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Ese beso que le había dado a Nayeon le había llenado el cuerpo de alegría a la pelinegra, tanto que en su consultorio sin importarle el cadáver que estaba abriendo, ni que tenía cámaras de seguridad, se puso a bailar la conga, tomó como compañero de baile a su esqueleto de muestra que tenía junto a la ventana.

― Señorita ¿Se encuentra bien? ― dijo la vocecita de su secretaría.

― ¡Ahhhh! ― dijo la pelinegra soltando el esqueleto que cayó como un montón de cosas inservibles al suelo ― No, nada, nada ¿Qué haces aquí?

― Aquí...bueno, la señorita Kim la busca...

― Así que sí existe ― dijo Momo extrañada, la mujer ya dudaba por el estado mental de Momo ― ¿Quién es?

― Es una policía, viene para cotejar algunas cosas de este, hombre que ha muerto.

― Ok...hemm...ok, déjala pasar.

― Bien ― dijo su secretaria mientras Momo recogía avergonzada a su pequeño y delgado acompañante de baile. La mujer Kim Dahyun, era una delgada oficial con mirada dura que sostenía una pequeña agenda electrónica, era muy hermosa, con un largo cabello castaño obscuro y ojos cafés.

― Señorita Hirai, la he estado llamando a la Mansión Im, pero me han dicho que ha estado ocupada ― dijo con tono molesto. Momo sonrió, claro que había estado ocupada eligiendo ropita de bebe hasta muy tarde por internet.

― Pues, me disculpo, no pensé que la policía de Miami necesitaba de mi ayuda, el cadáver llegó hace 12 horas. No hago nada Judicial este caso es especial ― dijo la pelinegra con amabilidad acercándose al cadáver.

― Entonces, dígame de que se murió. ¿Hubo crimen o no? ― dijo la oficial sin dejar de ver al hombre.

― Pues... ― Momo recordó el beso ― Eso fue un crimen....

― ¿Qué?

― Lo que quiero decir... ― dijo Momo enfocando otra vez su mente ― Es, bueno el individuo murió hace 2 días, tiene edemas en el cuello, dos articulaciones rotas de la pierna y tres costillas rotas por un fuerte apretón, al parecer, fue atropellado, contra una pared, encontré residuos de cemento en las heridas del pecho cerca de las costillas rotas y pintura de auto en la espalda ― dijo con voz profesional, muy seria, la policía sonrió ― Lo tiraron luego al agua y por eso su estado azulado, además, ¿Qué?

― Entonces es verdad, es la mejor, además de hermosa, la más brillante.

― Miré ― dijo Momo tomando aire ― No tengo tiempo para usted, más que para darle el informe, así que ahórrese los chantajitos.

― Ok. Envíeme el informe a la jefatura señorita Hirai, es un gusto trabajar con usted ― dijo la oficial anotando cosas en su agenda ― Pero en caso que le aburra la chica castaña embarazada... Yo la espero en mi oficina, su secretaria tiene mi contacto ― dijo con sorna la bella policía.

― Aburrirme de la castaña ― dijo Momo clavando sin querer el bisturí al cadáver en el brazo, se dio cuenta de ello cuando el filo de la cuchilla sonó al tocar la mesa ― ¿Será otra amiga de SinB?

Momo tuvo que ponerle puntos al brazo del tipo asesinado intentando no recordar a la prepotente policía. "Aburrirme de la castaña, ya deseara ella y medio Seúl" pensó molesta. Luego salió a tientas, entró a toda velocidad a su Lamborghini ya que estaban todas las modelos amigas de SinB haciendo alboroto en la entrada.

— Demonios, ¿Qué hice para que esa tonta cabeza de paja se fijara en mí? — dijo la pelinegra saliendo a toda velocidad, otra vez se sentía muy cansada, al llegar a la mansión Im cenó sola en la cocina, ya que la madre de Nayeon estaba en casa de unas de sus amigas y como era de imaginar Nayeon debería estar encerrada en su estudio haciendo ejercicios o bien leyendo.

¡Eres su madre! (NaMo Version)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora