Amigos no ✔️

18- Noche de tormenta

-9 de Julio-

Amanda.

El 10 de junio nació el bebé de Lizeth y todo salió bien en su parto.

Fue parto natural y dice que no tuvo tantas complicaciones, pero que estaba muy asustada.

Al último terminé equivocándome del amigo de Jorge, porque al final se quedó con ella y Lizeth dice que estuvo con ella en todo momento.

El embarazo de Liliana va perfecto, y es muy probable que el bebé nazca en estos días.

Y Lily y yo somos las más emocionadas.

Decidimos parar en Phoenix para que ella tenga a su bebé aquí, luego continuaremos con nuestro recorrido.

¿Yo que puedo decir sobre mi? Soy la mujer más feliz.

Ahora se que seré madre de una hermosa niña y tanto Dylan como yo estamos muy felices.

Ella es muy tranquila cuando su padre no está, pero cuando Dylan llega y coloca su cabeza cercas de mi panza y comienza a hablarle, dios santo, comienza a moverse como loca.

Todo está perfecto, estoy rodeada de las personas a las que quiero y no podría desear nada más.

Dylan sigue trabajando desde el computador y no descuida su empresa. De encargada dejó a su madre y a Lizeth.

Aunque Lizeth acaba de cumplir los 18 es muy responsable y ha sabido mantener bien las cosas en la empresa.

Yo igual quería trabajar en línea pero Dylan dijo que no era necesario y me dejó de mantenida, por ahora porque no me quedaré así siempre.

Carlos también está trabajando en línea desde su computador, tiene una empresa que le heredó su padre y también es socio de la empresa de Dylan.

Ambos hombres ganan dinero seguido y no se preocupan por nada.

Hoy a estas horas de la noche, hay una tormenta fuera.

Y quien sabe de que está hecho este camión porque los truenos no se escuchan a menos que se abra una ventana.

Dylan está acostado en mis piernas besando mi panza y hablando con la bebé la cual no deja de moverse al escuchar a su padre.

Yo me encuentro recostada viendo una película en la televisión y vestida solamente con una camisa de Dylan y una braga. No llevo sostén porque me aprietan y son incómodos.

Y luego Dylan levantó la camisa hasta mis pechos para poder hablar mejor con la bebé, según él.

— Y afuera hay una tormenta muy horrible — acaricia mi panza — Y mamá tiene miedo.

— No seas mentiroso. Él es el que tiene miedo bebé, porque él es un miedoso.

— No hagas caso, mamá está loca — ruedo los ojos — En fin, ya queremos que nazcas porque ya queremos tenerte aquí con nosotros.

Besa mi panza y la bebé se mueve.

— Ve — señala mi panza — Puso su cabecita para que le de muchos besos.

Él se agarra dándole besos a mi panza y luego sigue hablando con la bebé.

Recibo una videollamada de Lizeth y contesto enseguida.

— Hola nena, ¿como va todo?

— ¡Hola! Todo bien, solo llamaba para ver cómo iban ustedes por allá con su casa rodante.

— Todo de maravilla.

— Que bueno, ¿como van con el embarazo?

— Liliana ya en las últimas, yo todavía no me preocupo. Pero todo va yendo bien. ¿Y tú, cómo vas? ¿Donde está el bebé?