Destinada al Alfa

Capitulo 45. Rescate y Masacre

Caleb

Llevamos dos horas de camino y aún faltan otras dos hasta llegar a los viejos almacenes de los muelles.

El consejo ha movilizado bastantes hombres, seremos unos cien de diferentes especies, la única que no está son los vampiros. A ellos no les gustan los tratados ni las normas, aunque normalmente lo suelen respetar por no entrar en guerra.

Aunque he visto las habilidades de la bruja y Black me ha asegurado que su madre es la mejor, no puedo dejar de sentir preocupación por Serenety y Luz. Se que ella es capaz de defenderse pero si se tuviese que convertirse en loba podría poner en riesgo al bebé. Espero que no ocurra nada en mi ausencia. Si eso pasara no me lo perdonaría jamás.

Cuando la noche está apunto de caer llegamos al lugar indicado, estacionamos unos metros más lejos.

Lejos de las miradas, aseguramos el perímetro y vigilamos en la distancia. Al parecer hay cinco hombres en el exterior, estos están cerca de cuatro furgones de color negro, hablan entre ellos y parecen nerviosos. Uno recibe una llamada y da la orden a los demás de entrar en el almacén.

Desconocemos el número total de individuos pero no podemos esperar más, nos dividimos en cinco grupos. Veinte hombres se quedan en la parte de atrás del almacén, los siguientes veinte en un lateral, el tercer grupo se posiciona en el otro lateral. Cada grupo pone unos amuletos en el suelo, según la bruja si aquí hay un brujo esto bloqueará su magia al menos unos minutos. Eso debería ser suficiente para lograr nuestro cometido.

El cuarto grupo se va hacia los furgones, son expertos en desmontar automóviles, no sé de dónde los habrá sacado el consejo pero son muy útiles.

Y solo queda un grupo este está liderado por Black y por un servidor, le pido a la Diosa por su favor, no quiero perdidas en mis filas y menos que algún niño pueda resultar herido o...

No quiero ni pensarlo...

Nos convertimos en lobos antes de entrar, mientras dos gigantes tiran la puerta abajo. De la nada dos vampiros se abalanzan sobre mi, veo que a Black también le está atacando otro ser que no puedo reconocer.

Un maldito vampiro me clava un puñal o cuchillo, la piel me arde y la sangre querer escapar de mi cuerpo, el dolor es horrible pero eso no me detiene de un zarpazo arranco la cabeza de uno de los desgraciados, el segundo de mis atacantes no parece ser tan valiente ya que intenta escapar pero tampoco le doy la oportunidad de hacerlo. Un pequeño elfo de acerca a mi y saca el arma que tenía alojada en mi lomo, el dolor cesa en ese mismo instante aunque la sangre todavía no deja de brotar...

Avanzamos hasta la siguiente sala allí hay más jaulas de las que puedo llegar a contar, todas están llenas de niños. En todas ellas hay un niño y una niña, excepto en una que sola hay un niño. Las ventanas están rotas por lo que está gentuza ha debido de escapar o intentarlo más bien, ya que espero que los otros equipos hayan sido capaces de detenerlos.

Sacamos a todos los niños de las pequeñas jaulas, aunque tenemos un problema hemos destrozado todos sus transportes por lo que tendremos que esperar unas horas hasta que vengan a buscarlos.

No hay prisioneros, todos están muertos y esparcidos por el suelo, esto es una pequeña victoria pero no es una guerra ganada, ya que hemos destruido una célula de la red solamente.

Escucho un gorgojeo a mi espalda, me acerco y veo como uno de esos hombres no está muerto. Me acerco un poco más a él y lo escucho hablar:

— Está vez las has salvado pero no podrás hacerlo siempre...—

— Qué dices desgraciado!—respondo levantando a ese sujeto y zarandeándolo sin ningún éxito porque segundos después yace entre mis brazos muerto.

— Vamos amigo, es hora de volver a casa— dice Black a mi espalda.

****

— Serenety...- paso al dormitorio gritando su nombre, veo como está dormida plácidamente, ni si quiera se da cuenta de mi presencia, solo necesitaba saber que ellas estaban bien y gracias a la diosa lo están.

Me meto en el baño y me doy una ducha, miro mi costado en el espejo y veo como ya casi está curado, cojo una toalla y me envuelvo de cintura para abajo.

— Cuándo has vuelto?—dice la mujer más hermosa del mundo, ataviada con un pijama horrible y el pelo despeinado.

—Hace un rato, no quería despertarte, se te veía tan en paz—

— Y lo niños? Todo bien— dice desperezándose.

— Todo bien, respondo y evito su mirada—

— Cuando estés preparado para hablar de ello, te estaré esperando, ahora me voy a la cama... Este embarazo no hace nada más que darme sueño— dice acercándose a mi y dejando un beso sobre mi mejilla.

Un escalofrío recorre mi cuerpo, no quiero mentirle pero tampoco quiero decirle que quizás en algún momento vuelva esa gente para hacerlas daño.

Tengo que descubrir de quién se trata, quién se esconde tras las sombras. Porque si algo tengo claro es que esto es algo personal. Se que he hecho muchas cosas de las que puedo arrepentirme, he sido cruel y despiadado con mis enemigos pero creía haber acabado con todos. Por lo que veo me equivocaba.

Me echo agua fría sobre la cara y suspiro, tengo que luchar con uñas dientes por mantener la seguridad de mi familia. Serenety ya ha sufrido demasiado para hacerlo de nuevo, se merece una vida tranquila y feliz.

Pero sobre todo se merece ser amada, cuidada y respetada. No solo por mi sino por todos y cada uno de los integrantes de la Manada. En la suya ya la adoran y en la mía estoy segura de que también ya que no hay mejor Luna y mejor Alfa que ella.

Me meto en la cama y la abrazo, ella se voltea y deja un beso sobre mis labios, respirando su aroma me quedo dormido.

A su lado lo tengo todo y sin ella no tengo nada.

Fin.

Nota:  Aunque está escrita la palabra fin, aun falta el epílogo y un extra o dos. Gracias por ser parte de esto.😘😉