Juego de seducción -Shigaraki Tomura-

22. Dabi tiene problemas

Sus labios recorren mi cuello, causando que me de un escalofrío. Tenko sonríe, en silencio y me rodea de nuevo con sus brazos. Vuelvo a acomodarme en su pecho, escuchando sus latidos, que poco a poco se calman.

—Deberíamos bañarnos–digo, en voz baja

—Sí, estamos llenos de sudor—

—Tu semen se está resbalando por mis piernas—

Tenko se ríe, avergonzado. Ahhh, esto es lo más cerca del cielo que voy a estar en mi vida. Me levanto un poco para mirarlo a la cara, sintiéndome increíblemente en paz conmigo misma y con mi mundo. Si todo lo malo que he pasado me ha llevado a Tenko, entonces está bien, ya no sufriré más por mi pasado. Lo dejaré atrás después de tanto tiempo.

—Te amo—

—Lo sé—responde Tenko— Y yo te amo a ti, Akane. Mi niño interior se siente seguro a tu lado y es todo lo que he deseado en mi vida—

Me sonrojo un poco sin poder evitarlo. Si estamos hechos el uno para el otro después de todo. Qué sencilla parece la vida a veces.

—Bueno, vamos a ducharnos anda. Damos un poco de asco—me río

Nos ponemos algo de ropa encima y salimos de la habitación para ir al cuarto de baño a darnos esa ducha. En el pasillo nos encontramos con Dabi, que nos sonríe y se mete en su habitación. Qué cotilla se está volviendo últimamente. Entramos en el cuarto de baño y Tenko abre el agua para que se vaya calentando. La verdad es que nos hemos pasado con el sexo hoy, estoy un poco adolorida, pero no me quejo, me ha encantado.

Tenko se mete primero en la ducha, y me deja sitio para que yo también pueda entrar. Suspiro, feliz y tranquila. El agua esta bastante caliente pero es muy agradable y me relaja los músculos. Ojalá la vida fuera siempre así de tranquila, estaría bastante bien, aunque quizás acabaría por resultarnos aburrida. Tenko me abraza por la espalda y me pega a su pecho, dándome pequeñas caricias en el hombro y en el estómago. Es agradable, así que me permito apoyar la cabeza en su hombro y cerrar los ojos, disfrutando de la atención.

Ahora vamos a tener una época de paz, antes de empezar la guerra contra los héroes. Poco a poco estamos movilizando a muchos villanos y organizando algo mayor que la Liga de Villanos: algo mucho mayor que mi propia asociación. Vamos a liquidar a cada héroe que intente ir en nuestra contra, a cada héroe que no se arrodille ante nosotros. El mundo va a ser nuestro, y dejaremos que la sociedad se dé cuenta del gran error que ha cometido, pues la gran mayoría de las cosas que están mal son por culpa de la misma sociedad y nosotros vamos a hacer que supliquen clemencia y lloren del terror.

Somos el puto karma de toda esa gente. Los abandonados por los héroes, los marginados, los dejados de lado. Ahora llega nuestra supremacía.

—¿En qué piensas?—pregunta Tenko, enjabonando mi cuerpo

—Pienso en que pronto vas a ser el rey del nuevo mundo, mi amor—

—Y tú serás mi reina, Akane. Nadie más que tu puede ocupar ese puesto—

—Acepto—respondo

Me lavo el pelo sola mientras Tenko se aclara y sale de la ducha. En cuanto termino cierro el grifo y salgo, envolviendo mi pelo en una toalla. Uso una toalla más grande para secar mi cuerpo y me visto, poniéndome un pantalón de chandal negro y una camiseta roja de Tenko. Desde que me fui de aquí ya no tengo ropa mía y la única que tenía está sucia, tengo que lavarla. De todas formas, pronto vendrá Four a traerme ropa y más cosas. Después de todo, me mudo de nuevo y, esta vez, espero que de forma definitiva.

