HUNTER X HUNTER (KILLUA Y TÚ)

Encuentra x Los x Problemas

Leorio y Tori tenían miradas que expresaban lo desagradable que era el escenario para ellos.

Por un lado Leorio parecía sumamente enojado y a punto de ir con el mismísimo rey y darle una paliza.

Por otra parte, Tori estaba en shock, su cabeza estaba tratando de procesar la información. Entendía que habían personas sumamente enfermas, pero que en esa masacre incluyera al pequeño bebé la hacía temblar del asco que le provocaba

Kurapika: Por eso el barco está teniendo un descontrol tan grande tanto en los niveles superiores con.o inferiores. Todo esto es una locura.

Tori: Por eso apresuraron la llegada de nuestro escuadrón. Necesitan controlar la situación.

Leorio: Sabía que la situación era oscura. Pero no a este grado

Kurapika: Es mi deber protejer al principe Woble y a la reina Saito. Así que, lo lamento Tori, no te podré ayudar en tu búsqueda por esas personas.

Tori: No te preocupes por ello. La realidad es que ya contaba con eso.

Kurapika suspiro, de alguna manera escuchar eso le dolió un poco, después de todo, a veces sentía que Tori dependía de él, aunque conforme pasó el tiempo, esa dependencia desapareció completamente.

Leorio: En ese caso, volveré al área médica. No puedo dejarla sin vigilancia por mucho tiempo.

Se despidió de ambos y salió del baño, su voz se escuchó cómo se despedía de los guardias que estaban en la habitación.

Kurapika: Tú... ¿Te vas a quedar?

Tori: Quiero conocer a Woble. Suena a qué es un niño encantador... Claro si no es ningún inconveniente

Kurapika negó con la cabeza mientras sostenía una sonrisa.

Kurapika: Senritsu confirmo que si eres Tori. No le harías ningún daño a Woble.

Abrió la puerta y con la cabeza le indico a Tori que saliera.

Afuera los estaban esperando los demás guardaespaldas, quienes siempre estaban alertas y algo nerviosos.

Kurapika: Su majestad. Ella es Tori, le aseguro que no es ninguna amenaza.

Tori de inmediato hizo una reverencia ante la reina, de no ser por la máscara, todo mundo habría visto su rostro nervioso y asustado al estar frente a una diga de tal importancia como lo era la reina Saito

Saito: es un placer Tori.

Su voz no sonaba asustada. A lo largo de los días aprendió a confiar plenamente en Kurapika.

La belleza natural de la reina, al igual que su tono de voz y mirada hicieron que Tori se relajara un poco ante la presencia de la reina.

El pequeño Woble comenzó a Hacer pequeños ruidos, el bebé había despertado,

Tori: Ah! Lo lamento, creo que lo desperté

Retrocedió nerviosa. Su voz delató lo nerviosa que se había vuelto a poner, ya que estaba temblorosa y asustada

Saito: No, tranquila. Duele despertar a esta hora, ¿Quieres acercarte?

La pregunta tomó completamente desprevenida a la joven, quien tragó saliva nerviosa mientras asentía lentamente.

La reina Asintió con la cabeza para que se acercará, ante tal permiso Tori se acercó lentamente y nerviosa a la reina. Sería la primera vez que vería a un bebé, ya que todos los niños de la casa Miya los conoció ya más grandes debido a ciertos prejuicios de los padres.

El rostro del Woble era dulce y de alguna manera ante los ojos de Tori resplandecía.

Tori: Es ... Muy lindo

Acercó su mano al rostro de Woble, pero, Woble sostuvo su dedo anular sorprendiendo mucho a Tori.

El ver a Woble la hizo despertar sentimientos que jamás había conocido, era la primera vez que lo veía claro, que veía claro que era lo que quería y lo que amaba. La pureza de Woble de alguna manera fue reconfortante, una bocanada de aire fresco luego de conocer, escuchar y ver desgracias y crueldades por montones.

Tori: Hola Woble... Soy un pájaro

Kurapika miró un poco enternecido la escena, fue exactamente la misma reacción que tuvo él al ver a Woble, sensaciones que estaban dormidos o pensamientos agobiantes se dispersan, dándose cuenta incluso de errores que cometieron. Casi cómo si esa fueran las habilidades Nen del bebé.

Tori: *Jamás había pensado realmente en el futuro. Esto es lo que quiero cuidar...*

Sonrío de forma dulce, y sin darse cuenta, de sus ojos comenzaron a desbordarse

Tori: *Creo que a final de cuentas, terminaré tomando un camino diferente al que creí... ¿Killua querrá también un bebé?... *

Ese pensamiento le vino completamente de golpe. Jamás se había planteado la idea de una familia, en su cabeza siempre era el pelear y sobrevivir. Nunca pensó por la cabeza la idea de una vida normal.

Kurapika: *Ya cayó rendida ante Woble. Exactamente lo mismo me pasó... Por fin entiendo lo mal que fui con mis amigos. Cuando vuelva del continente oscuro, voy a compensarlos*

Senritsu, quien estaba completamente sorpendida por los resultados de la escena, se acercó a Tori colocando su mano en su hombro

Senritsu: Será mejor que descanses y vuelvas con Leorio ¿De acuerdo?

Tori volteó a ver a Senritsu más tranquila. Pese a que su rostro tenía una máscara, se podía notar que ella había perdido un peso enorme.

Tori: Claro. Tenés razón

Le costó un poco de trabajo separar se mano de la mano de Woble, no porque Woble niña soltará, más bien ella no quería soltar a Woble. Pero al final lo logró.

Kurapika: ¿Quieres que te acompañe?

Tori: No, estaré bien. La enfermería no está tan lejos

Puso bien su gorra y le sonrió a Kurapika justo como lo hacía cuando recién se conocieron y no había vivido tantas locuras.

Kurapika cerró la puerta de forma despacio mientras soltaba un suspiro profundo y algo lento

Senritsu: Es bueno ver qué ha crecido tanto en un año.

Kurapika: Si. Ya casi no puedo reconocer a la niña que dejamos en York Shin.

Senritsu: Sabes. El latido del corazón cambia pero sutilmente, siempre produce exactamente al mismo sonido.

Kurapika: ¿A qué te refieres?

Senritsu: Cuando la conocí, el ritmo de su corazón era tranquilo, suave y sonaba algo vacío, como si algo faltará dentro. Me costó un poco reconocerla, su corazón seguía latiendo tranquilo y suave, pero al mismo tiempo golpeado. Pude sentir la desesperación y renuencia.

Kurapika: ¿Renuencia? ¿Desesperación?

Su rostro paso de estar algo melancólico a estar asustado.

Senritsu: Tranquilo. No sé que pensó o que sintió cuando estuvo con Woble. Pero cuando se fue de aquí, su corazón latía suave, tranquilo y lleno. Estará bien

Senritsu sonrió amigablemente mientras miraba a Kurapika, ella siempre sabía que decir y en qué momento decirlo.

Kurapika: Tienes razón. Volvamos al trabajo

Kurapika levantó la cabeza de nuevo completamente decidido. Así como lo haría su pequeña amiga, él se enfocaría en su misión y la llevaría en lo alto.

Kurapika: Prepárense, hemos estado muy tranquilos, eso no es nada bueno

FIN DEL CAP 165