2. Ganamos

3.9K 319 122
                                    

Lais Perspective

Marcus, Vanya y yo, entramos a una cafetería. Nisiquiera sé para que entré, de todos modos iba a irme justo ahora. Solo había venido porque sabía que Vanya tramaba algo, y ahora que ví con quién estaba, podía irme sin preocupaciones.

—Vanya, me voy —Le avisé a mi hermana, seguido, dirigí mi mirada a Marcus. —Si ella vuelve a casa y tiene algún rasguño, Marcus, tú y tu familia lo lamentarán. —Amenacé.

Me despedí de Vanya y empecé a caminar de regreso al hotel, no estaba lejos así que no tardé mucho en llegar.

Al cruzar la puerta, pude escuchar las peculiares voces de mis hermanos, Diego, Klaus, Cinco y Luther estaban reunidos, comiendo como una linda y normal familia.

—Niño, ponte ropa —Le dí una mala mirada a Cinco, que se paseaba con una bata por todo el hotel.

Cinco rodó los ojos y yo le sonreí sarcásticamente, me senté junto a Diego, tomé unos palillos que habían en la mesa y empecé a comer.

—Cállate y escucha, Laís —Regañó el niño-anciano. —He estado pensando en nuestro pequeños caos de línea temporal. —Dejé de comer y empecé a prestarle atención. —Me complace anunciarles que, en mi opinión personal, estamos completamente a salvo. —El enano tomó un trago de su vaso.

—¿No causamos otro apocalípsis? —Pregunté, obviamente tenía que hacerlo, crear apocalípsis era nuestra especialidad.

—Afortunadamente no, pero... hay una, pequeñez, nada que no tenga solución. —Todos dejaron de comer y miraron serios a Cinco, él fingió que no se daba cuenta y tomó unos palillos para comer.

—¡Ya dilo de una vez! —Le gritó Diego.

—Bien, Diego —Dijo Cinco con una calma insoportable. —Verán, papá no nos adoptó cuando éramos bebés, pero esos bebés aún existen aquí. Solo que están en lugares diferentes, con otras personas. —Terminó de decir Cinco.

Honestamente no le veía lo grave, esos bebés deben estar en alguna otra parte del mundo.

—¿Y? —Preguntó Luther.

—¿Y donde están ahora? —Preguntó retoricamente. —Es bastante probable que hayan personas idénticas a nosotros, caminando ahí afuera, con vidas totalmente distintas.

En cuanto Cinco terminó de hablar, Luther dió un grito ahogado, como si hubiera recordado algo importante. —Nuestros doppelgängers —Dijo finalmente.

Klaus lo vió como si acabara de decir una estupidez. —Esa una palabra inventada —Regañó a Luther.

—Claro que no, los viajes en el tiempo existen, por lo tanto los doppelgängers también —Empujé la frente de Klaus con mi dedo.

—¡Wow, wow, wow! —Se quejó Diego. —Dijiste que era un pequeñez y claramente no lo és —Apuntó con sus palillos a Cinco.

—Bueno, técnicamente si pasas mucho tiempo junto a tu doble, enloqueces. —Dijo más para si mismo que para nosotros. —Por eso, si llegaramos a verlos, ¿tenemos que...? —Dejó la pregunta en el aire.

—Matarlo. —Dijo Diego el sabio.

—Dormir con él —Exclamó Klaus.

Cinco rodó los ojos. —Evitarlo.

—Pero, ¿que diablos les pasa? —Preguntó Luther ante las evidentemente erradas respuestas de sus hermanos.

—Oh, vamos, ¿acaso no quieres probar el sándwich de Luther? —Le dijo Klaus, Luther le rodó los ojos y siguió comiendo.

—Eso es asqueroso Klaus —Volví a comer. —Bueno, ¿debemos evitar a nuestros dobles a como de lugar? Eso significa que debemos mantenernos alerta a todo momento, ¿correcto? —Pregunte algo ansiosa.

¡Yei, no hay apocalípsis pero igual hay que tener cuidado las 24 horas!

—Incorrecto, Laís —Habló Cinco. —Antes de que papá nos arrastrara hasta aquí, éramos bebés regados en diferentes partes del mundo, lo más probable es que nuestros dobles nisiquiera estén en nuestra zona horaria. —Levantó sus palillos y se metió un gran bocado de comida a la boca.

Lo miré por un momento y cuando el se dió cuenta, asintió con una sonrisa. Eso me tranquilizó bastante, a Cinco podría confiarle mi vida.

Por un momento todos nos quedamos en silencio, pero era un silencio tranquilizante, por fín estábamos en paz.

—Aunque, ¿no les parece un poco grosero que el hecho de que papá no nos adoptara, no haya cambiado nada? —Preguntó Klaus con indignación. —Me siento bastante ofendido.

—Nunca dije eso Klaus —Cinco lo regañó.

No pude evitar reir ante sus palabras, pero inmediatamente pasé a sentir algo raro cuando Diego salió corriendo de la mesa.

—Espera, ya vuelvo. —Y salió disparado hacia el pasillo.

Pensé en seguirlo pero de verdad tenia mucha hambre así que me quedé con mis queridos hermanos.

—Entonces como sabremos en que cambió? —Volvió a preguntar el castaño.

—Si, yo también me siento ofendido al saber que no hicimos ningún cambio con nuestra llegada —Ahora el indignado era Luther.

Cinco les rodó los ojos y antes de que pudiera hablar, yo lo hice. —Es cierto Cinco, me resulta indignante saber que no creamos ningún fin del mundo con nuestra llegada, ¿acaso perdimos nuestro toque secreto?

Pregunte irónicamente y todos los presentes —incluso Cinco— se rieron.

—Escuchen, el punto es que lo logramos. —Después de tanto tiempo, sonaba relajado. —Salvamos al mundo, detuvimos el apocalípsis y volvimos a casa a tiempo para cenar. —Hizo una pausa para beber algo. —Así que, lo que sea que haya cambiado o lo que sea que pase en esta línea temporal, podemos manejarlo. —Cinco levantó su copa y dijo las palabras que todos quisimos escuchar. —Ganamos.

Levantó su copa en el aire a modo de brindis.

—Ganamos —Todos levantaron sus copas y brindamos.

Finalmente se había terminado.

No más apocalípsis para esta familia, no habrías más peleas por sobrevivir, finalmente podíamos descansar y pasar tiempo juntos.

Recuperar el tiempo que habíamos perdido antes de que todo se saliera de control.

Espacio libre para comentarios de todo tipo ->

Written by Dani <3

El Último Apocalípsis | Ben Sparrow [✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora