[1937 | Un Viejo Amor]

Capítulo 83 - ¿El jefe?

— ¡No es justo! —Se quejaba Xiao Zhan mientras realizaba compras en una tienda cercana al restaurante— ¡¿Como pudo irse así sin más?! Solo me besó y... ¡se fue!

Mientras el chico peleaba consigo mismo y observaba las verduras y frutas.

Como si su mente deseara jugar con él lo volvió a transportarse a aquel momento.

Recordó que antes de irse, Yibo lo abrazó y en medio del momento sus manos parecían tocar su espalda de arriba a abajo— Juraba que tocaría otra vez mi trasero... —Suspiró mirando un durazno en sus manos.

— Espera... ¡¿Qué?! ¡¿Acaso me volví un pervertido?! ¡¿Por qué quiero que Yibo toque mi trasero?! ¡¡Eso no es aceptable!! —Dejo la fruta con fuerza en su lugar.

— No... no... no está bien que piense en esas cosas ¿verdad?

Durante su divagación entre aquel momento y sus deseos internos sintió como alguien había tocado su hombro— ¡Ah! —dio un leve salto alejándose y mirando hacia aquella persona.

Era Li Yang.

— ¡O-Oh! ¡¡D-Discúlpeme!! —enseguida el chico se inclinó hacia Xiao Zhan— ¡N-No era mi intención de asustarlo!

Xiao Zhan soltó un suspiro dándose cuenta de lo ridículo que había sido, y colocó su típica sonrisa, pero con algo de nerviosismo. Como si a un niño pequeño lo hubiesen descubierto haciendo cosas no debidas.

— N-No te preocupes solo me sorprendí —Xiao Zhan vio como Li Yang lo miraba con ojos de cordero y dio palmaditas en su cabeza— Es verdad~ ¡Ya no te preocupes! Mejor, cuetéame... ¿Qué te trae por acá? Es la primera vez que te veo salir sin tu esposo a un lugar público.

— ¡Oh! Vine a visitarlo, pero él está muy ocupado, así que iba de regreso a casa hasta que lo vi aquí de pie y pensé en saludarlo.

Xiao Zhan miró su reloj, ya eran pasadas las 6 de la tarde— ¿Ah? ¿Aun no sale?

Li Yang negó— Pensé en sorprenderlo y regresar juntos, pero parece que están ocupados con muchas cosas ya que ninguno de la familia Wang parece estar en el pueblo.

— Ah... cierto. Todos han de estar en Londres en aquella boda... Me imagino que todo está de cabeza.

— Así es, la señorita Wang confía mucho en Yu Huan para dejarlo de encargado, pero parece que justo había muchos encargos que recibir...

Xiao Zhan miró lo desanimado que estaba su pequeño amigo— Yang Yang ¿Te parece si te acompaño de regreso?

— ¡Me encantaría! Pero... —Li Yang miró hacia el restaurante.

— ¡Oh! No te preocupes, acabo de salir de mi turno y compraba algo para desayunar mañana —Xiao Zhan levantó la bolsa y sonrió.

Finamente el par de amigos caminaron en dirección de la casa de Li Yang.

— ¿Ya logras ubicarte mejor? —preguntó Xiao Zhan.

— Mmm... más o menos... solo ha pasado una semana desde que empecé a salir.

— Mmm~ Con el tiempo te acostumbrarás —respondió Xiao Zhan sonriendo— Me da algo de lastima Li Yang... Ya ha llegado hace algunos años y solo hasta ahora ha tenido el valor de salir de su casa... ¿Qué tan mal lo debió pasar en su anterior hogar para tener gran pavor de salir solo? Recuerdo lo frustrado que se sintió cuando no pudo acompañarme a comprar pan... Siempre tenía que salir con su esposo.

— Yang Yang ¡Eres muy valiente!

El menor lo miró con curiosidad y solo soltó una leve risilla— Eso fue tan inesperado, pero... ¡Muchas gracias!