RENACER

Capítulo 55 - Vivir Juntos -

... exhala frente a esa ventana, se gira para ver a Brenda, esta cocina para que puedan cenar y Adam sonríe junto a ella, la ayuda en lo que la mujer indica, está entusiasmado escuchando sus historias de juventud...

Daisy no puede olvidar ese sueño, ese sueño en el que se veía niña... no puede olvidarlo por que Brenda estaba ahí... Mientras ellos preparan los alimentos, ella no puede parar de preguntarse que habría sido de esta mujer si algo le pasaba en esa piscina, no... No puede faltarle, Adam la ve entonces y se aproxima a ella, le da un beso y la toma de la mano para acercarla con ellos... Brenda pide que los ayude con algo...

Mientras pica las verduras un recuerdo claro llega...

Es ella en otro tiempo... trata de concentrarse en esos pequeños moldes, junto a la mujer que se parece a Brenda, harán pies de verduras y carne para la cena y necesita concentrarse en algo, no quiere dibujar o pintar pues está más que segura de que pintaría ese beso o lo que cree que fue... ¿Ese beso con Adam?

Daisy levanta la mirada y ve a ambos, no le prestan atención, este recuerdo la asusta... La asusta porque Brenda es un recuerdo muy claro con otra ropa y un tiempo que no está claro aún...
El recuerdo sigue...

- mi niña, necesitaré unos huevos... ¿Podrías? — indica Brenda o la mujer que cree es ella... El recuerdo continúa, puede ver fuera de esa vivienda...

Aún no llega ese atardecer, ella afirma con la cabeza y sale, aún hay gente trabajando, saluda a muchos y camina hacia el granero, es bastante amplio, lleva una pequeña canasta, hasta el final el gallinero... Ingresa y toma los necesarios, sale y se detiene, Richard la observa en medio del lugar , se quita la boina de la cabeza y sonríe...

— ¡auch!... — da un pequeño grito de dolor, se ha cortado, Adam toma su dedo y lo lleva al agua, deja que esta corra y la sangre fluye... Mientras Brenda va en busca del botiquín, Daisy no puede entender ver a Richard en este recuerdo, vestido de forma diferente también... Adam le dice algo y ella lo mira pero no entiende... Parpadea y trata de volver a este instante...
—... no es profunda... — escucha que dice al final...

Daisy siente que va a volverse loca, no es normal confundir su presente y tener recuerdos que es obvio no sucedieron... Brenda se aproxima y él la cura, luego de lo necesario sopla este dedo y Daisy se abraza a él...
— ¿vas a quedarte?... Tu amiga dijo que ocuparía tu departamento en una semana... — menciona, Brenda levanta una ceja...
— ¿qué amiga?... — Adam besa la frente de su chica y la cubre con sus enormes brazos... Deben contarle.
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Adam se ha marchado, deben volver al trabajo al día siguiente. Brenda toma una infusión sentadas en su pequeña sala...
— creo que debes pensar en tu futuro mi niña... - menciona y Daisy la observa.
— yo ya soy vieja... Bueno... no tanto... Pero he vivido lo necesario, he amado y estoy sóla por voluntad propia... No es tu camino...

— ¿por qué no te casaste? — pregunta Daisy, es la primera vez que lo hace...

Brenda exhala y coloca la taza en esa mesa central, entrelaza los dedos...
— amé mi niña... a un hombre maravilloso, pero el falleció y sentí ese vacío en el pecho, es triste y tan claro... duele tener la certeza de que no volverás a verlo... nunca más pude hallar en otra persona mi otra mitad...

Daisy siente escalofríos, cubre sus pies con la manta de ese sofá, Brenda bebe de nuevo y ella se pregunta si su abuela trata de decirle algo...
— Adam es un buen hombre... podría ser tu esposo...

Daisy niega...
— tú sabes lo que opino acerca de eso Brenda... Tengo miedo fallar cómo ellos... cómo ...

Brenda niega y mueve la mano frente a su propio rostro, como alejando los malos pensamientos...
— Adam y tú son distintos... Además esa tal Maya... – la abuela hace un gesto de molestia y Daisy ríe...
— uno debe proteger lo que ama... A veces ser egoísta con lo que uno siente y por quién uno siente... escucha mi niña, la nieta de mi amiga va a marcharse, me pidió apoyarla por un tiempo, necesita ayuda y soy lo más cercano ahora, me marcho a Long Island por unas semanas, tal vez un mes hasta que logremos encontrar un hogar para ella... traslademos sus cosas y se instale nuevamente... Te dejo el departamento, invitalo a vivir contigo... Si lo que tienen funciona... y lo sabrán sólo con la concivencia... Yo seré la primera en apoyar el que vivan juntos... ¿Te imaginas perderlo?