Falling in love

Capitulo 18

Chris.
Lucy hoy de nuevo se quedó en mi departamento y traía un poco de ropa en su bolsa así que no había problema, los dos bajamos a desayunar.
-Crees que pueda tener un caso pronto.
-En realidad no lo sé, ahora Ian y yo estamos trabajando en un caso importante y la verdad no hemos aceptado otros casos debemos prepararnos bien.
-¿De que trata?, llevan con ese caso bastante tiempo, un juicio no puede alargarse tanto.
-Lo se, pero bueno es una larga larga historia, debes leer todos los papeles para poder entender.
-¿Es algo peligroso?
-Claro que no Lucy, solo es complicado algo parecido o a lo de la señora Marlene.
-¿No hay pruebas?
-No y es ahí donde todos nos estamos atrasando.
-Es raro.
-Lo se, pero bueno luego te lo explicaré, ¿nos vamos ya?
-Claro.
Los dos salimos del departamento y subimos en mi auto, en todo el camino Lucy iba hablando de todo, en realidad ella no se calla, bueno suele ser callada pero conmigo ella es diferente y me da tanta ternura que no puedo evitar reír, me duelen las mejillas de tanto sonreír. Llegamos a la oficina y bajamos del auto y entramos, saludamos a Lily y Ian de nuevo estaba con el.
-¿Ustedes no trabajan?
-¿Y ustedes viven juntos?-dijo Ian
-¿Ustedes son novios?
-Si, ¿algún problema?
-Claro, en las políticas dice que no se puede tener relaciones dentro del bufete.
-Y tú qué dices Vélez, andas con Lucy.
-Yo soy diferente, me sorprende que no lo entiendas Flynn.
-Lily no es una abogada y tú estupida política solo incluye a los abogados.
-rode los ojos- bien, tienes razón, te odio por saber todo Ian.
-Lo se-ríe- pero se que también sin mi no puedes vivir.
-Cállate o te voy a despedir.
-Despídeme.
-Sabes que no lo haré.
-Ríe- lo se.
-Ustedes están locos-dijo Lucy.
-Si que lo están.
-Pero entonces ustedes están saliendo oficialmente.
-Si.
-Ustedes no van a confesar.
-Si estamos saliendo chicos ya felices-dije serio
-Claro que si hermano, ahora ya no serás tan amargado.
-Ríe- Eso esperemos.
-Bueno ya basta de charla, vayamos a trabajar.
-Si vamos, adiós chicos-dijo Lucy.
Lucy y yo subimos hasta nuestras oficinas y ella entró a la mía.
-¿No vas a trabajar?
-No tengo nada que hacer Christopher, alguien no acepta los casos que le llegan a las manos, al menos sabes si son personas que en verdad no nos necesitan.
-Lo se Lucy, son gente como la familia Williams, que ofrecen demasiado dinero pero por lo que quieren pelear no es lo más legal.
-Entiendo, lo lamento debo confiar en ti.
-Claro que si mi amor.
-Pero entonces qué hago.
-Leeré algunos de estos caso y veré si alguno es digno de poder representarlo.
-Está bien, bueno té dejo trabajar-se fue.
Leí todos los caso y encontré uno la Familia Fernández, tome los papeles rápido y corrí a la puerta para buscar a Ian pero cuando la abrí el ya iba llegando con los papeles.
-La familia Fernández-dijimos al mismo tiempo.
-Pasa.
Entramos a la oficina.
-¿Lo leíste?
-No aún no, solo leí el nombre y iba salir corriendo a buscarte.
-Yo tampoco lo leí, pero se me hizo muy raro y vine a verte.
-Hay que leerlo.
Lo empezamos a leer y cada que avanzábamos el caso empeoraba que hace la familia Fernández enredada en esto.
-Ian esto está raro.
-Lo se, por que piden tanto dinero.
-Murió el señor Ricardo Fernández, ¡Ian que es esto!
-Vámonos a California mañana, no mañana no, hoy mismo, empaca tus cosas, tenemos que visitarlos.
-Ian hay que leer estos papeles.
-No Christopher, vámonos ya, yo quiero escuchar todo de su propia boca, si hicieron algo ilegal me importa un carajo yo los defenderé.
-¡Te estás escuchando!
-¡Christopher es nuestra madre!
-No no es nuestra madre.
-Bueno es como nuestra madre y los demás son como nuestros hermanos, por favor vámonos en el primer vuelo.
-Pero, por qué nos buscan, por qué un bufete de Nueva York.
-Por qué somos nosotros.
-Ian, si hicieron algo ilegal no podremos ayudarlos, no meteremos las manos al fuego solo por unos miles de dólares.
-Pero es Inés, la señora Inés, sabes que fue como nuestra madre.
-Lo se, bien hay que irnos ya, vete a tu casa ahora, dile a Lily que compre cuatro boletos para California.
-¿cuatro?
-Tu, Lily ,Lucy y yo.
-¡¡Las vamos a llevar!!
-Bueno, dejamos a Lily.
-¡No!, ya le digo que compre los boletos.
Ian salió corriendo y yo fui a ver a Lucy y ella estaba en su computadora mirando no sé qué.
-Nos vamos ahora.
-¿Que?, ¿a donde?
-A California.
-¿Que?
-Vamos Lucy te explico en el camino.
La tome de la mano y salimos de ahí juntos, primero llegamos a mi departamento, tomé algunas cosas y las guardé en mi maleta.
-¿Por qué vamos a California?
-Tenemos un caso, necesitamos de tu ayuda Lucy.
-Bien, pero me puedes decir de que trata y por qué iremos hasta California.
-Es alguien importante para mi.
- ¿Quien?
-Mi nana, ella es como mi madre, después de que mi padre me alejo de mi verdadera mamá la señora Inés fue encargada de criarme a mí y a Ian, ella hizo que los días y años lejos de mi madre fueran verdaderamente felices.
-¿Hace cuanto no ves a tu mamá?
-No sé tal vez desde que tengo 4.
-Es por eso que querías ganar el caso de la señora Marlene.
-Si, no puedo creer como una persona es capaz de quitarte una felicidad solo por una venganza o porque ellos así lo quieren, es ridículo.
-Lamento hacerte recordar cosas feas-Lo abrazo.
-No te preocupes-la abrace- Termine la maleta, ¿vamos a tu casa por la tuya?
-Si, vamos.
Guarde todo y salimos del departamento,Lily me mando el vuelo y salía a las 6 de la tarde, quedé con Ian de vernos en el aeropuerto, pasamos al departamento de Lucy guardo sus cosas y nos fuimos rumbo al aeropuerto.