fluyó suavemente hacia la persona frente a él. Jiang Cheng cerró los ojos; inhaló y exhaló para controlar su respiración y emociones mientras los efectos de Canción de lucidez influyeron en él de forma positiva. Pudo sentir cómo la ira en su interior se apaciguó gradualmente. Abrió los ojos para mirar a Lan XiChen. Lo encontró con la mirada hacia abajo y el rostro sereno, como si la melodía también estuviera calmando su ansiedad.

Pensó, por un momento, lo peligrosa que sería la secta Lan si decidieran usar esas técnicas musicales para el mal.

De un segundo a otro su mirada se quedó fija en el ámbar oscuro de Lan XiChen que también lo miraba. Este último despegó los labios de la flauta y esquinó un poco la cabeza con una ligera sonrisa, después asintió satisfecho al sentir que las emociones de Jiang Cheng fluyeron con calma, o al menos un poco más relajadas que antes.

Lan XiChen asintió ante el resultado favorable, pero, algo en su pecho se agitó. Tuvo un pequeño temblor en las manos al recordar cuando ayudaba a Nie MingJue de la misma forma mientras tocaba con el guqin en la residencia de su Hermano Jurado. Desestimó el sentimiento, no quería centrarse en eso porque lo que vino después de aquello, aunque no era consciente de lo que hacía Jin GuangYao, fue doloroso hasta el punto de ahogarlo sin matarlo.

Jiang Cheng se puso de pie, dejó el cuenco de té y Lan XiChen hizo lo mismo. Se despidieron poco después sin decir demasiado.



Jiang Cheng llegó a la residencia de invitados de su suegro. Esperó a que lo anunciaran y la sirviente de Zhou LiQin lo llevara con él.

Cuando entró, Zhou LiQin lo esperaba de pie. Jiang Cheng no pudo decir nada cuando Zhou LiQin ya escupía y escupía palabras llenas de preocupación—. Líder de secta, ¿cómo está mi A-Mei? Estoy tan preocupado —se llevó la mano al pecho—. No me atreví a acercarme al Pabellón de enfermería porque sé que los médicos estaban examinando su condición...—la voz le tembló un poco—. Pero dígame, ¿qué fue lo que le dijeron? ¿Su salud es buena?, ¿estará en reposo durante mucho tiempo? ¿Existe la posibilidad de que pueda ver a mi hija pronto?

Mientras hablaba, se acercó a Jiang Cheng para acompañarlo a que se sentara. Este último observó, sin perder detalle, cada una de las facciones que su suegro contraía. No estaba actuando, la preocupación era tan genuina como el hecho de que él quería golpearlo hasta la muerte. Sin embargo, la preocupación no era precisamente por su hija, era por él mismo. Si algo le sucedía a Zhou LengMei, su intención de continuar succionando dinero y de querer elevar su insípido clan quedaría arruinada. Tenía miedo de que algo le pasara a su seguro; el hijo que Madame Jiang, no Zhou LengMei, estaba esperando.

Se sentó y su suegro fue a sentarse al frente. La sirviente se acercó con algo para que bebieran, pero ninguno de los dos tocó nada, ni Zhou LiQin, que sentía la garganta seca y que no pudo probar bocado desde lo ocurrido horas atrás. Estuvo todo el tiempo deshaciéndose los sesos, pensando, en qué excusa podría darle a Jiang Cheng si es que lo que pasó se le era dicho. Por supuesto, estaba seguro de que Zhou LiQin y su doncella estarían en silencio, y les rezó a todas las divinidades para que el líder de la secta Lan no hubiera visto lo ocurrido desde un inicio.

Así que, tratando de tranquilizar su corazón, se convenció de que nada le fue contado. Si así hubiese sido, y con el famoso carácter que se le atribuía a Jiang Cheng, si alguna palabra en su contra salió de la boca de Li WanYu, hacía varias horas que su vida se habría esfumado. Respiró, mas, en sus manos fue evidente el nerviosismo. Hizo lo posible por ocultarlas y volvió a hablar con la voz más clara. Como era de esperarse, mintió—. Me dolió tanto el corazón cuando vi a A-Mei caer. El dolor y el miedo de que se hiciera daño, de que mi nieto se hiciera daño, fue tan grande que me dejó paralizado.

Purpúreas nubes de loto | Lan MeiLing | C A N C E L A D ADonde viven las historias. Descúbrelo ahora