Chaeyoung seguía abrumada, sabía que cuando tenía su ataque de ira, siempre hacía que surjan muchos problemas. Pero ésta vez es poco lo que hizo, nunca había sido tan despistada cómo para no notarlo, sabía lo que era el autismo, o al menos lo básico, habían tocado ese tema en clases.
Suspiró con fuerza nuevamente, había hecho un completo desastre, tomó sus cabellos bruscamente, ahora era ella con ganas de golpearse a si misma y dejarse completamente tirada en el piso, se arrepentía de que su mejor amiga hubiera detenido el golpe, hubiera sido lo mejor, a ver si se le acomodaba su cerebro y dejaba de ser tan idiota.
- Hirai, matame, por favor.- Murmuró con los ojos cerrados y aún tirando de sus propios cabellos.
- Yo no lo haré, pero tus padres sí.- Escuchó a su mejor amiga, giró su cabeza viéndola y alzando una ceja, soltando un pequeño murmuro.- Mira.- Señaló el auto, el cuál estaba siendo llevado por oficiales de tránsito.
- No no no.- Chaeyoung empezó a correr, Momo la seguía por detrás riéndose de ella, por haber ido a hacer su escándalo dejó su auto en una zona de estacionamiento prohibido.
Llegaron al lugar agotadas. Chaeyoung hacía una seña de detenimiento, necesitaba recuperar el aire que perdió en todo el recorrido que hizo, a parte de hacer la vergüenza de su vida, también iba a tener el castigo de su vida.
- Por favor, espere. Ese auto es mío, no noté que estaba prohibido el estacionamiento.-
- Lo siento, señora, pero el auto va a ser llevado, tendrá que ir a recogerlo y pagar la multa.- Le entregó la multa y siguió su camino, llevándose el auto.
- Mis padres me van a matar. ¡Hirai Momo!- Gritó, señalando a su mejor amiga con sus llaves, estaba enojada y tenía que desquitarse con alguien.
- Oh no, a mi ni me veas. Se suponía que debíamos ir a casa con Sana y Tzuyu-ah, pero ¡No, la chica tenía que ir a hacer un escándalo y dejar el carro en la nada!-
-Ush. Hay que pedir un taxi, vamonos. Mañana las vemos en el colegio.- Suspiró, tenía un montón de estrés en ese momento.
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Después de tener la regañada de su vida por parte de sus padres, quería de alguna manera disculparse, no podía con su consciencia. No tenía auto, así que estaba esperando a su mejor amiga.
- ¡Llegó tu panadera con el pan!-
- Cállate, imbécil. Vamos al colegio.- Ignoró a la torpe de Momo y entró al auto, no tenía cómo ir por si sola, así que solo le tocaba esperar por su amiga, la cuál no era la persona más puntual del mundo.
