Capítulo 48 - OTRAS VIDAS -

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El fin de semana ha llegado, lo agradece, la noche anterior bailó por última vez en Moon... Se siente liberada y tranquila... Aunque muy en el fondo, extrañará lo empoderada que esa forma de bailar la hacía sentir...

Una idea ronda en su cabeza, podría dar clases de pole a quien quisiera aprender, es un ejercicio corporal muy completo y disciplinado, deberá trabajar más en esa idea... Ordena sus dibujos, sonríe viéndolos, todos los que se encuentran sobre su mesa escritorio son de Adam...

— ¡querida! ... ¡ya me marcho! ... — menciona en voz alta Brenda, ella sale y mira por la puerta de su habitación, la mujer sonríe y lleva una pequeña maleta, visitará a su amiga en Long Island, obviamente Daisy no va con ella...
— cuídate... salúdame a Adam...

— lo haré... Estará después del almuerzo, tranquila Bren... cuidare del departamento..

Brenda levanta una ceja,
— cuídate Daisy... un bebé de ambos sería precioso... pero aún soy muy joven... — la castaña se sonroja y niega... Brenda besa su mejilla y bajan  ambas, abajo un taxi espera, luego de un abrazo y muy bien acomodada en el asiento trasero su  abuela parte despidiéndose con una sonrisa y moviendo la mano.

Daisy sube y comienza ordenando todo, mientras la ropa se lava, desempolva y ordena cada lugar de la sala y cocina, lleva el cabello recogido, una básica oscura y unos shorts, mientras centrífuga una parte, toma otra que ya está lista y se decide a subir a la terraza, abre la puerta de su departamento y él sonríe, lleva sudadera, jeans y tenis, estaba a punto de llamar...
— hola... — la besa y Daisy parpadea...

— ¿Tú?... ¿Qué haces aquí?... Dijiste que después del almuerzo y no preparé nada aún ... — dice retrocediendo cuando él le quita esa canasta de las manos y deja su mochila por ahí,
— vine para apoyar... Pediremos algo para almorzar... No te preocupes...

Daisy sonríe,
— bien... Gracias Señor Driver, creo que haré que trabajes y mucho...

Ambos salen con rumbo a la azotea, mientras Daisy cuelga toda esa ropa, Adam la ayuda con las pinzas, conversan y cualquiera que los viera diría que son esposos...

Adam sonríe frente a un bonito conjunto de ropa interior... es de encaje y en un tono verde menta...
— no vi este... — menciona y Daisy se lo quita...
— comportate Adam...

Él mueve las cejas y sigue ayudando...

Luego de unos minutos y ya en el departamento Daisy le da la tarea de limpiar el piso de este, mientras lo hace, ella vuelve a esa azotea con un último grupo de prendas. Un par de horas después, juntos terminan de limpiarlo todo...

Ingresa a la habitación de la castaña para dejar su mochila, va a quedarse hasta el día siguiente y descubre esos dibujos sobre el escritorio, un par de paisajes y luego él... En muchas hojas, sus ojos, labios, él de perfil y frente... Se siente muy bien y amado, pero los paisajes y esas líneas son lo que más llaman su atención, realmente están muy bien elaborados.

Daisy aclara la voz...
— lo sé, eres tú en todas esas hojas, me encantas... — le dice y sonríe, él la toma hacia su cuerpo, la besa y ella responde... Luego de que sus lenguas juegan un poco, Adam toma asiento en el sofá de su habitación y como es costumbre la sienta en sus piernas...
— dibujas muy bien... Esos paisajes son perfectos... No tanto como ese rostro... Pero si... — ambos ríen — ¿Por qué no haces algo por mí?... — le dice y sonríe acariciando su mejilla...

— ¿qué?— pregunta ella y es curiosa

— tenemos tres obras que vamos a presentar, pensábamos en buscar a alguien que diseñe los posters... ¿podría presentar tus dibujos?... ¿Tienes más?...

RENACER Where stories live. Discover now