[1937 | Un Viejo Amor]

Capítulo 16 - La cita

La cita

En las siguientes horas del día, Yibo no podía con el cúmulo de emociones que su pequeño corazón sentía; ¿Cómo era posible que con solo pasar una hora junto a Xiao Zhan, podía alegrarlo el resto del día? Yibo no tenía mente para pensar en una respuesta, solo pensaba en las palabras que el chico le dijo.

"Amigo"

Lo que más deseaba el pequeño Yibo ¡ya era realidad! Xiao Zhan había confirmado que lo consideraba su amigo ¿cuál era el siguiente paso a realizar? se preguntaba el joven mientras cenaba con su familia.

—... Y el profesor dijo "les entregaré una hoja" ¡Era un examen sorpresa! —hablaba Yiaer haciendo que sus familiares rieran menos una persona. Yibo estaba totalmente distraído recordando las bellas reacciones de Xiao Zhan mientras bailaban.

— Debo aprender a bailar para poder enseñarle a Xiao Zhan —pensaba el menor mientras movía el arroz en su plato— Se ve que le gusta la música —gracias a que poco hablaba en la cena, al parecer su familia no notaba lo distraído que Yibo estaba, solo daba pequeñas respuestas como "sí" o "no" siguiendo la conversación.

— No puedo creer que hoy lo abracé, aunque fue sin pensarlo, fue como abrazar una suave almohada pero... algo no me deja tranquilo —pensaba el menor mientras arreglaba su cama para dormir— Xiao Zhan dijo que soy su amigo. Eso significa que puedo acercarme y hablarle cuando quiera ¿no?... ¿Por qué no me siento satisfecho? ¿Por qué una parte de mi está feliz de ser su amigo y otra no lo quiere ser? —De repente en su mente sonaron las palabras de su hermano "ser novio"— ¿Y-yo de verdad quiero ser su novio? —la mente y el corazón del pequeño estaban en sumo conflicto ¿cuáles eran los privilegios de ser su novio? ¿De verdad quería convertirse en el novio de Xiao Zhan?— Al parecer siendo su amigo, deja que lo abrace y tome su mano...—Yibo miró a su hermano quien se encontraba leyendo sobre la cama— Yiaer sabe más... ¿estará bien preguntarle? —Yibo pensó detenidamente sus palabras— Mmm... ¿Yiaer?

El joven al escuchar a su hermanito respondió sin apartar la vista del libro— ¿Qué pasa?

— Bueno... Como es que... que son... —El pequeño no sabía cómo hacer la pregunta correctamente, miles de palabras cruzaban por su cabeza a la vez que sentía que sus mejillas se tensaban de los nervios.

Yiaer bajó el libro encontrando a su hermanito totalmente avergonzado, su rostro cabizbajo y su boca temblaba al tratar de hablar— Mmm parece que es hora de dar consejos como buen hermano mayor —el joven se levantó y se sentó al lado del menor dándole unos leves golpes en su hombro— suéltalo, soy todo oídos.

Yibo miró de reojo a su hermano y después de un suspiro habló— Hoy Xiao Zhan me visitó y estuvimos jugando con el gramófono de la tía y-

— ¡¿Tocaste el gramófono?! —Interrumpió Yiaer asombrado. Su hermano había sido tan atrevido de tocar la cosa más preciada de su madre.

— Si y- —Yibo iba a continuar con su historia pero nuevamente su hermano lo interrumpió.

— ¿No se dieron cuenta que lo tocaste? ¿No te dijeron nada? —Yibo miró a su hermano con un poco de molestia.

— No, ahora deja que termine de hablar —Yibo vio que su hermano asentía por lo que continuó— Lo que pasó fue que... Xiao Zhan nunca había visto un gramófono y le mostré cómo funcionaba así que puse una canción y-

— ¿También tocaste los discos de papá? Wow que atrevido estabas —Yibo no pudo aguantar más y golpeó el brazo de su hermano.

— ¿Dejaras que te cuente o no? —habló bastante molesto.