28

428 69 40
                                    

Steve le contó su historial de novias y todo el asunto con Tony, así que Denise le habló un poco de su novio y como este lo había dejado por la que consideraba su mejor amiga

К сожалению, это изображение не соответствует нашим правилам. Чтобы продолжить публикацию, пожалуйста, удалите изображение или загрузите другое.

Steve le contó su historial de novias y todo el asunto con Tony, así que Denise le habló un poco de su novio y como este lo había dejado por la que consideraba su mejor amiga. Al parecer ambos se entendían mejor de lo que parecía, no solo a nivel lingüístico, pues cuando no estaban peleando encontraban la manera de comunicarse, sino también un poco en lo sentimental.

—No entiendo porque alguien te dejaría por Tony —dijo, recargándose en él. Ambos estaban sentados otra vez dentro del corral de Leslie, mientras el niño jugaba con sus dados, armando la misma torre una y otra vez, la cual era catastrofisada por diferentes objetos, como un avioncito, un carrito, un oso de peluche, una pelota de peluche o su propia mano.

—Tampoco —respondió con sinceridad, encogiéndose de hombros—. ¿And what happen about Bright? —preguntó de repente.

Denise se le quedo viendo con mala cara.

—No me hagas elegir, porque no te gustará la respuesta —espetó en tono decidido.

—¿No? —el hombre se inclinó, dedicándole una sonrisa divertida.

—No —respondió, sintiendo que se sonrojaba.

Steve se inclinó, dándole un beso en los labios, Denise envolvió los brazos en su cuello, recargándose en él. De repente ambos escucharon un grito, Denise se giró, Leslie se había puesto en pie y los miraba fijamente.

—¿What happen? —ambos estaban abrazados, pero no dieron señas de besarse una vez más. Steve rodeo a Denise por la cintura y Leslie explotó, comenzó a llorar y corrió hasta su hermano haciendo un berrinche de proporciones épicas.

Denise lo recibió en brazos, alejándose de Steve.

—¿Qué pasa bebote? ¿Estás enojado? —preguntó, sosteniéndolo mientras se balanceaba de un lado a otro.

—¿Qué le pasa? —Steve se asomó y al verlo el niño gritó más fuerte. Denise levantó una ceja, Aquiles entró corriendo desde el patio, saltó dentro del corral y corrió a besar a Leslie.

Bobo entró detrás, pero se quedó dando vueltas fuera.

—¿No le gusto? —preguntó Steve, confundido por la reacción del niño.

—Owww, creo que está celoso —explicó Denise, tomando a la criatura por la cara—. ¿También quieres besito? —preguntó y comenzó a besarle las mejillas. Leslie dejó de llorar poco a poco hasta que se calmó, pero continúo hundido en los brazos de su hermano. Donde se acomodó invitando a Aquiles a que se uniera al abrazo.

—Cute —Steve suspiró y ladeo el rostro, sonriendo.

—Pero yo soy más lindo —insistió Denise. Steve se río.

—Yes, you are.




A Leslie no le gustaba que Denise y Steve se besaran, se dieron cuenta la siguiente semana cuando comenzaron a convivir como novios, el niño hacia rabietas constantes y estas sucedían justo cuando ambos tenían contacto físico. Resultó que el niño era la criatura más celosa del mundo, no sabían por qué, a él no parecía importarle cuando sus padres tenían muestras de afecto, entonces el asunto debía ser Steve.

—He hates me —dijo, inclinándose para ver a la criatura jugando con sus cubos. Leslie nunca lo miraba a los ojos, nunca le hablaba y siempre actuaba como si él no se encontrara presente. Él pensaba que aquellos rasgos eran inherentes en su personalidad, también actuaba así con Denise la mayor parte del tiempo, pero parecía que aparte de eso, sí que le caía mal.

—¿Odiarte? —Denise no se veía muy convencido—. No, para nada, si te odiara lo sabrías, créeme.

Steve se quedó pensativo y luego se encogió de hombros.

Debido a que Leslie tenía un ciclo de sueño bastante desordenado, ambos podían pasar una cantidad de tiempo decente juntos y a solas. En ese momento, por ejemplo, el niño estaba dormido en el sillón, con Bobo y Aquiles tumbados en el piso, haciéndole compañía.

Había pasado una semana ya y ambos estaban en una especie de luna de miel, aunque en líneas generales su relación no había cambiado tanto, la única diferencia era que ahora se besaban a escondidas de un bebé de tres años.

Para su mala suerte, su hermana se había enterado de que tenía novio y ahora no paraba de insistir en que los presentara, aunque sea en una llamada. Steve no estaba dispuesto a hacerlo a menos que fuera estrictamente necesario. En ese momento, por ejemplo, lo único que deseaba era pasar su tiempo de novios juntos y felices. Nada más, ya después se preocuparía por las formalidades.

—¿Cómo se llama eso? —pregunto, soltando un suspiro—. Cuando no gusto a la familia.

—No hay una forma de decirlo, no sé si hay una expresión para eso ¿Qué le caes gordo? —pregunto, Denise estaba preparado la comida para los tres. Habían comido juntos cada día desde que formalizaron.

—¿Caer gordo? ¿What do you mean? —Steve frunció el ceño, desde que pelearon la última vez se estaba esforzando en serio en aprender el idioma. A Denise le parecía tierno.

—Que le caes mal —explicó.

—Aaah ya —su madre le había explicado alguna vez esa expresión, si tuviera que traducir de forma literal no encontraría del todo el sentido de la frase. La primera vez que la escucho pensó que se refería a tener indigestión, eso por contexto.

—Listo, ya terminé —dijo, apagando la estufa.

—Perfecto, hora de comer —dijo y dio un paso hacia él, quedando a centímetros el uno del otro. Denise le sonrió.

—Mi hermano está en la sala —dijo, señalando a Leslie, que se encontraba en su séptimo sueño.

—Un besito —insistió, tomándolo de la cintura. Steve se había dado cuenta que Denise era débil a su español mal pronunciado. El chico se sonrojo y lo rodeo del cuello, juntando sus labios en un beso lento. A Denise le gustaba la textura de su lengua, se lo dijo una vez como si fuera nada, a Steve le pareció extraño, pero le daba igual, Denise era incapaz de darle un beso sin ponerlo duro.

Steve se separó de él y se le quedo viendo un momento.

—Hermanito —dijo.

—Hermanito —repitió Denise y luego volvió a besarlo. Steve lo sostuvo de la cintura y de repente escucharon una voz afuera de la casa.

—¡Denise! ¡Ya llegamos! ¡Denise!

El susodicho se puso pálido y se separó de Steve de golpe, mirándolo con los ojos muy abiertos.

—¿Quién es? —pregunto Steve, asomándose por la ventana. Denise le dio un tirón para que no lo vieran.

—¿Quién va a ser? —espetó alarmado—. Es mi papá. 

Ya falta sólo un capítulo para el final T-T

К сожалению, это изображение не соответствует нашим правилам. Чтобы продолжить публикацию, пожалуйста, удалите изображение или загрузите другое.

Ya falta sólo un capítulo para el final T-T. 

A mexican beautyМесто, где живут истории. Откройте их для себя