El padre de mi novio. [Versión 2022] ✅

29. La ingenuidad.

Nota:

Hola!!

Se me hace muy extraño escribir una de estas notas al inicio, pero quería decir que este capítulo es ESENCIAL.

Digamos que es el capítulo.

Es de mis favoritos, sincera y personalmente, así que espero que también les guste.🥰

¡Disfruten la lectura!😽

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Salí de la heladería con la cabeza agachada pensando en cómo no me había dado cuenta antes de que Blake me había estado engañando durante dos años de los tres que habíamos llevado de relación.

Me había estado martirizando por lo que había estado haciendo con Ian a sus espaldas, sin saber cómo decírselo ni cuándo, pensando mil veces en cómo iba a reaccionar ante la noticia.

Sin embargo, resultó que él estaba haciendo lo mismo y por muchísimo más tiempo sin remordimientos alguno porque no se le había visto intenciones de arrepentirse ni de detener lo que había estado haciendo.

Caminando a paso rápido, sabiendo que Ian me seguía bien de cerca, llegué a la plaza con las rampas de skateboards, donde habíamos quedado al principio, pero no entré en ella como tal, solo me acerqué a unos bancos que había en el parque de al lado, un poco alejada del ruido.

Tiré la mochila y el casco encima del banco con rabia, pero no podía sentarme porque una especie de adrenalina recorría mi cuerpo, así que me quedé de pie paseando de un lado al otro con las manos en la cara hasta que Ian llegó, quitó las manos y me abrazó.

—Lo siento... —Se disculpó por lo que acababa de suceder.

—No es culpa tuya que tu hijo sea un hijo de puta. —Me separé y miré hacia el cielo con las manos en la cabeza, aún pensando en lo tonta que había sido en el pasado.

—Preciosa, nosotros tampoco hemos sido unos santos. —Asentí y lo miré. Su cara mostraba preocupación. Tal vez se pensaba que aún tenía sentimientos por Blake, así que tuve que aclararlo.

—Es que no me duele haberlo visto con otra ahora mismo, cariño. Me da exactamente igual. —Suspiró profundamente, con alivio.

—Entiendo... —Asintió.

—¡Me duele que me haya sido infiel desde hace dos años! —Exclamé perdiendo un poco los nervios. —¡Dos putos años de tres que estuvimos juntos! ¡Perdí dos años de mi vida con alguien que no quería estar conmigo! ¡¡Mientras yo esperaba que viniera para pasar al menos un fin de semana juntos, él se estaba follando a otras!! —Volví a exclamar con rabia.

—Tranquila, preciosa. Ven aquí. —Me volvió a abrazar y yo me dejé mientras las lágrimas de rabia e impotencia resbalaban por mi cara.

Su cabeza descansó sobre la mía y dejó ciertos besos en mi pelo mientras me abrazaba con dulzura, con firmeza, haciéndome saber que estaba aquí conmigo.

No quería romper el momento porque me sentía tranquila a pesar de la maldita noticia de la que me acababa de enterar, de todo lo que estaba pasando por mi cabeza y todo siguió cobrando sentido en mis recuerdos;

Por eso el primer día, cuando Ian nos descubrió, Blake había estado muy nervioso.

Por eso en la primera cena que tuve con sus padres había estado tan ensimismado, tan callado y tan incómodo.

Por eso aquel día en su casa había estado más pendiente del teléfono que de mí y por eso había salido; porque había quedado con otra, no con sus amigos como me había dicho.