Gavi
Había pasado otro día aburrido en casa, con más preguntas por parte de mi hermana que no me moleste en responder, pero una llamada me alegro la tarde, pero luego de eso el tiempo pasó lento.
Al día siguiente me desperté de mejor humor, desayune alegremente, salí a caminar, vi alguna película, todo normal hasta que empezaron a tocar la puerta.
—Gavi podrías abrir —dijo mamá desde la cocina.
Fui a abrir la puerta y me encontré con Nico y Ferran, ambos al verme sonrieron.
—Hola chaval —dijo Nico y me dio un abrazó.
—¿Como haz estado? —preguntó Ferran desordenandome el cabello.
Me agradaba sus visitas, pero a la misma vez no.
—Bien, gracias por preguntar —cerré la puerta, ellos fueron a la sala y tomaron asiento—. ¿A qué se debe su visita?
—Pues venimos a invitarte a ir al club hoy por la noche, pero antes necesitamos que nos acompañes —dijo Ferran.
—¿A dónde quieren que los acompañe?
Ellos se vieron entre sí y fue el turno de Nico pars hablar.
—No hagas tantas preguntas y vámonos.
Ambos se pusieron de pie y mamá salió de la cocina, seguida de mi hermana.
—Oh, hola, espero no le moleste si nos llevamos a Gavi por un momento —habló Ferran.
—Claro que no, pueden ir.
Salimos de casa y nos subimos al auto de Ferran, conforme él iba conduciendo empecé a reconocer el camino y no me gustaba a donde nos dirigiamos.
—Vamos a casa de Pedri —fue más una afirmación que una pregunta.
—Sí, él me prometió que cuando volviera saldríamos.
Grandioso, tendría que pasar parte de la tarde y de la noche en compañía de Pedri, lo que necesitaba en estos momentos.
Llegamos a su casa, Ferran tocó el timbre y el hermano de Pedri nos recibió.
—Pasen, mi hermano está en su habitación.
Nos dirigimos a la sala cuando escuchamos pasos en las escaleras y lo ví, aunque mi mirada también se dirigió a la chica que estaba a su lado y otra vez sentí un asco en mi estómago, ¿por qué carajos ella lo tenía que tocar?
Tenía que calmarme, es normal que me sienta así, él es mi mejor amigo y todos sienten celos cuando otra persona que no te agrada está cerca de su mejor amigo o amiga.
No hay peor ciego que el que no quiere ver, hazle caso a tu conciencia, él te gusta carajo.
Que no me gusta, solo acepté la apuesta porque tenía curiosidad. Kai empezó a saludar a los demás con un abrazo, pero cuando tocaba mi turno solo le dí la mano, ella volvió al lado de Pedri.
Mi mente iba a colapsar, tantos pensamientos que iban y venían, todo era un caos, suspire cansado de toda está situación en la que me había metido.
De repente Nico preguntó donde había conocido a Kai, en realidad yo no sabía donde se habían conocido, pero sí donde se reencontraron.
—En Tenerife, la conoció en Tenerife —dije con un tono de voz un poco brusco.
Ferran lo felicitó, pero luego tanto él como Nico empezaron a decir que se tenían que ir, yo no los podía detener así que les dije que se fueran, luego Fer también dijo que tendría que ir a comprar unas cosas, por lo cual me tendría que quedar con Pedri a solas, eso no me molestaba en absoluto, en cierta forma me agradaba pasar tiempo con él, pero había un problema y era mi humor, había una parte de mí que aún se sentía herido por lo sucedido en Tenerife, también un poco enojado por tener que ver a Kai al lado de Pedri y que le haya dicho cariño, y la otra parte se sentía culpable, porque todo lo que estaba pasando eran consecuencias de tontas decisiones.
