Apocalipsis | (BL)

C19 - WuYi fue tomado como rehén.

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Advertencia de contenido: este capítulo puede contener representaciones de violencia, sexo, lenguaje ofensivo y se ha marcado como NSFW.

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Xiao WuYi asintió fuertemente ante estas palabras de ayuda con los ojos rojos, apretando la mano del niño al mismo tiempo. Tan pronto como el niño recibió esta respuesta afirmativa, se desmayó completa y cómodamente.

Tan pronto como Xiao WuYi terminó de limpiarse los ojos, inmediatamente tomó la bolsa de fresas contra su pecho y comenzó a sacar mentalmente todo tipo de suministros médicos que había saqueado de las principales farmacias en el camino. De la pequeña bolsa de fresas, sacó los suministros médicos y los amontonó como una colina con varios tipos de medicinas.

A los estudiantes de medicina no les importó fingir estar conmocionados en este momento y rápidamente eligieron los útiles del medio y luego comenzaron a dar tratamiento urgente al niño.

El director Yuan se echó a llorar mientras miraba al niño que tenía aproximadamente la misma edad que su nieto. Realmente no puede pensar en qué tipo de animal podría tratar a un niño tan pequeño de esta manera.

Después de que Xiao WuYi terminó de sacar las cosas de su pequeño almacén, inmediatamente se puso de pie y caminó directamente hacia la aldea. Xie Jun y los hermanos se apresuraron a seguir el ritmo, apretando los dientes al recordar que el culpable, a quien querían apuñalar con mil cuchillos, todavía estaba escondido en la aldea.

Wu WenYu también quería seguirlo, pero el niño no podía moverse, por lo que se le pidió que permaneciera en su lugar para proteger a todos. Al final, solo Xie Jun, Liu Dashan y los hermanos siguieron a Xiao WuYi. Todos los demás se quedaron para ayudar a cuidar al niño.

Xiao WuYi y los demás no tardaron mucho en encontrar la escuela primaria de Xiangyang en medio de la aldea.

Tan pronto como llegaron, Nana encerrada en la pequeña habitación negra los sintió, y los cuatro niños no pudieron evitar llorar.

Sabían que finalmente fueron salvos.

……

Meng GuangYao nunca había imaginado que en un pueblo tan pequeño y roto, alguien encontraría la montaña. Al principio, quería fingir ser un sobreviviente ordinario, pero quién sabía que cuando saliera a su encuentro, un hacha se le acercaría.

Afortunadamente, su primera reacción fue usar su habilidad, que apenas bloqueó el hacha.

Meng GuangYao entendió todo en un instante y maldijo a los conejitos que tenía dentro de la casa.

Una abertura negra apareció en el aire, bloqueando con fuerza el hacha de Liu Dashan. Liu Dashan levantó la mano y la cerró varias veces, pero no pudo retraer el hacha. No pudo evitar mirar al hombre del otro lado.

Al mirar solo su apariencia, Meng GuangYao tenía un rostro honesto, del tipo que parecería inofensivo para humanos y animales. Era muy fácil confiar en las personas que se veían así y tenían poco más de treinta años. Era una pena que su morbosa sonrisa hiciera que toda su cara se viera espeluznante.

—Es correcto saludar a la gente cuando llegas, pero en las escuelas no se promueve la violencia.

Meng GuangYao miró directamente a Xie Jun y a los demás con un rostro arrogante que confiaba bastante en su fuerza, sin entrar en pánico ni temeroso de que sus crímenes fueran expuestos.