—Una semana para nuestra boda—digo en voz alta—¿No es asombroso?—

—Lo es. Aunque estoy impaciente, si por mi fuera, nos casaríamos hoy mismo—

Salimos del baño y volvemos al cuarto de Tenko para dejar nuestras cosas. Como ya es la hora de la cena nos reunimos con el resto en el bar. Twice y Toga han ido a buscar comida china. Dabi llega poco después que nosotros. Se sienta la barra y le pide a Kurogiri un vodka con hielo. Es raro verlo beber alcohol, pues no suele hacerlo.

—¿Te han roto el corazón, albino mío?—pregunto

—Sin comentarios—responde, visiblemente molesto

Al verlo así me preocupo, así que me acerco a él para que el resto no escuche nuestra conversación. Tenko se une a nosotros.

—No quiero hablar del tema—gruñe

—Si hay algo que te molesta en serio no deberías guardártelo para ti solo, Dabi—

—Paso. Os burlaréis de mí—

—No lo haremos—responde Tenko

—Hay ...hay una persona que me está molestando—

Levanto una ceja sin poder evitarlo, perpleja. ¿Dabi siendo molestado? ¿Dabi dejando que lo molesten? No entiendo nada.

—Mátalo y listo—responde Tenko

—No... no lo estáis encendiendo—resopla—Es... es una chica—

—¿Una chica? Explícame todo—digo, emocionada

Dabi no hablaría de cualquier chica. Es del tipo de hombre que solo quiere líos casuales, normalmente un encuentro o dos y a por otra nueva. No es sentimental.

—¿Te gusta esa chica?—pregunto

—Cállate. No me gusta, es simplemente que es molesta—

—No sueles dejarte molestar—menciona Tenki, burlándose un poco

—¿Es guapa? ¿Cómo es? ¿Te has acostado con ella?—

—Claro que me he acostado con ella—es lo único a lo que responde—Creo que ese es el puto problema—

—¿Cuál es el problema? No te sigo—dice Tenko

—¡Joder! Qué no puedo sacar a esa mujer de mi cabeza. Intenté ignorarla y olvidarla, pero es imposible. Desde qué me acosté con ella está metida en mi cerebro, ¡hasta el fondo!—

—Oh, que lindo Toyaa~—sonrío—alguien está encaprichado—me burlo

Sé que dijimos que no íbamos a meternos con él, pero no podría resistirme. Además, Dabi se burló mucho de mí y de Tenko, así que me parece justo

—No es gracioso—replica Dabi, frunciendo el ceño—No quiero esto, no quiero pensar en ella de esta forma. Ella solo tenía que ser un polvo más—

—Si no se ha quedado en un polvo más, por algo será, ¿no crees?—

—No quiero esto—gruñe—Esa mujer ha tenido que hacerme brujería—

—¿Brujería? Pues menuda fiera debe ser en la cama entonces—

Tenko se ríe, cosa que molesta a Dabi. Intento controlar mi risa para que no se enfade más. Resopla y se pasa las manos por el pelo. Parece estar realmente frustrado.

—¿Por qué te pones así?—pregunto—¿Es mala chica? ¿Una heroína?—

—No, nada de eso—se traba—Es que ella...está loca, ¿sabéis? Me llama y quedamos, luego me ignora y no parece importarle nada. Es...una perra sin corazón—

—Ya sabes que no me gusta que se use la palabra "perra", Dabi—lo interrumpo

—Perdona. Pero es que ella... ha roto todos mis esquemas—

Me muerdo el labio, reteniendo las palabras que querían salir de mi boca. Lo que pensé fue "el amor rompe los esquemas de todos", pero sé que eso no le gustaría nada a Dabi. Quizás no tiene nada que ver con eso, o quizás sí, pero eso solo es asunto de Dabi, al mdnos de momento.

—En fin, no quiero hablar más de eso. ¿Tenéis algo que contar? Quiero distraerme—

—Mañana va a venir una de mis nuevas chicas aquí, quiero que la conozcáis. Ah, y Tomyra y yo nos casaremos la semana que viene—

—¿Qué?—